Dicen por ahí que la voluntad nace de la razón y la tenacidad nace del corazón, y en momentos cruciales de la vida, una de estas será la que rija tus acciones.En el caso de Taehyung y Jungkook, la tenacidad es más fuerte que la voluntad. Porque si fuera al revés, Taehyung habría elegido a Hyung Sik. Habría entregado su amor a un hombre que lo dió todo sin pedir nada, y Jungkook habría sido capaz de dejarlo ir. Capaz de renunciar en nombre del amor que le tenía y verlo ser feliz aunque sea con otro. Pero ahí estaba Tae, llorando aferrado a la cintura del hombre que más lo hirió. Y ahí estaba Jungkook, con la mejilla apoyada en su cabeza y apretándolo en su pecho. Negándose a soltarlo aún sintiendo que no lo merecía.
La víctima y el victimario unidos por un amor tenaz que va más allá de sus voluntades.Fueron varios minutos de un silencio que solo fue roto por los sollozos de ambos. Fueron necesarias muchas lágrimas para aplacar el dolor y muchas más para lavar la culpa.
_ Me sentí tan solo y tan perdido _ musitó el castaño _ Eras mi vida, Jungkook. Y cuando creí que nuestro hijo llegaría a colmar esa felicidad, me dejaste. Te fuiste sin decir nada. Sin darme la oportunidad de entender qué había hecho mal. Creyendo que en algo había fallado para que dejaras de amarme. Cuando llegué aquí y supe que estabas con ella, lo único que pude pensar es que nunca lo hiciste.
_ Eso jamás. Nunca dejé de amarte _ apoyó su frente en la contraria y con sus manos alrededor de la carita de Taehyung limpió sus lágrimas _ Te amo, Tae, y sé que también me amas aunque no lo digas.
El castaño bajó la mirada y no respondió. No se atrevió a decir las mismas palabras que Jungkook. Palabras tan verdaderas como riesgosas. Decirlas significaba dejar lo más frágil de sí mismo nuevamente expuesto y a mano para ser destrozado otra vez. Pero Dios sabe que quería hacerlo. Quería decirle que también lo amaba, pero no se puede ofrecer tan fácilmente el alma cuando la herida aún no cicatriza y amenaza con sangrar. Sin embargo, eso no significaba que no estuviese dispuesto a intentarlo.
_ Este no es un paso que pueda dar tan fácilmente.
_ Tae, lo siento. Lo siento mucho _ susurró junto a su boca _ Perdóname por dudar de tí, por ensañarme contigo, por lastimarte. Por favor.
_ No se trata de perdonar. Eso ya lo hice _ afirmó _ Pero me cuesta aceptar que el Jungkook que yo conocí, el que era "mi Kookie", haya querido dañarme.
Al escuchar aquel apodo, el azabache levantó la cabeza para mirarlo de frente.
_ Kookie no existe si no está a tu lado, Tae. Lejos de tí me convertí en una versión aún más oscura del Jungkook que salvaste en aquel puente. Pero estoy trabajando en mis errores y no volveré a cometerlos.
_ Aunque así sea, estoy obligado a ser prudente con esto, Jungkook. Esta vez no soy solo yo. Debo pensar en Soobin antes que en tí y que en mí, porque sin importar lo que yo quiera o sienta, él siempre será mi prioridad.
_ Y la mía, Tae _ el pelinegro apretó el abrazo _ Ustedes son mi prioridad. Déjame demostrártelo.
_ No es tan sencillo. No podemos simplemente retomar la relación donde nos quedamos como si la verdad borrara todo.
_ No quiero borrarlo. Yo siempre cargaré con la culpa y tú con el resentimiento, y aún así no puedo renunciar a tí _ aseguró el pelinegro _ Si yo he sido infeliz todos estos años, y tú no has logrado enamorarte de otro, es simple y sencillamente porque no hemos podido dejar de amarnos.
La resistencia del castaño cedió ante la realidad.
_ Jungkook, yo necesito ser firme y tú no me ayudas _ Tae se soltó y dió un paso atrás para mirarlo amenazante _ Pero, si rompes mi confianza otra vez...
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Entre Viñas y Cerezos 2
Fanfiction2° libro. La hermosa vida de Tae y Jungkook en la finca terminó por culpa de una mentira. Ahora, varios años después, un nuevo viaje a Corea lleva al castaño a reencontrarse con un muy difirente pelinegro. ¿Podrán enderezar sus caminos esta vez, y...