Destiny
Mamá es una mujer fuerte, recta, valiente, correcta y un poco enojona. Claro que esto es en su trabajo, porque sí me lo preguntan a mi, yo añadiría que es la mujer más amorosa, melosa, protectora y dramática del mundo.
Añadiendo que un poco molesta.
Ella y papá se conocieron cuando ella era Coronel de la central de Italia y él general. Mamá nunca fue de chismosear sobre la vida de las personas, sólo conocía a Alex Morgan porque era de una familia muy respetada en la FEMF, desconocía que era casado y que tenía un hijo de tres años en ese entonces. Algo que papá aprovechó para estar con ella por los meses que estuvo en Italia.
Para cuando mamá se enteró de su mentira casi seis meses después lo mandó al demonio.
Y unas cuantas semanas luego se enteró que estaba embarazada de mi.
Me tuvo, y luego de varias peleas que el tío Recce me resume en que acababan con mamá deseando la muerte de papá, decidieron que mejor me quedara en Londres la mayor parte del tiempo y que estuviera en la academia.
Después de todo, Londres tríen la mejor academia y la mejor central de toda la FEMF.
Mamá se mudó, los primeros cinco años de mi vida fueron dos semanas con mamá y dos con papá. Pero luego regresó a Italia. Así que pasaba los meses de clases con papá y las vacaciones con mamá en Italia.
Hasta que eso ocurrió.
Me mudé a Rusia con mi abuela porque no quería estar en Londres, y para ese entonces mamá se volvió un poco insoportable al culpar a papá cada minuto del día, así que estar con ella tampoco fue una opción.
Por diez años me queden en Rusia y bueno, el resto ya es algo que he contado.
Respiro hondo mientras bajo las escaleras sintiéndome cansada, tuve una pesadilla y casi no pude dormir en toda la noche. Me hubiera gustado seguir en la cama pero no podía. Mamá acababa de llegar y ya la podía escuchar discutiendo con papá en la sala.
Se supone que llegaba en la tarde, no sé qué hizo para estar aquí tan temprano.
Me asomo. John, mi padrastro, está detrás de mamá de brazos cruzados. Ruedo los ojos ya que no sé a qué viene, es otro que se la pasa molestando.
—Sus gritos se escuchan hasta el segundo piso. —digo llamando su atención— Son las siete de la mañana y no necesito que Nelly ya esté despierta a esta hora.
Christopher tuvo que hacer varias cosas y no se pudo quedar con ella en la noche, así que se quedó aquí. Y probablemente se quede también hoy. A menos que mamá se la quiera llevar.
—Cariño. —mi madre se acerca y me rodea con sus brazos muy fuerte.
—Mamá... —me remuevo incómoda— Ya suéltame.
Se separa tomando mi rostro. Hago una mueca intentando dar un paso atrás. Ella sabe que odio que haga eso y como quiera lo sigue haciendo.
—¿Cómo se te ocurre venir sin avisarme antes?
—Pues...
—Y traerte a Nelly, —me interrumpe—¿qué dijiste en su escuela? ¿La sacaste?
Frunzo el ceño.
—¿Qué no estaba de vacaciones?
Papá de pellizca el puente de la nariz, John me mira confundido al igual que mamá.
—Se supone que comenzó el nuevo ciclo hace un mes, ¿ni si quiera la llevaste?
Ya... Olvidé por completo eso.