꧁𝐓𝐢𝐭𝐚𝐧𝐬 [𝐊𝐨𝐨𝐤𝐌𝐢𝐧] ꧂

01

   "Miremos el amanecer, nunca se sabe cuándo será la última vez"

— ¡Cobardes, hijos de puta!

JiMin le defendió a como pudo, lanzando golpes a los cuatro niños que le golpeaban cruelmente a uno de sus dos mejores amigos; Taehyung, quien hecho una bolita en el suelo trataba de cubrirse, eran unos completos montoneros que se encargaban de lanzarle de golpes sin siquiera limitarse.

— ¡Ya Déjenle! ¡uno por uno sí puedo, malditos! — JiMin gritó, sosteniendo la cabellera oscura de un niño mientras la jalaba hacia sí una y otra vez, viéndose de manera graciosa ante la vista de cualquier otro.

El niño ya molesto y furioso se giró pero sólo para lanzar un puñetazo al estómago de JiMin, quien se encogió y cayó al suelo mientras se retorcía en un insoportable dolor, quejándose a la vez que se cubría el abdomen.

— No te metas, marica — gruñó el niño, girándose para nuevamente golpear al pobre de Tae, quien pedía a gritos que le dejaran.

Pero el pequeño JiMin no se rendiría, menos si se trataba de alguien sumamente cercano e importante para él, por lo que, con dificultad pudo levantarse nuevamente aún con dolor en su estómago, lanzándose a otro de ellos para dar de puñetazos a su espalda, pidiendo de manera eufórica que le dejaran.

Pero entonces los cuatro niños se voltearon hacia JiMin, acorralándole.

— ¿¡Qué!? — se enfrentó sin miedo, gritándole a todos — ¡Péguenme a mí, putos!

Y lamentablemente acataron lo dicho.

Todos sin dudarlo se lanzaron al pobre rubio, comenzando a golpearle con toda la fuerza existente hasta hacerle caer al suelo. Golpe tras golpe y patada tras patada comenzó a recibir. JiMin pudo sentir cómo de ciertas partes de su cuerpo comenzaba a brotar la sangre hasta manchar el suelo, causándole pánico por un instante.

O al menos así había sido hasta que uno de los malos cayó repentinamente al suelo, donde los otros se detuvieron por pura inercia a observar a su colega, quedando estáticos cuando notario al recién llegado.

— ¿De nuevo ustedes? — YoonGi con los brazos metidos a sus bolsillos, dio una patada al niño en el suelo, donde sin piedad subió un pie a la espalda del caído, recargando todo su cuerpo en él.Los tres restantes niños temblaron ante la vista de YoonGi pues, claro que le conocían a la perfección, ni ellos cuatro juntos podrían contra él.

— T-tu amigo — uno de ellos tartamudeó —, tu amigo fue el que empezó. Le robó a mi tío tres manzana y no las quiere devolver.

— Ah, ¿eres de esos pocos riquillos que hay en la muralla? Entonces es mejor que corras, porque los odio con el alma.

Sacó las manos de sus bolsillos a la altura de su pecho, continuamente tronándose los dedos para advertirles lo que se aproximaría, pero los niños muy en el fondo no eran tontos, por lo que sin pensarlo dos veces corrieron lejos del lugar y la escena, incluso el que se encontraba en el suelo, se zafó como pudo del pie de YoonGi, yendo tras sus amigos.JiMin entonces, con la mano sobre su estómago y con la cara rota, miró a YoonGi, negando con la cabeza.

— ¿Por qué te metiste, YoonGi? ¡estaba a nada de ganarles!

— Sí, sí — YoonGi sonrió, extendiendo una mano para ayudarle a levantar, seguido de dirigirse con Tae quien se encontraba mareado y con una bolsa abrazando — Tae, Tae... Te habíamos dicho que dejaras de hacerlo.

— Lo sé, lo lamento — musitó, quejándose cuando su labio sangró.

JiMin se acercó a Tae, poniéndose de cuclillas frente a él, sólo que de espaldas.— Sube, vamos a nuestra guarida — dijo JiMin, viendo la sonrisa de Tae, quien asintió y se dejó caer a su espalda, aferrándose a su cuello.