Chispas de discordia

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En el corazón de la ciudad, Ecos del Abismo se encontraba en uno de los hoteles más lujosos y exclusivos de la zona. Situado en el centro urbano, se alzaba imponente con su fachada reluciente y su entrada adornada con elegantes jardines y una fuente de mármol. El interior reflejaba refinamiento, con suelos de mármol, muebles de diseño y una decoración sofisticada. El reservado donde los rockeros celebraban estaba ubicado en la planta más alta, ofreciendo vistas panorámicas de la ciudad iluminada por la noche.

- Por nuestro éxito en el festival y por muchos más por venir! - exclamaron con entusiasmo, levantando sus copas en un gesto de celebración.

Por otro lado, Alquimia se encontraba en un barrio más residencial y pintoresco, en las afueras de la ciudad. El piso de Martin estaba ubicado en un edificio de apartamentos de estilo antiguo, con fachadas de ladrillo rojo y balcones adornados con macetas de flores. El ambiente era más relajado y familiar, con calles empedradas y pequeños comercios locales. El salón donde celebraban su éxito era acogedor pero sencillo, con muebles modestos y una atmósfera cálida y hogareña.

- Todavía no puedo creerlo, ¡estamos dentro! - exclamó Violeta mientras engullía un trozo de pizza

- ¡Madre mía! Estoy visualizando aún la cara que se le quedó a Martin cuando dijeron nuestro nombre - comentó Bea entre risas

Violeta y Martin se unieron a las risas cuando se vieron interrumpidos por el sonido del teléfono. Bea, quien estaba más cerca, lo cogió con manos temblorosas mientras los demás miembros de la banda se agolpaban a su alrededor, ansiosos por escuchar la noticia.

- ¡Es la organización del festival! - susurró, tratando de contener la emoción

Los ojos de Martin se iluminaron con una mezcla de emoción y nerviosismo mientras se acercaba para escuchar la conversación.
Bea escuchó atentamente durante unos momentos antes de que una sonrisa de oreja a oreja se extendiera por su rostro.

- ¡Nos han felicitado por superar la fase cero!

El resto de la banda estalló en júbilo, abrazándose unos a otros y celebrando con gritos de alegría. Martin tomó el teléfono de las manos de Bea y escuchó atentamente mientras el representante del festival le daba más detalles sobre el próximo paso.

- Mañana un taxi pasará por aquí para llevarnos a todos al estudio de televisión. Vamos a ser entrevistados junto al resto de participantes del festival. ¡Es increíble!

Al día siguiente, el sol brillaba sobre la ciudad mientras Alquimia se dirigía al plató de televisión en el taxi proporcionado por la organización del festival. El vehículo atravesaba las concurridas calles, llevándolos hacia el centro de la ciudad donde se encontraba el estudio.

Al llegar al plató, fueron recibidos por un bullicio de actividad y emoción. Las luces brillaban intensamente, y los equipos de cámaras y personal técnico se movían de un lado a otro preparándose para la jornada de entrevistas.

Alquimia se encontró con otras bandas y solistas que participaban en el festival, cada uno con su propio estilo y personalidad. Había grupos de rock, bandas de pop, solistas de folk y muchos otros artistas de diferentes géneros, todos reunidos con el mismo objetivo: compartir su música con el mundo y hacer realidad sus sueños.

Entre las bandas, destacaba Ecos del Abismo, cuya presencia imponente y carismática no pasaba desapercibida. Con sus atuendos oscuros y su actitud desafiante, se destacaban entre la multitud, atrayendo miradas curiosas y admiración por igual.

Además, había solistas con talento excepcional, como Naiara, una cantautora con una voz angelical que cautivaba a todos los presentes, y Paul, un pianista virtuoso cuyos dedos volaban sobre las teclas con una destreza impresionante.

Choque de acordes ★ JUANTINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora