Mientras Emily se preparaba para otro día más, el sonido del timbre la tomó por sorpresa. Al abrir la puerta, se encontró con Sarai, con una sonrisa traviesa en el rostro.
Emily: Sarai, ¿Qué haces aquí tan temprano? [preguntó Emily, sintiendo curiosidad por la visita de su amiga].
Sarai: Solo pensé en pasar a saludarte antes de que empiece el día.[respondió Sarai con un brillo juguetón en los ojos.] ¿Puedo pasar?
Emily asintió y dejó entrar a Sarai, preguntándose qué podría haberla llevado a su casa tan temprano en la mañana. Antes de que pudiera preguntar, Andrea apareció en el pasillo, con una expresión tensa en el rostro.
Andrea: ¿Qué haces aquí, Sarai? [preguntó Andrea, su tono de voz frío y distante].
Sarai: Solo vine a ver a Emily, [respondió Sarai, sin dejarse intimidar por la actitud de Andrea].
Andrea lanzó una mirada fugaz a Emily antes de apartarse, permitiendo que Sarai entrara. Emily frunció el ceño ante el comportamiento extraño de su prima, preguntándose qué podría estar pasando en su mente.
Las amigas se veían muy contentas y Sarai no dejaba de mirar a Emily esperando el momento de estar a solas.
Andrea: ¿Estás aquí porque ayer volvió el amorcito de Emily?
Emily: ¿por qué no te metes en tus cosas Andrea?
Andrea se quedó en silencio, Sarai interrumpió el silencio incomodo que se había creado en el ambiente.
Sarai: Bueno, ¿Qué planes tienes para hoy, Emily? Podríamos ir a la playa o dar un paseo por el pueblo.
Emily agradeció el cambio de tema y sonrió a Sarai.
Emily: Eso suena genial. La playa sería perfecta para disfrutar del día.
Mientras Emily y Sarai planeaban su día, Andrea permanecía en silencio, observando la escena con una expresión indescifrable en su rostro. Su actitud reservada no pasó desapercibida para Emily, quien se preguntaba qué estaría tramando su prima.
El silencio incómodo persistió durante unos momentos, hasta que Andrea rompió finalmente el hielo con una sonrisa forzada.
Andrea: Bueno, supongo que siempre es emocionante cuando un viejo amigo regresa al pueblo.
Emily arqueó una ceja, detectando el tono de sarcasmo en la voz de su prima. Sabía que Andrea tenía una manera peculiar de expresarse cuando algo la molestaba.
Emily: Nathan es más que un viejo amigo, Andrea. Y no veo cómo eso te concierne.
La respuesta de Emily fue firme pero tranquila, reflejando su determinación de no dejar que los comentarios de Andrea la afectaran. Sin embargo, en el fondo de su mente, una pequeña chispa de preocupación comenzaba a encenderse. Andrea siempre había sido impredecible, y Emily sabía que era mejor mantenerla a distancia cuando se trataba de sus relaciones personales.
Andrea soltó una risita burlona antes de dar media vuelta y alejarse, dejando a Emily con un sentimiento de inquietud que no pudo sacudirse fácilmente.
Mientras tanto, Sarai observaba la interacción entre Emily y Andrea con una mezcla de curiosidad y preocupación. Sabía que la relación entre las primas era complicada, y se preguntaba qué podría estar pasando por la mente de Andrea. Sin embargo, decidió no abordar el tema por ahora, prefiriendo disfrutar del tiempo con su amiga sin distracciones.
Sarai: ¿Qué te parece si vamos a desayunar a la cafetería de Daniel?
Emily: una idea genial.
Sarai sonrió, aliviada de ver que Emily estaba dispuesta a dejar de lado la tensión con Andrea y concentrarse en pasar un buen rato juntas.
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Más Allá de las Barreras del Corazón
RomanceLa historia sigue la vida de Emily, una adolescente que reside en un tranquilo pueblo costero, y Nathan el nieto del adinerado magnate local. A medida que sus caminos se cruzan en su juventud, ambos enfrentan desafíos personales y familiares mientr...