CAPÍTULO 22: Ceremonia

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El día tan esperado al fin había llegado la manada de leones estaba entusiasmada y la alegría por las nuevas uniones que se formarían tras esta nueva ceremonia de unión. 

Los machos se movían de un lugar a otro adornando el ambiente de la plaza principal y yo aquí sentada al lado de Kiara acabando mi regalo para Leo.

- Te ha quedado lindo. - Menciona Kiara con una sonrisa des de la cama estirada.

Cada día que pasa está más hinchada. ¿Cuántos cachorros pueden nacer en una camada? No es normal la barriga que le esta creciendo y engordando. 

- Sí... espero que le llegue a gustar. - Le menciono mis preocupaciones, admirando como me había quedado el pequeño detalle. - ¿Cómo te encuentras? - Le pregunto al cabo de unos minutos.

- Mejor, aunque Tomás esta demasiado sobreprotector. - Menciona Kiara. - ¿Debería de aceptar a otro compañero?

- Kiara no es si deberías aceptar a otro compañero, es ¿quieres a otro compañero? - Le pregunto seria con el tema.

Tal vez por la sociedad y cultura que viven aquí la poligamia esta aceptada y es una realidad, casi una obligación que una mujer debe estar con varios hombres para producir descendencia por la baja natalidad que hay del sexo femenino, pero no debería ser una imposición, sino algo que surge y se acepta.

- Eres rara Elsa. - Menciona Kiara. - Eres la única de la manada que no ve extraño que no quiera a ningún otro compañero salvo Tomás.

- A Tomás le quieres, os queréis mutuamente, pero no quiero que aceptes a alguien en tu familia porque sientes que debe ser una obligación. - Le explico.

- Gracias, amiga, sin embargo, días como hoy me dan que plantear. - Suspira. - Estoy agotada y casi no puedo moverme o hacer cosas y todo recae sobre Tomás. - Vuelve a suspirar y se hace un silencio entre nosotras cada una reflexionando sobre sus pensamientos. - ¿Tienes a alguien más a parte de Leo? - Me pregunta Kiara curiosa, supongo que mi vida personal es su único entretenimiento ya que no sale de su casa.

- Sí... - Le confieso sonrojada pensando en Nigel.

A Nigel también le he hecho el mismo detalle que a Leo, pero de distinto color. Realmente entusiasmada haciendo el regalo para ambos, acabe haciendo cuatro más. 

- ¿Quién es? ¿Lo conozco? ¿Aslan lo sabe? Seguro que exige una pelea cuando lo encuentre. - Comenta Kiara riéndose por como actuaría Aslan. - Oh, ¿Leo lo sabe? - Me pregunta esto ultimo realmente preocupada por la reacción que pueda tener su hermano.

- Kiara tranquila, Leo lo sabe. - Le tranquilizo. Ella pone una cara de sorpresa, angustia y luego de curiosidad.

- ¿Cuándo paso eso? - Me pregunta sin poder soltar su lengua. Río por su reacción y me dispongo a explicarle mi historia con Nigel.

- !¿Un hombre serpiente?! - Exclama totalmente sorprendida. - Sabes que son bestias salvajes, ¿no? - Me pregunta preocupada por las características de las bestias salvajes.

- No debes juzgar a un libro por su portada. - Le contesto, pero me mira confundida sin entender mis palabras. - Significa que no debes tener un prejudicio hacia alguien por los comentarios o rumores que hayan sobre él, sino dar una oportunidad de conocer antes de opinar. - Le explico.

- Nunca he conocido a una bestia salvaje. - Comenta reflexionando.

- Debo irme, debo prepararme. - Le digo levantandome de donde estaba para irme a casa.

- Esta bien, nos vemos en la noche. - Me contesta con una sonrisa picara.

- Nos vemos. - Me despido para salir e ir a casa a prepararme.

Soy una gata en un mundo bestialDonde viven las historias. Descúbrelo ahora