38. Eros

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Advertencia: Contenido Explícito

Cuando hacemos el amor - Maria Becerra

Cuando Fred llegó a mi casa lo metí de inmediato a mi habitación mostrándole los sobres volteados sobre mis decisiones. Tanto las extranjeras cómo las nacionales, le dije los nombres de los equipos y me hizo descartar rápidamente los extranjeros, así que sólo quedaban los nacionales.

Los equipos nacionales, basados en sus lugares de entrenamiento, Brighton y Southampton.

—¿Que piensas? —pregunté

—Brighton queda más cerca que Southampton...

—¿Entonces Brighton?

—No lo sé —dijo tomándose la cabeza con frustración sentándose en mi cama junto s las cartas.

Me coloqué entre sus piernas y lo abracé sobre los hombros haciéndolo enterrar la cabeza en el hueco de mi cuello. Creo que él estaba más estresado que yo. Y tampoco le estaba diciendo que decidiera completamente él.

—Yo también elegiría Brighton, la distancia es mínima y las desparticiones serían poco probables —suspiré jugando con su cabello

—Pero tendrías que mudarte a Brighton y sabes que no puedo estar mucho tiempo sin ti  —apretó el abrazo y me subió sobre él—. Pero tampoco quiero Southampton porque estarías más lejos y no podría visitarte tan seguido... ¿Segura que no te hicieron una propuesta en las Harpies?

—Segura. Angelina fue la única en recibir esa carta.

—¿Qué hay de los Appleby Arrows? Es la selección

—por más que quisiera no recibí su carta

—Que tal equipos galeses... ¿Wimbourne Wasps? Escuché que siempre estan reclutando

—Freddie siempre reclutan porque son demasiado rudos...

—Bien... Pues es tu decisión, bonita. ¿Quieres unirte a los Falcons?

—Sería bueno para mi carrera y son los más cercanos, tal vez tenga suerte y el campo de entrenamiento esté cerca de Londres

—No lo creo —bufó

—Aunque aún queda saber si me darán el puesto, tampoco estamos seguros

—Te lo darán... Eres excelente en el quidditch

—Gracias, guapo

Nos quedamos abrazados así unos minutos más, se sentía extraño, cómo si fuera un abrazo de despedida. Su cabello bailaba entre mis dedos mientras lo acariciaba constantemente, pequeños besos eran distribuídos en mi hombro y cuello mientras escuchaba pequeños murmullos de "te amo" rápidos haciéndome sonreír

—Yo también te amo mucho, mi amor —dije entre risas tomando sus mejillas para verlo a los ojos—. Haré lo posible para quedarme cerca de ti... Además puedo sólo ir a ver el campo y usar las aparciones, tampoco estamos tan lejos

—Igual es distancia... Esté mes sin ti fue una tortura no me imaginó todos los días hasta que nos casemos

—Estaremos bien

Besé sus labios dulcemente y sus manos apretaron mi cintura tratando de cercarme a él. Sentía la necesidad en como me regresaba el beso, sentía la necesidad de fundirme en su abrazo, necesitaba más de él solo con un beso que fue muy difícil tener que aguantarme él hacer algo más con mis padres en casa. Cuando nis separamos volvimos a abrazarnos otros minutos, nos separamos pero de igual manera me siguió hasta sentarnos en mi escritorio comenzando a escribir la carta a cada equipo, las cartas de rechazo y la carta de aceptación a las pruebas. En cuanto mandé la carta, Fred me felicitó y cambiamos el tema a cuando me iría a vivir con ellos haciéndome sonreír.

Cuatro Ya Es Un Patrón... ¿No? • 4ta RD Harry PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora