~ Julietha ~
Eres mi excepciónEl beso continuó. Uno. Luego otro. Y así hasta que tuvimos que separarnos para terminar de alistarnos. Aarón se perdió en el vestidor y yo salí de la habitación dirigiéndome hasta Santiago colocando un cojín en mi espalda.
—¿Ya elegiste un nombre para bebé?—preguntó apoyando su barbilla y una de sus manos en mi vientre.
—Aún no.—negué—Eso tengo que hablarlo con Aarón y todavía no lo hemos hecho.—respondí tragando grueso al mencionarlo y recordar que hacer nada estábamos comiéndonos la boca.
—Espero que elijan un nombre bonito para bebé. Con un significando lindo, pero no tan difícil, luego no va a poder pronunciarlo.—se preocupó abriendo mucho sus ojos—Oh no no no, no puedo permitirlo.
—Buscaremos un nombre bonito y sencillo de pronunciar, ¿de acuerdo?—peiné su cabello revuelto por los gestos de cariño de Aarón.
—Así sí. Ves. Con la comunicación todo el mundo se entiende. Porque la comunicación es todo proceso informativo, aunque no todo proceso informativo sea comunicación. La comunicación también es el acto informativo, humano en el cual se comparte información entre dos o más personas que codifican y...—me recitó toda la definición quedándose pensando en algunos partes—Debo practicar más, el lunes tengo examen y la profesora Gladys quiere que memoricemos todooo lo que dictó. Aunque ella no se acuerda lo que dijo.
Siguió con sus quejas de sus maestros durante un buen rato hasta que Aarón apareció perfumado con una camisa negra ligera y unos pantalones cómodos negros.
—¿Ya están listos?
Nos subimos al Ferrari llegando hasta la casa de los problemáticos donde Jhonatan trataba de calzar algo en el horno y Dominik negaba ante su método.
Ya todos se encontraban allí, incluso Flor con la señora Rosa supervisando que no dañen su lugar favorito: la cocina. Santiago salió disparado donde la pequeña un par de años mayor que él para hablarle de mi regreso y ella abrió muchos los ojos al verme embarazada.
—Buenas, buenas.—apareció Fernanda con una botella de vino en la mano acercándonos a saludar a todos.
—¿No estás algo achispada, rubia?—consultó Aarón saludándola y tomándola por los hombros observando sus ojos. Adrián no estaba por ningún lado.—¿Donde está tu novio?
—No lo sé. Esta mañana desperté y no estaba, lo llamé, lo volví a llamar y joder, mira tú, que no me contestó ni una estúpida llamada.
—¿Discutieron anoche?—consultó Aarón haciendo que Fernanda se sentara a su lado abrazada a la botella de vino y apoyó su rostro en su hombro como una niña pequeña que busca consuelo.
—Anoche no.—negó Fer, sin dar más detalle y durmiéndose en los siguientes minutos.
—Voy a acostarla en la habitación. Ahora vuelvo.—Aarón la meció despacio rodeándola por los hombros y haciendo que caminara por el pasillo hasta su antiguo cuarto.
—¿No quieres? ¿Ni un porquito?—le preguntaba Fer tendiéndole la botella mientras caminaba despacio.
Observé a Dom y Jhonatan que contemplaban la escena preocupados. Alcé las cejas en busca de una explicación.
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Juntos hasta el infinito. (INFINITO #3)
Любовные романыVolvieron a decirse adiós y no por decisión propia, sino por fuerza mayor. Ella cree que puede enfrentar todo desapareciendo del mundo y él sabe que hallará la manera de encontrarla como dé lugar. Su historia nació desde mucho antes de haberse hech...