Tormenta de sombras [ LIBRO 1 ]

⛈️Capítulo 45: Él te ama

Todos están bailando y gritando las canciones, liberando estrés del trabajo, observo a lucas y está fatal, en su silla apoyado en la mesa, su brazo medio sostiene su cabeza y creo que en cualquier momento podría caerse, me siento junto a él.

—Vete a casa ya no das mas — se ríe.

—Es porque tu no bebes — trata de decir o al menos eso entiendo.

—Lo hice, pero sé cuando detenerme — nos reímos.

—¡Ay! Emma lo extraño mucho — dice y suspira, Lucas jamás habla de Daryl, esto es nuevo.

—Lo sé, aunque jamás lo digas...

—Era mi mejor amigo, cuesta tanto encontrar uno, imagínate que se vuelva el mejor — asiento — aún duele, a veces le hablo y le pido uno que otro consejo, es tan frustrante no poder escucharlo, pase la prueba de manejo sabes y fui a comprar vino, dos copas y lo fui a ver, bebimos sé que lo hizo, amaba el vino — Sonreímos.

—Jamás hablas de él, sé que te duele, sabes que estoy aquí para ti siempre ¿cierto?

—Lo sé, es solo que si uno no dice las cosas, duelen menos, es como si no existieran en cambio, cuando hablo de él — se quiebra — duele más — asiento y tomo su mano.

—Pero debes soltar todo lo que tienes dentro — asiente —llámame cuando quieras un consejo, yo era quien lo aconsejaba.

—Estás loca, das los peores consejos — nos reímos.

—Eso es mentira — se ríe entre lagrimas.

—Bueno, ya me voy, avísame cuando llegues a Boston ¿si? Y no te desaparezcas, contesta el teléfono y los mensajes— asiento.

Lucas se levanta y me da un abrazo, lo que provoca que mi cuerpo tiemble, él lo nota de inmediato.

—Lo siento... dice con culpa.

—Tranquilo, no es tu culpa — respondo aún temblando, sintiendo una sensación asquerosa en los brazos.

Nos despedimos, intento ahogar en lo más profundo la sensación que acabo de sentir, asco, desesperación, suciedad, incomodidad, ¿será así siempre?, no es justo... ni siquiera pude despedirme como corresponde, ese maldito me dejo jodida, mi cuerpo a pesar de no ser abusado por completo, no soporta el contacto físico.

De pronto siento que me dan la mano y es Sophie, mi cara es de confusión, enserió pensé que podría ser cualquier persona menos ella, le sonrió, aunque es la sonrisa más falsa que tengo, sé ve increíblemente bien, usando una pequeña falda gris y un top verde straples, me sonríe.

—¡Emma supe que te vas! — dice entre gritos ya que la música esta muy fuerte.

—¡Sí, Mañana! — grito también.

—¡Espero que te vaya muy bien! — sonrió, ella siempre me pareció un amor,

—Gracias — respondo con la mejor de mis sonrisas.

Me doy cuenta que todos comienzan a acercarse y me desean suerte, cada uno dice palabras diferentes y todas buenas, me siento feliz, me hacen sentir bien, no es que necesite que me digan cosas lindas o buenas, pero han sido días tan terribles, que estos detalles hacen que esas cosas pasen a segundo plano, es crear bellos recuerdos y sanos, me emociono un poco en verdad demasiado y caen algunas lágrimas, varios también se emocionan, debe ser el tequila es realmente peligroso, hay uno que esta llorando y ni siquiera lo conozco, todos vuelven a bailar luego del momento sentimental, Keira se queda a mi lado y se agarra de mi mano.

—Estoy ebria, pero aun puedo conducir — dice y nos reímos — ¿por qué te tienes que ir ahora que prácticamente vivimos juntas?, Enserió no quiero que te vayas...