No pude conciliar el sueño luego de que el señor Romanov me diera la espalda, lo escuché suspirar en los sueños y ahora entiendo por qué no sonríe, la felicidad se le ha ido con cada uno de ellos.
También murmura mucho entre sueños, se mueve mucho y pareciera que buscará algo en la cama, en dos ocasiones su mano se posó sobre mi pierna y cintura, no me molestó, el señor Romanov tiene un taco muy caliente.
-¿¡Elizabeth!? - atareado y con el arma en mano llegó al salón viendo a todos lados, tiene el cabello desordenado y las venas de sus brazos se marcan por la tensión.
-Buenos días.- saludé sonriente.
-Joder, te he dejado de sentir en la cama y creí que alguien te había llevado.- dejo el arma en la mesita de centro y se acercó a la pequeña cocina.
-He hecho tortitas, me han salido preciosas, hay jarabe, arándanos, café y café con leche.
-Ha amanecido de buen humor, dormir le ha hecho bien.- ignoré su comentario y le serví las tortitas y café.
-Buen provecho. Esperé.- le espolvoree un poquito de azúcar imparable.- ahora sí buen...- la puerta se abrió.
-¡Buenos días el olor me trajo hasta aquí!
-¡Derek! Buen día, lamento haberte cancelado, pero me apetecía cocinar algo.
-Y está muy bueno.
-Me regalas un poco, querido amigo, el desayuno del hotel es horrible.
-Que te jodan, es mío y no comparto lo mio.
-Puedo preparar más si quieres.
-Te lo prohibo - me señaló con el tenedor Enzzo.
-Gracias, preciosa pero, debo ir por unos zapatos, solo pasaba a ver cómo seguías después de lo de anoche.
-Más tranquila, gracias por preocuparte.-Derek rodeó la encimera y beso mi mejilla para luego pasar su brazo sobre mis hombros.
Sonreí manteniendo mi mirada en su semblante, era un hombre guapo, despampanante, con un carisma único.
-¡ENZZO! - grito fuerte Sandy - Porque no os habéis levantado temprano, tenemos que ir a que nos maquillen a la habitación matrimonial, vamos.- extendió su mano hacia mí.
-Ya la llevo yo, deja que se lave los dientes al menos
-¡Jo! Pero yo te dije a qué hora debía estar lista - hizo un berrinche.
-Son las putas nueve de la mañana, saco tu culo de mi habitación y déjenme en paz, ya la llevo yo! - el grito resonó en la habitación, Derek me sonrió y Sandy frunció los labios siendo sacada por Derek.
Un cuarto de tortitas se quedaron en el plato y Enzzo se fue furioso a la habitación, recogí todo y luego caminé hacia la habitación para esperar a que saliera de la ducha.
Pasaron largos minutos y él no salía del baño, me puse de pie y me acerqué a la puerta, giré el pomo despacio y asomé mi mirada.
Sentado en el retrete, desnudo con su mano tocando su erecto miembro gruñía muy bajito y su cabeza estaba hacia atrás mientras que con la otra mano sujetaba las bragas que anoche había dejado en el baño.
Mi corazón empezó a retumbar en todo mi cuerpo cuando su mano se deslizaba con más fuerza y haciendo presión, se pegó las bragas a la nariz y su punta destilo líquido blanco.
Retrocedí cuando sus ojos se abrieron mirando el techo y su pecho subía y bajaba. Me dejé caer en la cama con los vellos erizados y una extraña sensación en mi estómago.
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Dark Romance [#1]
Ficção Adolescente¿Amamos de verdad? ¿O solo tenemos miedo a estar solos?