XXII

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𝗡𝗼 𝗮𝗰𝗰𝗶𝗱𝗲𝗻𝘁𝗮𝗹

Me quedé atónita ante la maestra de literatura y su examen para el último bimestre. Todos comenzamos a desanimarnos con ése examen, pero la maestra no nos hizo caso y dijo que ya tenía listo los grupos. Llamó a las seis personas que serían cargo de cada grupo para hacer el sorteo y ver qué obra le toca escenificar a cada uno.

—no quiero saber en qué grupo me habrá puesto la maestra y que obra será. —Therrence esconde su rostro con sus brazos.

—siento que me dará algo, muchas responsabilidades. El examen de inglés, cantar para inglés, ahora esto...—comenté con desgano.

—tomemoslo como una forma de aprendizaje para la universidad, nada es fácil. —dijo Rose atrás de mí.

La maestra se levantó de su asiento y los seis compañeros volvieron a sus asientos con un rostro opaco. Tuve nervios en ese momento. Todos estuvimos atentos a la profesora que buscaba una hoja entre su folder, al encontrarlo caminó hacia el medio. Pidió que todos estemos atentos para que sepamos a qué grupo pertenecemos y que obra nos toca.

Había nombrado a mitad del salón y aún no escuchaba mi apellido, no me tocó en ningún grupo con mis amigos y felizmente tampoco con Meiggs.

—y Holman

Al escuchar mi apellido desperté de mis pensamientos, fruncí mis cejas confundida. —¿En qué grupo?

—Grupo de Montana, les toca realizar Crimen y Castigo. —volvió a responder la profesora.

Dejé caer mi cabeza sobre mis brazos en la carpeta. Hubiera preferido Romeo y Julieta, un clásico a escenificar. Terminando la clase, mi grupo quedó en quedarnos en la salida para hablar del tema y sortear los personajes. Envié un mensaje a mi profesor para avisarle que iba a demorarme en salir, él después me contestó que iba a esperarme donde siempre para no irme sola a casa. Sonreí bobolicamente pero desapareció de inmediato cuando me crucé con la mirada gélida de Meiggs. La ignoré y me dispuse a guardar mi cuaderno para sacar del curso que nos tocaba.



La clase de ciencia había comenzado, el profesor nos comunicó cuál sería el último exámen. Todos en el salón comenzamos a hacer berrinche, estábamos cansados de toda la responsabilidad que teníamos para dentro de pocas semanas. El profesor de ciencias nos dejó armar una maqueta que asignó a cada compañero según el tema. Sólo nos dijo que nos estaba alistando para la universidad.






Observé las manillas del reloj caminar lento, el timbre de fin de clase sonó después de tanta tortura. Cerré mi cuaderno de contabilidad lanzando un suspiro cansino, tenía que estudiar para el examen final de este curso. Todo se estaba acumulando para el final de bimestre, espero alcanzar las notas que necesito para graduarme.

Guardé mis útiles en mi mochila, me despedí de mis mejores amigos que también estaba por reunirse con sus grupos. Caminé hacia el pasadizo donde Paul estaba con una hoja en blanco escribiendo algo.

—ya estoy aquí. —comenté acercándome a ellos. Mis compañeros ya estaban hablando del libro, Paul comentó que haría sorteo para que sea más justo el personaje que nos tocara, teníamos que buscar una escena que sea cómodo y fácil para todos, una compañera dio la idea de quedarnos algunos días para practicar las escena, podíamos usar el salón de clases, Paul aceptó la propuesta, él podía pedir el permiso necesario para eso.

Love me like you do ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora