E. 04

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|Jueves 23|

Madison;

- ¡Maldita sea!...mi espalda-. Sobaba mi espalda, no entendía en qué lugar estaba, hasta que mi vista viajo por toda esa grande mansión.

Me pare rápido de aquel piso en el que había dormido y tire la almohada en aquel sofá que estaba ahí en la sala.

- Oh, ¿Bill te dejo dormir aquí adentro?-. Preguntó uno de cabellera larga, que apareció de repente.

- ¿Quién es bill?, ¿El electrocutado?-. Pregunté detenidamente y aquel chico se comenzó a reír.

- ¿Por qué le dices así?, ah ya...por su cabello alborotado-. El chico espero a que yo respondiera.

- Ujum, ¿Ya se fue?-. Pregunté viendo detrás de el, me pareció ver a otra persona.

- No, de hecho...-. El chico que estaba frente a mi fue interrumpido por dos más.

- ¿Tú eres la chica linda que estaba allí afuera?-. Dijo un cabello de espagueti, ¿Eran...rastas?.

- Tom-. Dijo uno que llevaba lentes y tenía cabello común.

- Ah, me llamó madison...un gusto chicos-. Trate de sonar amable.

- Bueno, yo soy georg-. Se presentó el que antes se encontraba hablando conmigo.- el es gustav-. El chico de lentes sonrío.

- Y yo soy tom-. Me miró de forma detenida.

- Bueno, yo me tengo que ir-. Giré y camine rápido dirección a la puerta.

- Si quieres te acompañamos-. Propuso el de lentes.

- ¡No!, gracias en serio.

Ahora ya estaba claro todo el bosque, pero no sabía cómo volver...si me pierdo, me pierdo. Pero de que llegó a casa antes de que mi mamá se enteré que no estoy, llegó.

Bill;

¡Dormí de lo más genial!, me encanta dormír...lo mejor del mundo.

Me levanté de mi ataúd, dejándolo cerrado y yendo al baño...lave mis dientes incluyendo mis colmillos, que cada cinco días los tenia que limar. Aunque no se por que los limaba, ya que estos desaparecen de repente y aparecían dientes normales.

Baje y en la cocina los chicos se encontraban desayunando, sentados en los banquitos que estaban cerca del mesón.

- Buenos días, electrocutado-. Dijo georg una vez que me vio entrar.

- ¿Electrocutado?-. Pregunté.

Oh claro, la chica bicho raro me llama de esa manera. Y esperen, ¿Donde está?, no me digan que se fue porque la voy a dejar calva. Asome mi cabeza por el marco de la puerta y no estaba.

- Se fue hace un rato-. Gustav rio.

- ¿Qué sucede bill?, le ibas a morder el cuello o qué-. La voz de tom era sarcástica.

- Le tengo cierta piedad a los humanos, ¿Ok?-. Me senté en un banquito.- ella tenía que pagarme por dejarla dormir aquí adentro.

𝐄𝐑𝐄𝐒 𝐔𝐍 𝐕𝐀𝐌𝐏𝐈𝐑𝐎; 𝓑𝓴 - EN EDICIÓN.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora