Los hermanos Beltrán

Vivir juntos.

SANTIAGO'S POVS

Llegamos como en 29 minutos al hospital, nos cogió un poco de tráfico y parece que cuando más apuro tienes, el karma te dice pues no mi ciela te voy a detener en todos los malditos semáforos grrr.
No me di cuenta que estaba muy intenso al manejar hasta que sentí que Sam me toco la cabeza, como el estaba atras mío.

- Cálmate amor mío, no ganas nada poniéndote así, el peque esta bien.
No es ningún problema de la cabeza que necesite atención urgente.

- Pero se que está sufriendo con el dolor y justo ahora hay tráfico grr.

- ¿Quieres que maneje yo?

- No Samuel estoy bien.

Creo que fui muy osco al responderle a mi novio, no fue la forma, muchas veces me enojo que me contesten así mis hijos y yo a la mínima de estres hablo igual.
Decidí arreglar mi error lo más pronto posible.

- Cariño.

¿Me lo dices a mi o al peque? Santi

- A ti amor, disculpa no debí responderte así, dime ridículo pero estoy muy preocupado por mi hijo, se que tú en emergencia miras cosas mucho más graves y que nada te sorprende, pero yo ya no estoy acostumbrado y para mí todo lo de mis hijos desde un resfriado hasta una infección de estómago, es muy grave, cuando eran más pequeños al primer estornudo ya me preocupaba y eso que era médico.

-Te entiendo Santi, es lo más normal yo ahorita aunque no me creas estoy más que desesperado por nuestro niño, es más estoy a punto de ponerme loco, no te estoy juzgando pero debemos tranquilizarnos que no ganamos nada.

Menos mal después de esa conversación ya no hubo más atracones por el tráfico. El peque se quedó bien dormido y cuando Sam le despertó no le vio con la mejor cara.

Yo solo estaba escuchando como Mateo estaba en modo mírame mal y te muerdo y el pobre Sam no sabía como actuar, así mismo era cuando estaba pequeño y se levantaba de la siesta.

- Arriba cariño ya llegamos al hospital.

- ¡No quiero ir!

- Solo te van a revisar campeón anda vamos.

- Tengo miedo.

- A lo mejor te pinchan para bajarte la fiebre, pero será un piquete y estarás mucho mejor.

- Está bien pero después quiero mucho mimos de los dos y quiero un litro de helado.

Sonreí hasta dos litros le puedo dar.

Entramos y dimos nuestros datos y nos dijeron que nos iban a llamar cuando el pediatra se desocupe.
Paso unos 10 minutos y nos llamaron al consultorio 7.

El doctor era muy simpático y muy amable con Sam, creo que eran amigos.

- Bueno me presento soy Carlos Brown soy cirujano pediatrico.

Mi hijo solo dijo buenas tardes, estaba cansadito y sin energía.

- Mi paciente está cansado, vamos acabar rápido para que puedas descansar.

- No entiendo porque me trajeron a este consultorio no soy un niño.

Mi hijo se ofendió ya que el doctor tenia decoración muy infantil para llamar la atención de los niños pequeños.

Este chico es muy parecido a mi, yo arme el mega berrinche cuando tenía la edad de Alex porque papá tenía que revisarme estaba con infección en la garganta y necesitaba medicamento, el era cirujano pediatrico y yo odiaba que me atienda en su consultorio ya que los pacientes eran pequeños y yo era casi tan alto como el. Me acuerdo que le dije que yo no me iba atender ahí y buena suerte si intentaba obligarme y salí corriendo al consultorio de Julián. Papá estaba que soltaba chispas y cuando me agarró me iba a dar unas palmadas por decirle en ese tono, pero Julián lo evito se puso en el medio y le dijo ahorita no, estamos en el hospital y tu hijo está enfermo cálmate respira y deja que lo atiendo yo, tu niño está malo y la decoración de tu consultoria es un tanto ridícula amigo.