Bella (Mini Serie)

~25~

- ¿Qué está ocurriendo aquí?
Ambos nos quedamos en silencio, a decir verdad, no sabíamos que decir. Asher miró a su madre y cada tanto me miraba a mí de reojo. Yo tragué saliva, nerviosa.
- ¿Y bien?
Comenzaba a impacientarse esperando una respuesta ¡Maldita sea! No sé siquiera que decir, aunque ya no se puede mentir, ella nos ha visto y no es ninguna tonta como para no darse cuenta. Asher entonces rompió el silencio, acercándose lentamente hacia ella.
- primero, debes saber que yo lo he comenzado
- ¿Comenzar que cosa? ¿Acaso ustedes están juntos? ¡Por Dios! ¡Asher! ¡Son hermanos!
Aquello lo gritó. Los demás en la sala se apresuraron a levantarse y venir corriendo para ver que ocurría. Entonces sucedió lo que jamás creí, Asher estalló.
- ¡No lo somos! ¡Deja de decir que si, porque no es verdad, mamá!
- ¡Pues para mí lo es, he cuidado de Isabella desde que era bebé!
Entonces me miró de pronto. En su mirada podía notar tristeza... decepción.
- mamá...
- ¡No me llames así, queda claro que no lo soy!
Eso sí que me ha dolido, demasiado. Es obvio que está hablando con dolor encima, pero aun así duelen sus palabras... y con razón, digo, traicioné todo lo que me ha dado desde que nací, traicioné lo que su familia me ha ofrecido, traicioné el techo que me ha dado y el cariño incondicional.
- es que... yo...
- ¡Te he alimentado y vestido! ¡Te he criado como si fueras mi propia hija!
Puedo jurar que mis ojos estaban llenos de lágrimas, lo sentí así porque la vista se nublaba cada tanto y tenía que parpadear varias veces para que saliera el llanto de a poco.
- ¡Jamás creí que algo así sucedería!
Hizo una pequeña pausa. Yo miré alrededor y volví a mirarla cuando dejó salir un suspiro.
- saben que... son grandes ya... sigan con sus cosas
Asher se quiso acercar, pero ella se apartó con unos pasos hacia atrás.
- mamá, mejor cálmate y hablemos mejor
Sin decir más nada buscó su abrigo y su bolso. Salió del apartamento cerrando con fuerza la puerta, haciéndome estremecer por semejante golpe, mientras que Lía corría a mi lado al ver que no reaccionaba en absoluto.
- será mejor que se vayan... todos
- no voy a dejarte sola
- ¡Que se vayan!
Todos quedaron sorprendidos al oírme dar semejante grito. La primera en irse fue Tammy, no sin antes asegurarse de que estuviera bien, le siguieron Lía y Zack. Asher fue el más difícil de convencer para que se fuera.
- tú también vete
- no me iré
- Asher... no quiero pagarlo contigo... vete ahora
No lo miré. Sólo oí la puerta cuando la abría y la cerraba luego de salir. En cuestión de segundos estaba derramando lágrimas desconsoladamente, arrojando al suelo todo lo que encontraba en el camino. Me dejé caer en el suelo al cabo de una hora. Y allí quedé, arrodillada en el suelo, viendo todo el desastre que había ocasionado. Seguía llorando, pero silenciosamente, por lo que me senté con la espalda apoyada en la columna que dividía la cocina de la sala. Toby vino corriendo, subiendo sus patas delanteras sobre mi regazo y queriendo lamer mi rostro.
- no... Toby... no estoy de ánimos
Estaba muy inquieto, como nunca.
- ¡Toby, dije que ahora no!
Tuve que levantarme y llevarlo a mi cuarto para encerrarlo allí y al menos asegurarme que no pisaría algo de todo lo que había roto durante mi ataque.
- quédate quieto, hablo enserio
Lo miré seriamente. Él ladeó la cabeza, sin entender, y volví a la sala para limpiar. Escuché dos pequeños golpes en la puerta, y aunque dudé en abrir, si lo hice... encontrándome con Asher allí parado, tenía sus manos escondidas detrás, como un niño pequeño cuando estánregañando su papá.
- dije que te fueras, ¿Qué parte no entien...?
Sin poder terminar la frase ya había tomado mi rostro entre sus manos, se había inclinado un poco y estaba besando mis labios. Le correspondía el beso, aunque me alejé en cuestión de unos cuantos segundos.
- no te dejaré, jamás lo haré
- ve con tu madre, al menos tú si puedes tenerla
- ella deberá entender lo que sentimos
- ¿Lo que sentimos?
Me confundió un poco, ya que jamás se había referido de esa manera a lo que tenemos, digo que ni siquiera yo sé que tenemos y a decir verdad... jamás lo he escuchado decir algo como...
- te amo, Isabella, siempre lo he hecho... siempre voy a amarte con locura
¡Oh no! Lo ha dicho ¡Maldición! Si lo ha dicho, y muy abiertamente, así sin demora, viendo directamente a mis ojos.
- no sé si tú sientes la necesidad de decirlo... pero no te presionaré... te había dicho que esperaría el tiempo que quisieras, y así será, pero yo no podía esperar para que sepas lo que realmente...
- calla, por favor, no digas más nada
Guardó silencio. Hubo silencio por un momento. Miré a mi alrededor, aún permanecía aquel desastre que había hecho. Solté un suspiro. Lo miré entonces directamente y... por más que mi corazón se estrujaba al pensar en cada una de aquellas palabras sin siquiera decirlas... tomé valor de no sé dónde para hablar, lo más calmada y pausadamente que podía con todo lo que estaba sintiendo en mi interior.
- no te amo
Juro que su sonrisa se esfumó en cuestión de segundos, esa sonrisa que se formó al declararse hace un momento, esa sonrisa que tanto me fascina ¡Maldita sea! ¿Por qué es tan complicado?
- yo...
- tú querías una respuesta, ¿No?
- si, pero... creí que... bueno... con lo que hemos pasado todo este tiempo creí que...
- solo fueron momentos y ya, y ahí deben quedar
Cada palabra me dolía más a mí, puedo jurar que es así, el decir todo aquello con tal de que me olvide rápidamente... no me importa si debo hacer que me odie para conseguir eso, lo importante es que... es lo correcto, ¿O no? Aunque con cada palabra estuviera dejando un pedazo de mi corazón a la deriva, siento que es lo correcto.