Recordando Al Hijo Olvidado (The Loud House)

Capítulo 26: ¿Una nueva aliada... oponente... o rival?

Este capítulo terminó saliendo un poco más tarde por qué se me metió la idea de poner la parte final del capítulo.

Y como se darán cuenta, este es un capítulo muy, pero muy largo, creo yo.

Así qué para los que les guste ese tipo de escena denle las gracias a que alguien que no conozco estaba escuchando el soundtrack de John Wick jajaja.

Notas completas asta el final del capítulo.

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Lori y Leni estaban sentadas en una pequeña mesa de té en una de las habitaciones del castillo de Haiku.

La tensión en el ambiente era palpable, y no solo por la atmósfera lúgubre. Las dos hermanas sabían que Haiku, su anfitriona gótica, estaba muy molesta por sus constantes peleas.

Desde que Lori había regresado a casa hace dos meses, había estado muy cerca de Leni, casi de manera obsesiva, lo cual había generado fricciones entre ellas.

Las discusiones constantes y los desacuerdos eran ahora parte de su día a día, y esto había irritado profundamente a Haiku, quien valoraba la paz y el equilibrio.

Haiku se sentó frente a ellas, su mirada severa fija en ambas. Su elegante atuendo negro contrastaba con el brillo esmeralda de su ojo, que parecía brillar con una intensidad sobrenatural. Había preparado una mesa de té meticulosamente, pero la elegancia de la escena solo acentuaba la incomodidad entre las hermanas.

Haiku: Lori, Leni.

Comenzó la pelinegra, su voz baja y controlada.

Haiku: ¿pueden explicarme por qué han traído sus disputas a mi pacífico santuario?

Lori miró a su hermana, sintiendo la tensión. Leni, con su largo cabello rubio cayendo que recorría gran parte de su espalda, evitó el contacto visual, jugueteando nerviosamente con la taza de té frente a ella.

Lori: Haiku, lo siento mucho, pero, he tenido que vigilar de cerca a Leni porque ha mostrado un comportamiento... violento contra cualquier persona que la llegue a molestar.

Dijo la mayor de las hermanas con preocupación en su voz.

Leni, que hasta ese momento había estado evitando el contacto visual, levantó la vista bruscamente y negó con mucha fuerza.

Leni: ¡Eso no es cierto!

Protestó Leni, su voz temblando de indignación.

Lori la miró con disgusto, sabiendo que tenía que decir la verdad, aunque eso provocara más peleas entre ellas.

Lori: Leni, ¿recuerdas lo que pasó con tu exnovio?

Preguntó suavemente.

Lori: Lucy lo vio. Él quiso obligarte a hacer algo que no querías y, en represalia, lo golpeaste tan fuerte que le tiraste un par de dientes.

La rubia de gafas de montura blanca se quedó en silencio, no mostró signos de arrepentimiento, su rostro endureciéndose.

Leni: Sí, lo golpeé. Se lo merecía. Nadie tiene derecho a obligarme a hacer algo que no quiero.

Admitió Leni, su voz firme y si pisca de culpa alguna, Lori frunció el ceño, pero continuó.

Lori: ¿Y qué hay del incidente en el centro comercial? Golpeaste a esa chica solo porque pensaste que te estaba mirando mal.

Leni cruzó los brazos, defendiendo su posición.

Leni: Ella me estaba provocando. No voy a dejar que nadie me falte al respeto.