Collision - Minchan/Minbin

Veintiuno.

Chan llevó al chico a su casa, ayudándolo a subir las escaleras sin caerse y en silencio, pues no quería que sus tíos se enteraran.

Sabía que los sábados sus tíos se levantaban temprano para hacer las compras, por lo que si todo salía bien, nadie se enteraría que Minho había pasado la noche ahí.

Subieron y una vez en la habitación de Chan, Minho se sentó en la cama del pelinegro.

Chan buscó entre su ropa algo para que Minho durmiera, pues la ropa que tenía actualmente, además de ser incómoda para dormir, olía horrible a alcohol y ahora estaba llena de tierra.

Consiguió un pantalón deportivo, una camiseta ancha y un boxer nuevo, le entregó todo al chico en sus manos junto con una toalla limpia.

—Deberías ducharte para dormir.

—¿Crees que huelo mal? —Preguntó Minho con un puchero adorable a los ojos de Chan.

Chan no pudo evitar reírse un poco.

—Claro que no, Honnie. Es solo que eso te ayudará a que se te baje mejor el alcohol, además debes estar sudado y recién bañado dormirás más cómodo —Le explicó lentamente mientras lo ayudaba a llegar al baño— Si necesitas ayuda, estaré en mi habitación —Le dijo.

—¿Y si necesito que te duches conmigo? —Preguntó coquetamente Minho, pasando un dedo por el pecho de Chan.

—Esa ayuda me gustaría dártela pero en un momento en el que no estés ebrio y sepas completamente lo que estás haciendo, por los momentos, confío en que podrás ducharte solo.

Minho frunció el ceño y le cerró la puerta del baño en la cara a Chan, quien se rió por la actitud del chico y luego se fue a su habitación para cambiarse la ropa a una más cómoda.

Esperó a que Minho volviera ya vestido y oliendo a jabón, no a alcohol.

Y se acostaron ambos en la cama.

Al principio, cada quien le daba la espalda al otro, hasta que Minho cortó el silencio.

—Channie —Llamó su atención el pelirrojo— ¿Puedes abrazarme?

Chan sintió su corazón acelerarse por la petición.

Aceptó inmediatamente y se dió la vuelta para abrazar al chico por la espalda y dormir en forma de cucharita.

Minho suspiró, sintiéndose feliz. Se sentía completo estando en los brazos de Chan.

Se sentía correcto.

Con una sonrisa en el rostro cerró los ojos para dormir, siendo seguido por Chan, quien no dejó de hacerle caricias en el abdomen a Minho hasta quedarse dormido.

🪐

A la mañana siguiente, Minho sentía su cabeza doler, su memoria estaba muy enredada y solo sabía que debía haber bebido mucho para sentirse así.

No quiso abrir los ojos pues sabía que la luz del sol lo empeoraría.

Sintió los brazos fuertes rodeándolo, por lo que con una sonrisa se giró y acercó más su rostro al pecho contrario.

Las manos traviesas de Minho acariciaron la espalda de quién supuso sería Changbin, bajando hasta su trasero para comprobar lo redondo que estaba, como era costumbre.

Pasó sus manos bajó la camiseta de su novio, moviendolas hasta el frente para tocar su pecho y recorrer su torso.

Frunció el ceño al encontrarse con un abdomen marcado como una tableta de chocolate.