"ENTRE DOS AMORES"

CAPÍTULO Veinticuatro

Por primera vez estaba sola y sin saber a dónde ir, compre un nuevo celular porque el último había volado por la ventana de la suite de Jhonny, no quise llamar a mis padres porque no quiero realmente involucrarlos en el desastre de mi vida, así que llame a la única persona que sé que me recibirá sin juzgarme...

-hola ¿Cómo estás?-

- ¡Amiga! al fin te dignas en reportarte ¿Cómo estás? -

-no muy bien Patty, la he cagado una y mil veces, mi vida apesta y es literalmente- suspire

- ¡Amiga por Dios! te escuchas muy mal, ¿Dónde estás? -

-Estoy en Londres en el aeropuerto-

- ¿Y eso? Sabía que estabas en Londres, pero me imagine que pasarías navidad con Jhon y sus padres ¿Qué sucedió?-

-Bueno, es una larga historia y no quiero ir a casa, debo irme lo más pronto de aquí-

- ¿Ya compraste el boleto?-

-Bueno si y no, compre uno de regreso a casa porque no tengo más opciones, pero sinceramente, estoy mirándolo porque realmente no quisiera regresar a casa por ahora-

-no vayas... vente conmigo-

- Amiga, los vuelos están colapsados y no quiero utilizar las influencias de Jhon para cambiar de vuelo-

- ¿Acaso eres mojigata? Utiliza esas influencia y vente a pasar navidad y año nuevo y los días que quieras conmigo ¿Te parece buen plan?-

-sí, me parece amiga bella ¿Pero en dónde estás? Porque sé que en casa no es- di media sonrisa

- ¡En México! Guey - soltó una carcajada.

- ¿Qué? ¿En México? Nunca he estado en México- dije

-Con más razón ¡Te va a encantar! anda ve y mueve las influencias de Jhon y te veré aquí en México-

Nos despedimos y Dios está de mi parte, porque simplemente dije que iba de parte de Jhonathan Smith para que me buscaran en una lista de quien sabe que, donde autorizaban a darme el destino que pidiera en primera clase y listo. Dormí durante todo el vuelo, cuando arribamos busque mis maletas, camine a la salida y allí estaba mi amiga con un cartel que decía ¡Feliz Navidad Anabel! Con un gran santa, corrí a su encuentro y la abrace entre lágrimas no sé si de felicidad o de tristeza, su chofer guardo mis maletas y nos subimos al automóvil.

-Amiga un millón de gracias, me has salvado la vida-

-por favor amiga, si no es nada más bien estoy agradecida de que vengas, México te va a encantar, aquí todo el mundo es una nota y súper divertidos-

-amiga que bella estas- le dije

- gracias amiga, pero tú no te quedas atrás, estas guapísima-

-gracias, te extrañe mi loquita- le dije tomándole la mano

- yo más, lo que pasa es que te perdiste con Jhon y de tus amigas ni te acordaste, apenas si te comunicabas por e-mail y una que otra llamada, esos son los errores que cometemos cuando nos enamoramos, pensamos que la vida gira sólo en torno a nuestra pareja y luego nuestro círculo social se achica, nos asfixiamos y cuando volteamos a ver no tenemos a nuestras amigas a nuestro lado, bueno valga decir que sólo las mejores amigas siempre están presentes a pesar de las distancias- me regalo su risa escandalosa.

-lo siento amiga, de verdad no fue mi intensión abandonarte, perdóname... mi vida se complicó de una manera que ni yo se resolverla- suspire.

-amiga te veo muy triste, pero ahora no me cuentes nada, cuando lleguemos nos atragantamos de helado y me cuentas todo con lujos y detalles-