Dark Romance [#1]

CAPÍTULO#22

ENZZO

Ares no pudo huir de mis hombres, fue llevado a los túneles subterráneos donde llevaba a mis futuras víctimas para torturarlos y luego enviarlos a su lugar en el infierno. Marie se ve reluciente aunque bajó el maquillaje oculte el dolor que ese cabrón le ocasionó.

-¿Lista? .- cargué el arma, le quité el seguro y se la dí.

-Lista.- tomó la pistola y se acomodó su brillante cabello que cae en bucles.

Di la orden de que abrieran las puertas, ella dirigió el camino con el sonar de sus tacones, en el suelo ya hace el saco de mierda con sangre en la frente y completamente desnudo, Marie no iba a salir de aquí sin antes hacer sufrir a ese imbécil.

-¡Levántenlo! - ordené y las cadenas atadas a sus tobillos se fueron templando hasta dejarlo colgando como un maldito cerdo.- Vaya cojones de mierda que tienes, burlarte de la bratva.

-Tu hermanita iba a ser la segunda esposa de Antonio, pero he caído a sus pies luego de follarmela y quitarle la virginidad.- empezó a reírse como un maniático y mi puño completo se estrelló en su boca tirando los dientes delanteros, la sangre ascendió por su nariz y frente.

-Te mereces que sea yo quien te envie derecho a mi lugar favorito en el infierno pero, está noche el mérito se lo llevará la mujer que decidiste lastimar y quisiste derrumbar pero, aquí el único hijo de puta miserable, arrogante, egoísta, manipulador soy yo pero, a mi hermana nadie la va a dejar tirada en el suelo llorando por un perro asqueroso como tú, así qué prepárate para conocer la mente retorcida de una mujer lastimada.

-La vi disfrutar mientras la follaba, esa cara de niña mimada no es capaz de...

La sangre salió a chorro de su pierna cuando la bala le atravesó una arteria, sonreí mientras él gritó de dolor. Marie avanzó y se acuclilló a la altura de su cabeza que está llena de sangre por mi puñetazo.

-¿Sabes por qué las mujeres matan, Ares?

-Porqué son unas malditas locas..- la saliva con sangre se estrelló en la cara de mi hermana y ella solo se carcajeó.

-Las mujeres- dejó el arma en el suelo y sacó una navaja-, matan por un solo motivo, único entre todas, una sola palabra nos une. Ven-gan-za.

Las puñaladas fueron una tras otra por todo su torso, la sangre salía disparada en chorros y Marie está disfrutado el momento con una gran sonrisa, ya luego le pagaré la terapia.

-Me golpeaste, me llamaste zorra, me humillaste luego de follarme y ahora esta zorra está a punto de matarte, conoce la sangre de los Romanov, Ares Diaz, nos veremos en el infierno.

-Q-que haces....- murmuró preocupado el otro cuando con la punta de la navaja se posó en su tetilla.- Marie

-Le sumaré una palabra más a venganza y será locura.

Los custodios apartaron la mirada cuando lenta y dolorosamente Marie tajo en un perfecto círculo el borde de la tetilla, los gritos se ahogaban en el depósito subterráneo, eran desgarradores y mis jodidos y putos respeto para la retorcida mente de las mujeres.

-Una...- susurró mientras dejaba caer la tetilla al suelo y le escupía - Vamos por la otra.

Está vez, Marie tomó más piel y tajó muy lenta la carne hasta que solo quedó visibilidad de sangre en exceso. Se puso de pie haciendo sonar sus irritantes tacones, apartó a un custodio y tomó el galón de gasolina, extendió la mano hacia el grandullón que me miró y yo asentí dando la aprobación, dejó el encendedor sobre la mano de Marie, ella volvió contoneándose, Le dió un puntapié en de lleno en la nariz ensuciando los putos zapatos caros que le he comprado.