CAPÍTULO Veintiuno

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Me desperté bien temprano ya me habían quitado el yeso porque no era una fractura grave, salí a correr por los alrededores para poder pensar que haría con mi vida, habían pasado un mes desde que Jhon volvió a mi vida y sin memoria, no podía pretender quedarme por más tiempo con él, debía resolver este problema y pronto.

Hablaba a diario con Jhonny y mis padres, prolongue mi estadía con Jhon porque fue imposible decirle que no, puso esa carita de ángel suplicante que me derrite, a pesar del tiempo mi corazón aun palpita por él no puedo ser una estúpida y negar que aún siento algo por él, pero así como lo amo a él también amo a Jhonny. Tener sentimientos encontrados cuando amas a dos hombres maravillosos es lo peor por lo que una mujer puede pasar, los dos están haciendo estallar mi cabeza, cada día que paso junto a Jhon voy recordando todos y cada uno de los sentimientos que me hacían volverme cada día más enamorada de él, esto no está nada bien. Esta semana hemos ido a nadar, hicimos terapias con el especialista, también vimos al cirujano para su operación, con esto sus quemaduras serian menos visible, me pidieron hablarle sobre todo lo del pasado hasta donde yo pudiera ayudar, claro obvie las situaciones vergonzosas ha sido duro hablar con Jhonny sin mentirle y cuando converso con Jhon siento que él puede leerme los pensamientos a veces se queda en silencio escuchándome con cara de duda y eso me aterra pensar que me descubra.

¿Cómo amar a dos personas a la vez? ¿Es eso posible? había escuchado de estos sentimientos pero creí que era imposible, siempre pensé que el amor era entre dos personas y que sabrías cuando era la persona indicada, pero esto es simplemente absurdo... hoy después de la cena le diré a Jhon toda la verdad, que estoy comprometida, que pronto me casare y me iré lejos de aquí, que a pesar de que mi corazón estalla cuando lo veo, que quisiera devolver el tiempo y amarlo sin conflicto, no puedo y no debo, hoy me armare de valor y se lo diré.

Después de la cena Jhon me invito a dar un paseo nocturno, me dijo que tenía una sorpresa, ya las sorpresas de Jhon se están haciendo frecuentes y me vuelven cada día más confundida, esta vez se atrevió a tomarme de la mano y yo lo deje, igual me dije que si me iba pronto no hacia ningún daño sentir por última vez esa sensación en la barriga de mariposas volando cuando tú primer amor te toma de la mano y te lleva a dar un paseo, es una acción inocente y nada más, caminamos así por un sendero iluminado por la luna me pidió que cerrara los ojos, lo hice Jhon me guiaba a través del camino, cuando me dice que ya puedo abrirlos, me quede sin palabras habíamos llegado a un pozo con una pequeña cascada, en el suelo había una manta azul con unos almohadones a un lado estaba una botella de vino, dos copas y muchas frutas.

– ¡Jhon, esto es simplemente hermoso! – dije impulsiva

– ¿te gusta?–

–si claro, es hermoso–

–Ven, vamos a sentarnos– me ayudo a sentarme

– ¿Te recuerda a algo?– pregunto mientras servía una copa de vino–

–Ahora que lo preguntas, me recuerda a un lugar donde fuimos de campamento con el colegio– rayos ¿habrá recordado algo?

–Jhon – dije emocionada – ¿pudiste recordar algo?–

Él se ríe – no, recuerda que tú me lo contaste hace algunos días en la terapia– dijo

– ¿estás seguro? Porque no recuerdo haberte contado esto–

–De veras que sí, es que hablas tanto que a lo mejor no recuerdas, pero te juro que si–

Dude un poco, no recuerdo haberle dicho nada sobre esto, pero si él lo dice así fue no creo que haya vuelto la memoria tan pronto ¿o sí?–

"ENTRE DOS AMORES"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora