Cegado de amor

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Barry Allen y Harrison Wells, fueron acercándose más, lo que solo provocó que Barry se enamorara cada vez más y más, pensando que podría tener una oportunidad con el pelinegro.
Harrison, trataba a Barry un poco más cariñoso cada vez más, a fin de cuentas su plan era enamorar más al castaño, pero como todo plan sabía que tenía que tener paciencia para poder lograrlo a la perfección, Harrison lo tenía todo bien organizado.

Pero algo frustraría los impecables planes de Wells...
Pues Cisco Ramón tenía una mente brillante, incluso más de lo que Harrison podía controlar.
Luego de que pasará un incidente con el Flash reverso, quien escapó de su máquina que serviría para atraparlo, desconociendo en ese momento que Wells la habia saboteado.
Cisco sospechaba del pelinegro, porque el único con la inteligencia para arruinar tan elaborada máquina era él y estaba en lo correcto.

Cisco fue a hablarle de su teoría a Barry explicándole porque la tenía.

Te lo digo en serio Barry, el único con la mente para sabotear mi máquina es Wells—
Exclamó Cisco.

— No tienes pruebas de ello Cisco, no puedes ir por ahí inculpando a las personas por tus errores sin ningún tipo de prueba—
Contesto Barry algo a la defensiva.

— Te digo la verdad, Harrison oculta algo, ¡Tienes que creerme!—
Dijo Ramón subiendo un poco la voz.

— Lo siento Cisco, eres mi amigo, pero te equivocas sobre Wells, él no sería capaz de hacer tal cosa, Harrison es un hombre bueno—
Contesto el castaño algo enojado ya.

— Bien, si no me quieres creer lo investigare por mi cuenta—
Hablo Cisco con algo de tristeza por la desconfianza de Barry.

Ramón se fue algo indignado y con tristeza, no podia creer que Barry no confiara en él.

Tal vez el castaño era demasiado inocente para creer que una persona tan cercana a él lo llegará a traicionar, o tal vez simplemente estaba cegado por su gran amor a Harrison.

Mi malvado velocista (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora