Cap 38

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La sonrisa de Felix es tan radiante que siento como si he salido de un búnker subterráneo a una playa soleada.

—Hola —dice, ligeramente sin aliento, mientras se sienta contra una pila de almohadas y coloca el ordenador sobre su regazo—. ¿Cómo va todo? ¿Cómo está yendo la oferta nuclear?

Le devuelvo la sonrisa, el placer extendiéndose por mí como miel fundida.

—Va bien, gatito, gracias.

Y así es. La operación de Jinyoung salió bien, y la Comisión de Energía ya está pululando por la planta de Atomprom, intentando contener la lluvia radioactiva del reactor que explotó durante la noche. La fuga de radiación es mínima, como se esperaba, pero el daño a la reputación de Atomprom es significativo, lo que nos prepara para mi reunión de hoy con el jefe de la Comisión.

Y lo que es más importante, durante la última hora he estado observando las actividades en línea de Felix y examinando su historial de navegación de ayer, y he llegado a la conclusión de que es poco probable que esté afiliado a algún gobierno u organización rival. Si fuera un infiltrado, ya lo sabría todo sobre mí y no necesitaría traducir artículos coreanos con la ayuda de herramientas online gratuitas. Tampoco estaría investigando a los amigos y compañeros de trabajo de su madre utilizando nada más que sus redes sociales públicas, ni buscando empresas de investigadores privados.

Algo más está pasando con Felix, algo que encuentro preocupante e intrigante a la vez.

Mi mejor opción es conseguir que se abra a mí, que me diga la verdad, pero si lo presiono ahora, podría asustarse y tratar de huir, y no quiero eso. No cuando estoy a un océano de distancia. La siguiente mejor opción es hacer que el equipo de Jay piratee su Gmail; el software espía me permite ver los sitios en los que navega, pero no el contenido de estos, como los correos electrónicos personales.

Voy a conseguir las respuestas de cualquier manera. Sólo tengo que ser un poco más paciente.

—¿Qué tal tu día? —pregunto, instalándome en mi silla para tener más comodidad—. ¿Qué hicieron Hyunsoo y tú?

Su sonrisa se vuelve imposiblemente más brillante, y me cuenta todos los progresos increíbles de mi hijo, con su rostro pequeño tan animado que no puedo apartar los ojos de el. Parece tan orgulloso como si Hyunsoo fuera su propia familia, y por primera vez desde que me enteré de la existencia de Hyunsoo y la muerte de Eunbin, mi pecho no se siente tan dolorosamente oprimido cuando pienso en él y en el futuro que le espera debido a la sangre contaminada corriendo por sus venas. En vez de eso, siento una pizca de esperanza al imaginarme a Felix con Hyunsoo, jugando con él, abrazándolo, amándolo... dándole lo que su madre no puede.

Lo que yo no puedo.

Y me doy cuenta, eso es parte de todo, parte del por qué lo quiero tanto. Lo quiero no solo para mí, sino para mi hijo. Quiero que su luz lo toque, lo caliente... que aleje la oscuridad de su herencia el mayor tiempo posible. Lo quiero como lo he visto a través de las cámaras de la habitación de Hyunsoo, agraciando a mi hijo con su sonrisa radiante, haciéndole sentir que es la persona más importante del mundo para el.

Y quiero que lo sea.

Quiero que ame a Hyunsoo incluso más de lo que quiero que me ame a mí.

Lo escucho con avidez hablar de él, absorbiendo cada palabra, bebiendo cada expresión. Lleva una de las prendas nuevas de noche, uno amarillo pálido. Sus ojos marrones brillan, e incluso a través de la cámara, su piel bronceada resplandece bajo la luz dorada de su lámpara de cabecera. Es impresionante, este dulce misterioso chico... y mío. Todo mío. Puede que aún no lo haya reclamado físicamente, pero eso no cambia los hechos. Está hecho para mí, su luz es el complemento perfecto para el vacío oscuro que hay en mi interior, su calor llena todas las frías grietas vacías de mi corazón.

¹Guarida del diablo || Hyunlix✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora