Un rato después de abandonar el pueblo, la tensión en el vehículo seguía siendo palpable. Me encontraba sumida en mis pensamientos, mirando fijamente por la ventana mientras los paisajes se deslizaban a mi alrededor. La verdad descubierta en el callejón y la confrontación con Thomas me dejaron con una mezcla de confusión y desconfianza.
Thomas conducía con una seguridad aparente, su expresión imperturbable. El silencio entre nosotros era denso, roto solo por el murmullo del motor y el crujir ocasional de las ramas bajo las ruedas del vehículo.
En un momento, sin previo aviso, Thomas se desvió del camino principal. El vehículo se adentró en mitad del bosque, atravesando un camino lleno de baches. La maleza rozaba con insistencia contra el lateral del vehículo, creando un ambiente aún más claustrofóbico. La luz de la luna apenas se filtraba entre las ramas, arrojando sombras inquietantes sobre el interior del coche.
Fruncí el ceño, mirando a Thomas con incredulidad. Las dudas y la desconfianza se intensificaron mientras nos aventurábamos más profundamente en el bosque, alejándonos de la seguridad relativa del pueblo. La vibración constante del vehículo sobre el terreno accidentado aumentaba la sensación de estar en un camino desconocido, tanto física como emocionalmente.
—¿A dónde demonios vamos? —pregunté, mi voz cargada de ansiedad.
Thomas permaneció en silencio por un momento, su mirada fija en el oscuro camino delante de nosotros. No respondió de inmediato, lo que sólo contribuyó a la creciente incomodidad que sentía.
—Necesitamos alejarnos del pueblo por un momento. —Fue su respuesta evasiva, pero su tono sugería que había más en juego de lo que estaba dispuesto a revelar.
El camino bacheado continuó, sumergiéndonos en una especie de limbo entre la civilización y la naturaleza salvaje. La maleza espesa se cerraba sobre nosotros, y no podía evitar sentir que cada bache en el camino era una metáfora de la incertidumbre que me rodeaba.
Mientras avanzábamos por ese trayecto desconocido, mi mente bullía con preguntas sin respuesta. ¿Hacia dónde nos llevaba Thomas? ¿Cuáles eran sus verdaderas intenciones? La oscuridad del bosque se cernía sobre nosotros, creando una atmósfera enrarecida y llena de misterio que alimentaba la inquietud en mi corazón.
El oscuro y tenebroso bosque se cerraba a nuestro alrededor, sus árboles altos y retorcidos se entrelazaban formando una maraña impenetrable. Las sombras parecían cobrar vida propia, danzando entre las ramas y creando una oscuridad palpable. Un aura de miedo, terror y poder impregnaba el aire, como si el bosque mismo estuviera imbuido de secretos oscuros y antiguos.
El crujir de las ramas bajo las ruedas del vehículo resonaba como un susurro inquietante, y el silencio del bosque se veía interrumpido sólo por los sonidos esporádicos de criaturas nocturnas que permanecían ocultas entre las sombras. La luz de la luna apenas se filtraba a través de las densas hojas, proyectando sombras grotescas que se movían con cada vaivén del vehículo.
A medida que nos adentrábamos más en la maleza, la sensación de que el bosque estaba vivo, observándonos con ojos invisibles, se intensificaba. El miedo se mezclaba con la curiosidad, creando una atmósfera enrarecida que se aferraba a mi piel.
De repente, el bosque cedió paso a un pequeño claro, y en su centro, como emergiendo de las sombras, se alzaba una vieja iglesia abandonada. Su estructura de piedra, cubierta de enredaderas y musgo, resonaba con una historia antigua y olvidada. Las ventanas rotas permitían que la débil luz de la luna iluminara el interior oscuro y silencioso.
La iglesia estaba rodeada por un cementerio descuidado. Las tumbas, cubiertas de maleza y tierra, yacían inclinadas y arrasadas por el tiempo y la negligencia. Cruces de madera carcomida se erguían como guardianes silenciosos de un pasado que parecía haber sido olvidado por el resto del mundo.
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Lunas Cruzadas
Mystery / ThrillerEn Luminaria, donde las sombras danzan con la luz, cada ciudadano guarda un secreto en los pliegues de su alma, y las verdades se entretejen en la penumbra de sus destinos entrelazados. "¿Puede el amor, como un cigarro encendido, desafiar la oscura...