¿Se han imaginado tener dos vidas? ¿Ser dos personas al mismo tiempo? Apuesto a que sí.
Pero entre pensar y vivir hay una diferencia muy grande, creo. Imaginemos... Charlotte, una mujer dulce y dedicada. Chiara, sexy e imponente, ¿Cual elegirías tú...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
POV Engfa
—Así que, señorita Thansita, ¿cuál es su propuesta? —fui directa.
La mujer tomó una respiración profunda y sonrió cínicamente.
—Quiero comprar Industrias Waraha.
Por un instante imaginé haber oído mal, o haber imaginado esas palabras saliendo de su boca. Pero no. Prada Thansita realmente me hizo esa propuesta. Suspiré profundamente, todavía contemplando a la mujer y pensando sobre la situación de hace unos minutos. Miré a Charlotte que sabía lo que esa propuesta me causaría. Con delicadeza, sus delgados dedos se posaron sobre mi mano acariciándome, como si me estuviera pidiendo que mantuviera la calma.
—Así que señorita Waraha, ¿qué dice?
Brian, uno de los accionistas de Dilhokanansakul preguntó bastante emocionado, con su pose de empresario importante cuando en realidad no lo era. Solo era otro hombre interesado en sí mismo.
—Déjala pensar, Brian. No necesitamos una respuesta de inmediato, Engfa.
Prada habló tranquila, con una sonrisa triunfante en su cara, que fue directa a Charlotte.
—¿Puedo hacerle una pregunta, señorita Dilhokanansakul? —solté casi bruscamente.
—Sí, por supuesto.
Sonreí con sarcasmo. Bajo los ojos de miedo de Charlotte.
—Cuando pasó por enfrente de mi compañía, o cuando caminaste hacia aquí, ¿viste algún tipo de cartel o documento en el que decía que queríamos venderlo?
—No, no he visto ninguno. Pero...
—Correcto —interrumpí. —Entonces no puedo entenderlo. ¿De dónde tomaste esa idea tan absurda? ¿De verdad se piensa que vendería la mejor compañía del país a usted?
Los accionistas presentes nos miraban con temor. Prada arqueó la ceja y me sonrió cínicamente.
—Perdone, pero no veo la idea como absurda. Dilhokanansakul Enterprise está creciendo y prácticamente igualando a Industrias Waraha en las encuestas. Tengo suficiente dinero para comprar su empresa, señorita Waraha. Y hacer un imperio mucho más grande.
Arrogante, prepotente. Como siempre. Reí ante su respuesta sin ninguna pizca de humor, causando cierta sorpresa para todos los que estaban allí. La atmósfera no era una de las mejores, todos notaron rápidamente las miradas de odio entre nosotras.
—¡Ja!, señorita Thansita... Son en estas ocasiones en las que veo su inmadurez en el negocio. Dilhokanansakul Enterprise todavía no ha alcanzado el nivel de mi compañía que actualmente es una de las multinacionales más exitosas, el dinero no compra nombres o experiencia, que de hecho tengo suficiente. Pero no se preocupe, yo también tengo suficiente dinero para comprar la suya y la de cualquiera que venga.