CAPÍTULO 21. Me haces daño

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11 de agosto del 2024.

ALICIA.

Edam cumplió su palabra, estamos horas probando los diferentes platos de la cena para la boda y no les voy a mentir soy una amante a la comida y esto ha sido lo mejor que he hecho en todo este tiempo, Rose mando la dirección a Edam, él paso a la mañana por mí, en mi mente pasa una y otra vez lo que paso en la clínica, Edam y yo estábamos así de besarnos, y eso esta mal Alicia, es solo un contrato, no voy a mentir si quise, no, quiero ese beso como no tienen idea.

-Preciosa-salgo de mis pensamientos al ver a Edam mostrándome unos postres, que se ven deliciosos-Ven, vamos a probar-extiende su mano y la tomo, me jala y me da el postre en la boca y me carcajeo.

-Mmm, está delicioso-su pulgar limpia mi labio que tiene un poco de mermelada de mora, y lo prueba.

-Si, está delicioso-solo lo miro como una tonta, y me sonrojó y él sonríe tan feliz, que hasta a mí me pone feliz.

El carraspeó de alguien hace que nos separemos, pero no suelta mi mano.

-Señores, debemos ver el diseño de su pastel-habla el hombre mayor que nos esta ayudando, decidimos con Edam que la comida y postres lo haremos en lugares no conocidos mundialmente, como quisieron mi padre y él.

-Queremos algo sencillo y grande, con claveles blancos y rayones dorados, solo eso-digo, Edam y yo, ya decidimos el diseño y ese sería, el hombre anoto y nos mostró un boceto que me encantó, ya van hacer las síes de la tarde, y aún no terminábamos.

El hombre llamado Mayckol, el señor Mayckol nos dijo que esperáramos que tardaría.

Estoy muy casado, Edam y yo nos sentamos en los muebles del lugar, el lugar es acogedor y antiguo.

Pongo mi cabeza sobre el hombro de Edam y su olor invade mis fosas nasales, su aroma es tan cálido y delicado, su hombro es cómodo, cierro los ojos, pero no debo dormir, pero estoy cansada y caigo dormida en su hombro con su olor en mi cabeza.

Siento un calor en diferentes partes de mi cuerpo, pero el sueño me gana.

-Preciosa-escucho a lo lejos-preciosa-escucho mas cerca-preciosa.

Despierto y siento las manos de Edam moviéndome delicadamente.

-Preciosa-susurra-creí que te habías muerto, eres de sueño pesado, preciosa.

Sonríe y me siento, estoy en el auto, como carajos llegue aquí.

-Te cargue, y me sorprendió que no te despertaste.

Ah, con razón, sería muy raro que estuviera aquí.

-¿Ya nos vamos a casa?-digo y Edam me mira alzando una ceja.

-¿A casa?

-M... Me refiero a mí departamento ya sabes, no una casa en si de los dos.

Edam se ríe y prende el auto.

-Buena idea princesa, mañana estamos libres, ya esta casi todo de la boda, solo falta tu vestido y ya sabes podríamos buscar un lugar donde vivir-lo miro y haber que digo, yo no he vivido con alguien que no sea mi familia y solos los dos como una familia que no somos-técnicamente sería parte del contrato.

Es cierto es por el contrato.

-Tienes razón, si no lo hacemos sería raro que estemos casados y no vivamos juntos, mañana pasa por ti al medio día.

Edam me mira y carcajea, en estos últimos días lo he visto muy feliz y no se el porqué de esto.

-Solo porque tengo una junta en la mañana te perdono la hora, ya sabes que a mí me gusta madrugar.

MENTIRAS LACERANTES. ( BORRADOR)[+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora