18

142 17 2
                                    

8 de abril de 1991

2:35pm, Kråkstad, Noruega.

Me sentía mal, triste... Sin vida.

No hay nada que me aferre... Pero ella... Ella si.

Sin embargo, yo ya no tenía ganas de nada.

Estaba sentado en el piso, mirando todo a mi alrededor, el silencio cubriendo todo el lugar, me levanté y tomé uno de mis casettes para poner música, pero al final no quise ahogar mis penas en eso, me senté en mi mesita de dibujo, escondí mi rostro entre mis brazos mientras sollozaba suavemente.

Ya no quería nada.

Quería morir.

Y la solución, estaba a un metro mío. Mi nuevo cuchillo.

Me levanté decidido y lo tome, me senté en el suelo mientras enrollaba las mangas de mi camisa, mire mis brazos en silencio, limpios, cicatrices viejas, desde que estaba con Astrid hace un año ya no me cortaba.

Pero por la última discusión que tuve con Euronymous, me hizo ver que solo soy una carga muy negativa en la vida del hermoso amor de mi vida.

Suspire suavemente y mire a un lado, la pared me mostraba una foto de nosotros dos juntos, abrazados sonriendo a la cámara y la otra foto era ella sonriendo ampliamente.

Sonreí suavemente, moriría viendo la hermosa foto de mi chica, eso me haría muy feliz.

Me levanté y tomé la foto, me senté en el suelo nuevamente y puse la foto a un lado, no me gustaría que se manchara con mi sucia sangre, mire la foto unos largos segundos en silencio, ella en esa foto, tan sonriente, tan linda, sus ojos brillosos viéndome fijamente mientras yo tomaba la foto, sus mejillas sonrojadas y su cabello alborotado, su cuerpo semidesnudo envuelto entre las sábanas.

Aquella foto la tomé después de haber hecho el amor con ella, se veía tan hermosa mientras me miraba sonriendo y sonrojada que tuve que tomarle una foto.

Tan hermosa y tan mía... Pero pronto la liberare de este tormento.

Y entonces, mire mi brazo, y sin pensarlo mucho, hice un corte profundo.

Gemí adolorido, y por primera vez, me dolía.

Vi como la sangre corría y caía al suelo, gemi adolorido y después tome el cuchillo, corte mi otro brazo, aquel dolió mucho más.

La sangre caía, yo suspiré hondo y mire la foto sonriendo levemente al verla a ella en la foto.

-Mi hermosa niña... Perdóname por esto...

Y entonces tome el cuchillo nuevamente, mirando aquella foto empecé a juguetear con el, rozandolo en mi cuello, cortándome solo un poco.

Hasta que la puerta de la habitación se abrió, subí la mirada y entonces la vi a ella.

Traía una bolsita llena de chucherías y al parecer un libro, su cara era un poema.

Lágrimas, sorpresa y miedo.

La bolsa cayó al suelo mientras empezaba a escuchar sus sollozos y gritos llamándome mientras apretaba mis brazos, rompió mi camisa y vendo mis brazos con fuerza.

Quise cortarme el cuello pero ella tomo mi brazo mientras sollozaba con fuerza y me llamaba gritándome.

-¡No, no, no! ¡No!

Ella gritaba fuertemente sollozando, yo por fin la mire y ver sus ojos llenos de lágrimas mientras me gritaba desesperada me hicieron saber que estaba cometiendo un grave error.

Uno muy grave.

El cuchillo cayó al suelo y fue en ese momento que mi consciencia regreso y con ello, la vida.

Me sentía en shock, por primera vez desde los 10 años, sentía, sentía dolor físico, sentía, sentía culpa, sentía tantas cosas que había dejado de sentir y verla llorar me hizo saber que la amaba tanto como para herirla aún más de lo que ya había hecho por mi reciente acto.

Ella se levantó y ella se acercó a mi tomándome de la camisa levantándome con fuerza, yo de inmediato me levanté débil, ella me llevo casi a rastras abajo.

Mientras abria la puerta, Øystein apareció en frente de ella, alarmado al ver la escena, soltó las cosas que traía y me ayudó, entre ambos me subieron al auto y Øystein empezó a manejar, yo tenía sueño.

-¡Se está durmiendo, Øystein, se está durmiendo!

La escuché gritar mientras mis ojos se cerraban por momentos, ella sollozó con fuerza.

-¡Pégale, puta mierda!

Y entonces sentí una fuerte cachetada, mis ojos se abrieron en sorpresa y la mire, ella suspiró suavemente mirándome.

Y entonces, después de unos minutos, cai en inconsciencia mientras escuchaba sus gritos llamándome y sus golpes.

Pero tenía tanto sueño, tanto cansancio. El cansancio que no tuve por años.

Y entonces, ví la luz, mi alma avanzaba lentamente en ese túnel negro, en silencio, escuchaba de manera lejana y distorsionada como ella me rogaba por regresar, pero entonces, seguí sin avanzar y solo me quedé envuelto entre esa oscuridad.

Yo y la oscuridad, en nuestra última batalla, la cual definiria si ella me llevaba.

O no.

Behind a twisted mind. [Dead/Per Yngve Ohlin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora