XXXI

3.8K 205 4
                                    


𝗘𝗻𝗮𝗺𝗼𝗿𝗮𝗱𝗼𝘀


Observé a Marcus ocultando su rostro con una máscara de papá Noel, sonreí.

—no entiendo por qué venden abrigadores navideños cuando aquí estamos en verano —dejo la chamarra a un lado.

—¿has visto la nieve? —me pregunta mientras caminamos por el centro comercial observando todas las cosas nuevas que había.

—no... pero me gustaría

—es divertido la navidad con frío, no es divertido tomar chocolate caliente con calor...

—eso digo yo, no entiendo, deberíamos adoptar otras costumbres, ¿comer helado navideño, quizás?

—me gusta esa idea —toma mi mano y las entrelaza. Él manejaba el auto de compras, nos encaminamos hacia caja para poder cancelar nuestros productos. Conversamos de algunas cosas sobre navidad, el pulular de personas qué hay en los centros comerciales en estas fechas y lo cansado que es todo.

Pasaron varias horas en la fila para que nos puedan atender, mi paciencia era corta pero felizmente él era un poco más tolerante, me hacía reír con cualquier comentario. Terminando todo en el centro comercial, ordenamos los productos en el auto y nos marchamos hacia su departamento, puesto que ahí podía forrar todos los regalos a mi familia sin romper la magia de la sorpresa.

Era la primera vez que pisaría su departamento, tenía cierto cosquilleo, miedo quizás o el saber que estaría a solas alborotaba algo en mis hormonas. Giré mi cabeza y me apoyé en su brazos mientras lo observaba concentrado manejando. Tenía razón, tenía esa obsesión por admirar mientras conducía.

—baby, ¿has pensando en cuándo será el momento preciso para decirle a tus padres de la relación?

Negué mientras me levanté y miré a Marcus—¿crees que es tiempo?

Me mira unos cortos segundos —: terminaste la preparatoria, ya no soy más tú profesor... —vuelve a mirar hacia la pista

—acabo de darme cuenta de ello, ya no eres mi profesor...eso suena triste

—¿por qué? —suelta una pequeña risa

—por qué no te diré "salud" cuando me corrijas porque ya no soy tu alumna, no te veré dando clases, no te molestaré...

—¿eso debe importar? —acerca su diestra y acaricia mi mentón con suavidad brindándome una mirada cálida, vuelve a mirar a la pista.

—supongo que es algo diferente. Igual me gusta decirte "Teacher", así te agendé en mi móvil con un corazoncito al costado

—¿me llamas "Teacher" cuando sales de la preparatoria pero en todo el tiempo estudiando no querías decirlo? —eleva una ceja

—porque me gustaba molestarte con eso —me encogí de hombros y sonrío satisfactoria

—eres increíble, señorita Luana

Sonreí y mordí ligeramente mi labio inferior al escucharlo llamarme así. El auto se detuvo ante un semáforo, me acerqué a dejarle un suave beso en sus labios que nos envolvía en algo más febril. Era inevitable no sentir cierto cosquilleo recorrer mi cuerpo cuando su mano cubría mi nuca, tenía el don de volverme... suave. No quería que se detenga, pero escuchamos el claxon de los autos de atrás pidiendo que avancemos.

Mi respiración estaba ligeramente elevada, me acomodé en el asiento y él volvió a poner en marcha el auto.

—¿notas que hablamos de un tema y nos desviamos? Ahora solo quiero más besos tuyos —comentó junto a una pequeña risa en la cual me uní.






Love me like you do ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora