JUGUEMOS A SER DIOSES: Los usuarios [Ultimos capitulos]

Capítulo 48: HUIDA

23/02/202X
Hora: 14:07 pm
Ricky
– ¿Puedes ponerte de pie? – Le pregunté al llegar a su posición.

– No lo creo – Respondió Manny con dificultad. En un principio al verlo creía que había muerto, pero para mi sorpresa no había sido así.

– Debemos irnos, tenemos que ver como esta el resto – Dije mientras sacaba mi celular para así ver el estado actual del resto del equipo, sin imaginarme o prepararme para la desgracia.
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– Lo veo en tu reacción, ¿A quienes perdimos? – Preguntó Manny, viéndome con seriedad y pareciendo estar preparándose mental y emocionalmente para mi respuesta.

– Vanesa, Derian y Andrea – Respondí sin ser capaz de decir una sola palabra más sobre la situación.

El seguía con la misma mirada pero note el cómo levemente temblaba, tal vez por la ira o impotencia, ambas siento sensaciones por las que yo estaba pasando al no poder estar cuando nuestros amigos nos pudieron haber necesitado durante la batalla.

– ¿Están bien? – Se escuchó una masculina, era Gustavo quien preguntó. habiendo llegado junto con el resto de la última generación aún con vida, Lucia y Anahi precisamente.

Ante la pregunta de Gustavo, únicamente levantó el pulgar y Manny seguía guardando silencio mientras veía al frente de manera perdida.

– Debemos ir a un lugar seguro, la casa de Vanesa sigue vacía, ¿Podrías llevarnos Lu? – Le preguntó Gustavo a Lucia y ésta afirmó con un movimiento de cabeza, para luego teletransportarnos a todos al lugar donde hace tan solo esta mañana estábamos toda la última generación, siendo la sala del que es o era el hogar de nuestra amiga caída en batalla contra la penúltima generación.

No hubo mas que silencio, nadie decía palabra alguna, había varias emociones, frustración, ira, tristeza y la sensación de derrota era también una en el aire.

– Venga – Se escuchó decir a Manny en un tono de disgusto.

– ¿Crees que lo hagan? – Preguntó Anahi, al principio no entendía a qué se referían, pero la pregunta de Anahi que le siguió a la de Manny, debía haber alguna relación.

– Aunque aceptamos ser su representantes aun a sabiendas del peligro, el que se presentes a nosotros o al menos nos hablen, es lo menos que pueden hacer por nosotros.. ¡Que vengan e dicho! – Respondió Manny con cierto vacío, como sino quisiera hablar y estuviera arrepentido por algo.

– Pero – Dijo Gustavo pero sin poder terminar la que sería su frase, Manny exclamó.

– ¡Que vengan e dicho! – Exclamó ahora furioso, no sabía que debía esperar que pasara, pero como si estuvieran escuchándonos y viendo a cada momento, de manera repentina 3 figuras humanoides aparecieron frente a nosotros, tomando la sorpresa de todos, pero no generando una reacción de suficiente interés de parte de los integrantes de la última generación, quienes nos encontrábamos procesando las consecuencias de nuestra derrota.

El reclamo de Manny tomó por sorpresa a todos, pero lo hizo aún más el tan solo segundos después una voz se hizo notar.

– Hemos llegado – Se logró escuchar una voz que evidenciaba fuerzas desconocidas y fuera de una comprensión mortal.

Luis
Cuerpos de personas que parecían ser del ejército o de las fuerzas armadas, estaban en el suelo siendo cerca de las 40 personas, algunas ya desmembradas, otras boca arriba y con los ojos abiertos pero con sus cuerpos ya sin vida, otros más apenas respirando boca abajo. A lo lejos se apreciaba un par de helicópteros sobre volandonos solo con la única intención de observarnos.

De la última generación éramos solo dos los que continuamos en la zona de guerra, siendo Daniel y yo, teniendo de frente al causante de las pilas de cadáveres esparcidas sobre la zona, siendo Lucifer, con una altura de casi 2 metros de alto, un cabello largo carmesí y unos ojos cuyo blanco no daba muestra alguna de tener alma en su cuerpo. Con su mano extendida sostiene sujetado del cuello a uno de los soldados que vestían un blanco muy particular, con sus camaradas tendidos en el piso, ya solo quedaba ese uniformado con vida.

– Demonio – Dijo con dificultad el soldado, el cual cuya ida ya estaba comprometida a ser perdida en manos de Lucifer, quien solo lo veía con desinterés alguno, tanto en la persona, como a la vida misma.

– En realidad soy un ángel – Sorprendentemente le respondió, siendo la primera vez en la que le dirige la palabra a un no usuario, que tan solo luego de forcejear por segundos, terminó con el cuello roto debido a que con solo fuerza en su agarre le doblo el cuello a ese sujeto como si fuera una rama, soltandolo y dejándolo desplomado en el suelo, cuya mirada ya sin vida estaba puesta sobre mi.

– Señor, deberíamos irnos – Pidió Daniel....Ante tal solicitud Lucifer borró su sonrisa y vio hacia nosotros.

– No lo entiende...jamás pude poner un pie en su mundo moderno y mucho menos poder sentir lo que es estar finalmente vivo – Nos respondió viendo las palmas de ambas de sus manos.

– Usted no corre peligro, pero nosotros si, Daniel y yo no debemos estar aquí por mucho tiempo – Al compartir mi preocupación, Lucifer se puso frente a mí y extendió su mano derecha, poniéndola justo a la altura de mi rostro, haciendome por segundos creer que me quitaria la vida al igual a como lo hizo con los militares, pero en su lugar recibiendo el impacto de una bala en la palma de su mano, pero sin ser atravesada por el proyectil que al parecer debió haber sido detonado por un francotirador, quien nos tenía como blancos a Daniel y a mi por acompañar a Lucifer.

El con la bala en la palma de su mano, demostraba la resistencia que ahora tenía al apoderarse del cuerpo de Andre, pero no pude evitar notar que la bala había logrado hacerle sangrar en su mano. ¿Así que ahora sangras bastardo?

– Están en lo correcto...bueno, llevenme con el resto – Ordenó viendo con atención la bala que había interceptado, para luego lanzarla al helicóptero que volaba cercano a nosotros, la bala entró por la parte frente en dirección al piloto y antes de dejar el lugar, pude ver el como ese helicóptero se desplomaba en lo que sería una muerte segura para los tripulantes, la maldad en ese demonio era simplemente inhumana....pero era algo que a decir verdad toda la penúltima generación sabíamos.

Ricky
La voz era notable, pero no había presencia visible de donde provenía esa voz que se presentaba por parte de los que debían ser Alfa y Omega, ya que esa voz tenía cierto eco como si fueran dos personas las que estuvieran hablando a la par.

– Entendemos usuarios, que la intervención sorpresa de parte de Lucifer, puede evidenciar una situación poco favorable para la última generación, pero el objetivo de este enfrentamiento contra sus representantes sigue siendo el mismo, deben acabar con el resto de la penúltima generación – Amables voces explicaron y al terminar fue una notificación ya que llegó a nuestros celulares.

   *Periodo de recuperación rápida iniciado: Tiempo estimado de curación 10 minutos*

Aquel mensaje era aviso de que volveríamos a sentirnos en un 100% para volver a estar listos para el próximo enfrentamiento, pero aquella recuperación era algo que creíamos no volvería a pasar según las reglas de esta confrontación contra la penúltima generación, siendo que Manny y yo necesitamos de.......Andrea para curarnos del encuentro contra Alejandro, Aileen y Jacob.

– No tienes porque reprimir tu también Ricky...es mucho por procesar – Dijo Anahi evidenciando que había leído mi mente, dándose cuenta que el solo recordar Andrea causaba en mí cierta tristeza.

– Podemos entender la importancia que los humanos tiene a la vida y esa importancia es aún mayor cuando la vida es de un ser querido...pero les prometemos que sus amigos ya están en paz y – No lograron terminar, pero al decirnos eso, seguimos sin consuelo, ya que no era algo muy diferente a lo que todo el mundo dice para reconfortar a aquellos que pierden a alguien.

– Ni se les ocurra tratar de consolarnos como a unos niños...nos advirtieron el riesgo y lo corrimos sabiendo que morir era una posibilidad....pero perdimos a 3 de nosotros, asi que por favor déjenos vivir el duelo y usarlo como motivador para cobrarle un ojo por ojos a esos bastardos de la penúltima generación – Lucia interrumpió mostrándose agresiva.

– Exacto...no los llamamos para que fueran un hombro en donde llorar, queremos que nos den más de su poder, el bastardo de Lucifer interfiere, así que ustedes también pueden hacerlo ahora....¿me equivoco? – Dijo Manny habiendo un silencio que no le dio respuesta a su pregunta.

Aquel actuar fuera de lo normal en él nos tomó por sorpresa, pero aquella deducción en lo personal lo habia hecho aun mas, siendo que consideraba que Alfa y Omega ya habían hecho todo lo que estaba en su poder en cuanto a brindarnos el poder de las habilidades puras de las que éramos usuarios, simplemente no podría pensar en otra forma en la que podrían darnos una ventana en la confrontación contra la penúltima generación o contra Lucifer.

Frente a nosotros dos figuras humanoides de proporciones físicas similares, siendo alturas cercanas a los 2 metros y una masa muscular evidente aún con prendas que incluso nos impedían verles el rostro, pero que por las visiones del encuentro que tuvo Alfa con Manny nos ponía de frente ahora al que debía de ser Alfa aquel que portaba el blanco mientras que por descarte el que vestía de negro debía de ser Omega. La presencia de ambos, que ya no era por parte de una proyección sumado a que era la primera vez que veíamos a Omega, sencillamente se sentía como tener enfrente a un elefante que en cualquier momento podría destrozar a todos y a todo a su alrededor de tan solo alterarlo un poco.

El mas asombrado de los presentes fue Anahi, no ocultando en sus ojos aquel asombro de su parte pero que a la vez era compartido con el resto de nosotros. Antes de que alguien dijera algo, Omega sujetó del cuello de manera bruscamente a Manny con únicamente una de sus manos, levantándose del suelo y obligando a minimizar aquel estrangulamiento con ambas de sus manos sujetadas al brazo del Dios que ahora desprendía un humo oscuro que se habría paso por el interior de la casa.

– La insolencia no es bien recibida por los Dioses, no tientes la suerte y olvides tu lugar usuario – Se hizo oír ahora únicamente por parte del Omega.

Como por instinto, mi habilidad se manifestó liberando de mi aquel aire helado visible y rodeando mi puño derecho de un hielo resistente como el diamante, mientras que en mis pies una llamarada de fuerzo azul me dio la velocidad para llegar a Omega posicionan mi puño helado a milímetros de donde debían estar sus costillas.

– Más de vale no hacer algo que haga que toda la última generación deje de verte como un aliado – En tono autoritario fue la primer voz mortal que se hizo escuchar desde la llegada de ambos Dioses, siendo Anahi la vocera, quien al igual que yo parecía que en la primer muestra de hostilidad de Omega, había llegado al igual que yo a posicionarse con uno de sus puño en la costillas opuestas del Dios, pero con la diferencia de que en ella el fuego carmesí iluminaba ahora sobre la oscuridad que Omega desprendía.

Yo por su franco izquierdo, Anahi desde el franco derecho y Lucia no se había quedado atrás, ya que estaba en la retaguardia de Omega, ella teniendo la punta de un destornillador levemente clavado en la espalda baja de Omega, ahora él estaba siendo rodeado por 3 usuarios que no dudarán en defender a uno de ellos. Manny no se quedó como una víctima, ya que sus ojos comenzaron a liberar una notable luz eléctrica de una color que jamás había visto en la manera de manifestar sus rayos, siendo un color blanco casi cegador. 

(N/A)
Muchas gracias por leer. Lamento la tardanza pero espero disfruten este ultimo arco.
Nos leemos pronto