ᴀᴅɪᴠɪɴᴀ ǫᴜɪᴇɴ sᴏʏ [Finalizada]

21

Lando

Se me estaba haciendo muy duro esto. No podía dejar de pensar en ella. Cada vez que la veía querer besarla. Y la rabia que me entraba cuando la veía irse con Óscar y no conmigo. Pasaba mes, tras mes y nada cambiaba. Dos meses y medio lleno de sufrimiento. Si tan solo me hubiera dado más tiempo para pensar sobre ello, si tan solo me hubiera dado la oportunidad de poder sopesarlo...

–Ya quedan dos semanas para terminar la temporada –me dice uno de los mecánicos.

–Ya –y yo sabía que iba a dejar de verla al acabar. No quería–, ¿te digo la verdad? No quiero que acabe.

–¿No quieres un descanso?

–No. No voy a parar hasta ganar.

–Cómo tiene que ser.

–Pero bueno, no todo dura para siempre –reí y miré a Rihanna en la distancia. Había cogido unos kilos de más, pero estaba preciosa. Yo siempre la vería preciosa.

–Ya... mucha suerte para México.

–Gracias –le choqué el puño.

Rihanna

El embarazo empezaba a notarse. Mi cara se hinchaba y con ello mis pechos crecían. Todo el mundo se había percatado de mi aumento de peso, pero nunca nadie dijo nada. Excepto las mujeres. De hecho, Susie, la esposa de Torger, era quien me ayudaba con los antojos. Era la única a la que se lo había contado, más que nada por falta de apoyo y consejos.

Quedaban dos semanas para que terminara la temporada y dejaría de ver a Lando, supongo que tendría que hablar con él en algún momento. No podía evitarlo constantemente. Pero me daba miedo su reacción si se lo contaba. Creo que haría una reunión con todos y lo contaría de una. Así, si Lando reaccionaba mal, los demás lo ayudarían a controlarse.

–Chicos, esta tarde todos en el bar del hotel, tengo que hablar con vosotros.

–#Miedo –puso Albon.

–😂😂😂. Hasta luegui.

Madre del amor hermoso. Sí, miedo. Miedo por mi parte. No tenía ni idea de cómo iban a reaccionar. Y cuando llegó la tarde, llegué la última. Ya estaban todos allí. Fue un poco violento la forma en la que todos me voltearon a mirar. Estaba de los nervios.

–Ri, ¿estás bien? –me dice Óscar.

–Sí, sí. Solo me da miedo vuestra reacción.

–¿Eres narco? –suelta Albon. Se rieron, alivió un poco la tensión, al menos.

–No, coño.

–Bueno, ¿entonces? –me mira Logan–, ¿es algo malo?

–Tampoco.

–Entonces dilo –habla Max.

–Estoy embarazada.

A todos se les abrió la boca de par en par. De todas las miradas que tenía encima, la que más destacaba era la de Lando.

Lando

Se me aceleró el pulso, empecé a notar muchas cosas en el cuerpo en ese momento. Estaba embarazada. Y estaba totalmente seguro de que era mío.

–¡Enhorabuena! –saltan algunos a abrazarla.

Ella sonríe ante el apoyo, y es entonces cuando yo me levanto. No voy a dejarla sola ahora. No voy a desentenderme. No quería ser padre, pero estoy absolutamente convencido de que esto me ha pasado por algo.

–Estoy de dos meses.

–Y es mío, ¿verdad?

–Sí.