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Sus ojos se abrieron lentamente, poco a poco la luz de la habitación fue lo que primero se apareció ante él, se sentía extraño, ligero, pero a la vez con un peso justo en sus labios, se pregunto de lo que se trataría, posiblemente tendría algo cubriendo su boca, no estaba seguro, pero cuando logró mirar un poco a pesar de que estaba algo borrosa la imagen, logró ver un rostro, parpadeo un poco más y cuando lo hizo la imagen fue incluso más nítida, quien estaba frente a él era la persona que menos se imaginaba. Park Jimin.

Aquel alfa mantenía sus ojos cerrados mientras estaba tan cerca suyo, el aroma del alfa le inundaba sus fosas nasales, embriagándolo con su esencia tan sutil, pero a la vez tan fuerte, sus ojos se abrieron en grande al percatarse de que el peso sobre sus labios eran los belfos del alfa, Jimin... él lo estaba besando, pero ¿por qué? Cuando Yoongi se hizo aquella pregunta, el alfa se separo un poco y abrió sus ojos para mirar al omega, quizás creer en cuentos de hadas era una tontería, pero nunca espero que al abrir los ojos pudiera volver a ver aquellos orbes marrones observándolo. Jimin contuvo el aliento al percatarse de la intensa mirada del omega sobre él, quien estaba igual de sorprendido que él.

—Despertaste... —dijo en voz baja el alfa, Yoongi no dejaba de mirarlo, preguntándose el por qué lo había besado—. ¡Por la luna, despertaste! —la alegría en la voz del alfa se hizo presente para después pasar a una risa tan extrañamente dulce para Yoongi.

El omega no lo entendía, ¿por qué ese alfa estaba allí? ¿Qué quería? Se supone que él mismo le dijo que no quería volver a verlo nunca más, ¿por qué ahora se aparece? ¿Por qué estaba en su habitación? ¿Qué demonios es lo que quiere? Las manos de Yoongi se cerraron en puños, y su boca se sintió seca, todavía sentía el contacto de aquellos esponjosos labios sobre los suyos, la sensación le producía cosquillas en su interior, pero no dejaba de sentirse desolado.

Jimin sonreía en grande, su corazón revoloteaba a más no poder, jamás creyó que besar a su omega funcionaría, quizás había algo de verdad en todos esos cuentos infantiles, pero estaba más que contento, quería salir corriendo de la habitación y gritarle a todos que su omega despertó, estaba emocionado, casi podía sentir a su lobo mover la cola con frenesí por la excelente noticia, Jimin podía sentir todavía la presencia de los labios de su omega sobre los suyos, tan suaves y delgados, definitivamente quería volver a probarlos, porque la sensación fue mágica en cuanto los probo.

—¡Oh! —dijo el alfa volviendo a atraer la atención del omega—. Soy un tonto, tengo que decirle al doctor que has despertado —Jimin se levanto de su sitio y le dio la espalda al omega para ir caminando en dirección a la puerta—, volveré en un momento, omega.

—¿Por qué...? —los pasos del alfa se detuvieron, a pesar de que mantenía su sonrisa en su rostro, está se desvaneció un poco al mirar por sobre su hombro a su omega, quien le miraba de una forma extraña, era como si estuviera molesto, preocupado y ansioso al mismo tiempo—. ¿P-por qué estás aquí?

—Te he estado cuidando —respondió el alfa, y volvió a regalarle una pequeña sonrisa, se giro sobre sus talones dispuesto a acercarse—, has estado varios meses en coma, Yoongi, y he venido todo este tiempo para hablar contigo y hacerte compañía.

—No te me acerques... —el alfa detuvo de nuevo sus pasos ante esas palabras—, no sé porque estás aquí... pero q-quiero que te vayas.

—Omega...

—¡No me llames así! —la exclamación de parte de Yoongi sorprendió a Jimin.

El omega sentía su corazón oprimirse, ¿cómo era posible que aquel alfa se atrevía a venir a verlo? Después de todo por lo que le hizo pasar... apretó sus dientes con fuerza, sintiendo sus ojos picar sabiendo que pronto las lagrimas no tardarían en salir, se sentía impotente, triste y sobre todo molesto, porque no entendía porque ese alfa estaba allí cuando fue él mismo quien provoco que ahora se encuentre en ese lugar, apretó sus parpados con fuerza, tratando de evitar las lágrimas, pero inclusive el nudo en su garganta no le ayudaba.

—P-por tu culpa estoy aquí... —hablo de nuevo Yoongi, su voz era apenas audible, pero Jimin la escuchaba claramente—, m-me estoy muriendo por t-ti... —un suave sollozo escapo por sus labios—, y-ya no quiero... —sorbio su nariz, el alfa sintió la necesidad de abrazarlo, así que se acerco más al omega—, n-no te me acerques.

—Yoongi —le llamo, peor el omega mantuvo su cabeza agachada, no quería mirarlo—, perdón... sé que cometí un error al...

—¿Qué? —levanto la cabeza, dejando ver el desastre en su rostro, las lagrimas retenidas en sus ojos marrones que ahora se enrojecían por el llanto—. ¿Cometiste un error al estar aquí? Seguramente lo hiciste —llevo sus manos a su rostro, tratando inútilmente de limpiar sus lágrimas—. Si vas a irte solo hazlo y déjame en paz.

—No me iré.

—Sólo hazlo de una vez —su voz se quebraba en sus palabras—, déjame morir tranquilo de una buena vez, así dejaré de estorbar en tu vida, eso es lo que siempre has querido ¿no? —miro al alfa a los ojos—. Puedes quedarte tranquilo, lo haré...

—¿Q-qué? —el alfa sintió sus ojos picar al escuchar eso, no, lo que menos quería era perder a su omega—. No te dejaré, Yoongi, eres mi omega —se acerco de nuevo, ignorando el leve gruñido de advertencia que le dio Yoongi, se sentó a su lado mirándolo de frente, quiso tomar sus manos, pero el omega las aparto, sonrió con tristeza ante ese gesto, pero lo comprendía—, bonito... —aquella palabra solo hizo sentir a Yoongi una opresión en el pecho—, omega, mi omega —Jimin acerco su mano a la mejilla húmeda de Yoongi, acunándola por breves segundos pues el omega aparto su rostro—, perdóname por favor.

—N-no quiero...

El alfa supo que las cosas serían más difíciles de lo que creyó, pero esperaba obtener el perdón de su omega para estar juntos, y no le dejaría, aquellas palabras le hicieron sentir la necesidad de estar siempre a su lado para protegerlo, no quiere que muera, si eso pasará... jamás se lo perdonaría.

Pretty Love ||JimSu|| OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora