Capítulo 9

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(30 de Abril del 2015)

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(30 de Abril del 2015)

P.O.V Autora

—¿Qué va a pasar con nosotros?—Wanda pregunta con miedo.

Todos se quedan mirando a Wanda en silencio y sorprendidos. No lo habían pensado.

—Quiero decir, no tenemos papeles y estamos aquí de manera ilegal—habla muy nerviosa.

—No se preocupen por esas cosas—les intenta decir Tony, pero Wanda lo interrumpe.

—N-no puedo no preocuparme. No tenemos papeles, somos ilegales en el país y si nos deportan, ¿a dónde nos van a mandar? Sokovia ya no existe—Wanda se pone muy nerviosa y empieza a hiperventilar—Clint se acerca a ella rápidamente.

—Wanda, necesito que te relajes, ¿sí?—ella asiente y Clint la ayuda a regular su respiración—. ¿Mejor?—ella asiente—. Ustedes no tienen que preocuparse por nada, nosotros vamos a arreglar esa situación, ¿ok?—los hermanos asienten—. Pero primero tenemos que hablarlo entre nosotros y luego les comunicaremos lo que vamos a hacer.

—¿Y dónde nos vamos a quedar?—esta vez Pietro pregunta.

—Por ahora en la torre hasta que los dos estén totalmente curados. Quizás lo mejor va a ser que salgan de la ciudad, al menos por unos días hasta que todo el asunto se arregle—les dice Tony.

—Cuando Pietro esté lo suficientemente bien para salir del hospital, van a ir a mi casa en Iowa hasta que todo este embrollo se solucione—Clint toma la palabra. Los vengadores quedan un poco sorprendidos; los gemelos intentan decir algo, pero Clint los detiene—. Es una decisión que ya tomé, así que no quiero discusiones al respecto—lo dice tan serio que nadie es capaz de contradecirlo.

Todos se quedaron en la habitación esperando tener nuevas noticias de Alex. Wanda se empezó a quedar dormida en una silla al lado de la cama de Pietro.

—Wanda—la llama Nat, ya que está cabeceando.

—Mmm...—responde muy adormilada.

—Creo que ya es momento de ir a la torre, es tarde y estás cansada.

—No, no. Estoy bien...

—No, te estás quedando dormida.

—Quiero quedarme esta noche con mi hermano—le dice con lágrimas en los ojos. Nat no entendía lo que sucedía, pero prefirió no insistir.

—Ok, pero si estás muy cansada o incómoda nos dices y te llevamos a la torre.

—Gracias...

Wanda sentía mucho miedo. Ella estaba segura de que había visto a su hermano morir; incluso cuando le dijeron que estaba en un hospital, estaba segura de que iba a estar muerto, con una sábana tapándole la cara y le iban a dar sus condolencias. Wanda se sorprendió mucho cuando lo vio con vida y despierto en la cama del hospital. Su mayor miedo es que todo sea una ilusión, que si cierra los ojos o se aleja de él, se despertará de este sueño y le dirán que en verdad murió en la batalla de Sokovia.

Alexandra Romanoff |Libro III|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora