Bella (Mini Serie)

~14~

/varios días después\
La relación con Asher es extraña, de hecho, no hemos cruzado palabra alguna desde el incidente en su cuarto aquel día.
- ¿Lista?
Zack me había pedido grabar unos videos publicitarios para poder presentarlos en su trabajo. Lía dio sus últimos retoques en mí como estilista profesional y me hizo dar una vuelta para enseñarles a él y a Asher su obra maestra, como si yo fuera su maniquí profesional.
- hagámoslo ya
Lía me chocó los cinco con una sonrisa en su rostro. Grabamos un video. Asher había accedido a tocar su guitarra a mi lado mientras que yo cantaba, lo cual me hizo sentir más segura al respecto ¿Por qué? Si todo ha estado super extraño entre nosotros, pensaba en eso mientras grabamos, y en Evan, a quien ví al girar mi cabeza. Estábamos grabando en la plaza, así que había mucha gente observando, pero él se encontraba entre todos. Pude verlo al acabar la grabación. Sus ojos se encontraron con los míos y ambos sonreímos, aunque parecía más una sonrisa de cortesía. Miré a mi lado. Asher me miraba, quizás notando aquel intercambio de miradas con Evan, me sonrió débilmente.
- ¡Yay! Eres una maravilla nena
Lía corrió abrazándome enseguida.
- lo editaré y luego lo presentaré sin demora, gracias Bella
Zack sonrió acercándose. Guardó su cámara y elementos junto a Lía. Yo ayudé a Asher con la guitarra y el micrófono para guardarlo todo en su respectivo bolso.
- hola
Esa voz me hizo voltear. Evan estaba parado allí, a pocos metros de mí, con las manos en sus bolsillos y una sonrisa tímida en su rostro.
- me alegra verte de nuevo
Le dije sonriendo, aunque se sintió algo extraño. Él sacó de su bolsillo la mano con un pequeño sobre y me lo alcanzó extendiendo el brazo hacia mí.
- ¿Qué es?
- mi despedida
Lo miré confundida. Tomé aquel sobre y observaba como Zack y Lía lo miraban igual de confundidos. Giré un poco la cabeza, viendo a Asher, quien me veía en silencio.
- me vuelvo a Italia esta tarde
Algo se sintió raro en mi pecho ¿Qué es lo que siento ahora? ¿Qué es esto que me ocurre? Mi corazón late como si fuera a hiperventilarse. Asher se lo lleva a unos cuantos metros para hablarle, mientras que Lía se acerca a mí con una expresión preocupada.

Asher.
- no puedes irte
- ¿Vas a impedirlo?
- te ama, idiota, ¿Vas a renunciar así a ella?
- a veces debes dejar ir por amor
¡Auch! Eso me dolió porque se sintió justamente como una indirecta, no sé si lo sea, pero así se sintió en verdad.
- se renuncia cuando no tienes ganas de luchar
- o cuando admites que estás derrotado
¡Mierda! ¿Acaso está tirando indirectas? No lo sé, lo único que si puedo asegurar es lo devastada que estará Isabella si él se va y justo recuerda todo lo que vivieron juntos ¡Uff! Soy capaz de buscarlo y darle un buen golpe si llega a hacerla derramar una sola lágrima de sus bonitos ojos.
- mira, Asher, yo amo a Isabella con todo mi ser...
- ¿Pero?
Sabía que habría uno. Él me miró en silencio unos segundos y luego habló.
- debo regresar por trabajo, y, además, no puedo obligarla a qué se enamore de mí... eso sería egoísta de mi parte
- y te es más fácil renunciar
- sé que es complicado de entender
- no es sencillo recordar, y ella lo está haciendo demasiado bien para su condición
No respondió. Se despidió y se marchó así sin más. Me dispuse a mirar donde estaba Isabella, se la veía con expresión triste en su rostro, ¿Será que recuerda a Evan y por eso está así? O tal vez se estaba enamorando de él por primera vez como antes. Me acerqué.
- ¿Ha dicho por qué se va?
- tenía trabajo en Italia
No dijo nada. Zack hizo seña para que lo ayudara a llevar todo al auto y así las dejamos solas.
- ¿Le dirás?
Lo miré confundido, ¿Ahora de qué está hablando?
- lo que sientes, tonto
- ¿Por qué lo haría?
- ¡Uff! Eres un caso perdido, hasta tienes a Lía ayudándote, y ella te odiaba con locura por lo que sufrió Isabella... y no quieres avanzar
- ya te he dicho la razón
- ¡Uff! En verdad, no tiene caso seguir aconsejandote, bro
Cerró el auto tras guardar los bolsos y regresamos con las chicas. Lía se colocó junto a Zack y tomó su mano tiernamente.
- vamos por un café, ¿Vienen?
- no estoy de ánimo
- no te tires abajo, amiga, anda
- vayan ustedes, no seré buena compañía ahora
Pensé un momento. Luego los miré a ellos dos.
- vayan, yo me quedo con ella
La miré y nuestras miradas se encontraron en silencio por unos segundos. Lía suspiró rendida.
- de acuerdo, pero nos deben una salida, ¿Eh?
Ambos se fueron y nosotros nos quedamos allí. Isabella los veía alejarse y luego se alejó un poco de mí para observar a los niños jugando. Me acerqué. Nos quedamos en silencio, hasta que ella habló.
- no tienes que quedarte, estaré bien
- quiero quedarme
Y ahí se terminó la conversación. El silencio reinó nuevamente entre los dos ¡Maldita sea! ¿Por qué tengo que estar tan jodidamente loco por ella? ¿Por qué debe ser tan complicado? Jamás me ha sido difícil expresar mis sentimientos ante nadie, ¿Por qué es tan complicado con ella? Si, además, ya lo había hecho una vez... tal vez por eso mismo es que me resulta complicado... tal vez es el miedo que me está invadiendo. Tanto miedo de volver a tener esa misma reacción suya. Tanto miedo de tener esa misma respuesta y el mismo rechazo ¡No! No me arriesgaré de nuevo. No voy a perderla de nuevo, pero es que... ¡Maldición! Deseo tanto poder abrazarla como me imagino, acariciarla como he soñado, besarla como he deseado ¡Mierda! Todo es tan complicado de soportar, no sé cuánto tiempo más pueda seguir así, no sé cuánto tiempo más logre aguantarme, cuánto logre callar todo esto.
- vamos por helado
Sugerí viéndola de pronto. Ella me sonrió débilmente y terminó por acceder.