~Epílogo~

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Mana había tenido otra pesadilla y esa ya era la quinta vez en el mes que le pasaba. No quería tenerlas pero no había manera pues aunque le rezara a quien sea sólo lograba que esos sueños sigan.

El ruido de la alarma lo había despertado pues ya era hora de ir a la universidad aunque no tenía ganas porque no quería encontrarse con su ex quien le fue infiel con otro hombre.

Fue hacia su clóset buscando la ropa más bonita que tenga, siempre se lucía con ella. Sin embargo al no encontrar la falda que se había comprado la semana pasada bajó las escaleras enfurecido y ahí encontró a su hermana usándola.

-¿Cuántas veces he dicho que no uses nada mío y mucho menos si no lo he estrenado? ¡Mírame Cecil ¿Cuántas veces?!

-Mh, primero que nada buenos días. -dijo Cecil para después darle un sorbo a su té- Ahí te preparé el desayuno, de nada hermanito.

-No contestaste a mi pregunta ¿Por qué siempre usas todo mío?

-Ya, no hagas drama por una puta falda ¿Quieres que te la regrese? Te la regreso.

-Ahora no la quiero, me voy a comprar otra pero... Ah señor mío. -la abrazó con fuerzas pero por su cabeza- No sé qué karma estaré pagando para que me toque una hermana así, la próxima vez intenta pedirme las cosas.

-Imposible, me vas a decir que no porque te conozco.

-No, eres mi hermana y te presto lo que sea pero por favor pide las cosas. -le dio un beso en la mejilla para después sentarse al frente de ella- Gracias por el desayuno.

-De nada... Aw Mana eres un amor, estás usando el pijama que te regalé para tu cumpleaños.

-Por supuesto, sabes lo mucho que amo a Snoopy aunque para el próximo cumpleaños quiero una guitarra.

-Ah quizás llegue antes.

Comenzaron a desayunar, Cecil solamente le daba unos cuantos sorbos a su bebida porque nunca dejaban que el otro desayune a solas, mucho menos Mana porque él era el pequeño de la familia aunque ya tenía 22 años.

El celular de Cecil sonó y ella lo agarró de inmediato, al abrir ese mensaje se sonrojó fuertemente, el chico con el que se estaba viendo le había mandado un mensaje en donde decía todo lo que le quería hacer.

-¿Era ese sujeto de cabello rizado? ¿Cómo era que se llamaba? Mh no me acuerdo.

-Yu~ki, estamos saliendo pero no oficialmente. Todavía no me pidió que fuera su novia.

-¡Qué imprudente! Dios mío, espero que sigas guardando tu pureza para cuando llegues a casarte.

-¿Guardar mi pureza, en qué siglo vives hermanito? El sexo es lo mejor del mundo, estar con tu pareja, mientras te dice lo mucho que te quiere y que eres sólo de él, que te ahorquen y te nalgueen, después que te amarren a la cama para luego darte más duro. -Cecil miró a Mana, él tenía cara de espanto, estaba tratando de comprender lo que había escuchado- La primavera trajo flores bonitas ¿No es cierto? -dijo en un tono nervioso.

-Tengo que procesar lo que acabo de escuchar y hacer de cuenta que nada pasó.

-Es mejor así pero, Mana, no le temas al sexo. Puede ser bonito si es con esa persona especial, obviamente que la primera vez no es de color rosa porque duele y mucho pero una vez que lo experimentas es de los placeres más fantásticos sobre el universo.

Bara no konrei (Mayonaka Ni Kawashita Yakusoku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora