¿Duerme?
¿O simplemente se desliza por ese alucinógeno espacio intermedio en el que se mezclan el sueño y la vigilia?
Podría ser cualquiera de las dos cosas: esa noche no hay diferencia entre las pesadillas y la realidad.
Lo único que sabe con certeza es que el tiempo pasa. Puede que duerma o que sólo parpadee, pero la próxima vez que abre los ojos ya ha salido el sol y sus pulmones están vacíos.
Peter se incorpora, pero no quiere hacerlo; quiere no moverse nunca más.
Quiere hundirse en el suelo y desaparecer, porque no tiene ni idea de cómo se supone que puede seguir adelante después de lo que pasó anoche...
《Pasaron cosas malas, Parker, no lo olvides...》
Simplemente no puede. Porque en cuanto vuelve en sí, Peter sufre el peor ataque de asma que ha tenido desde que era pequeño.
Es peor que los episodios de sibilancias que solía tener en casa de Ben; peor, incluso, que el ataque que tuvo en casa de los Arlington.
Sólo puede aspirar pequeñas cantidades de aire, apenas un bocado cada vez.
Así que Peter se incorpora y busca a tientas su inhalador en la mesilla de noche.
No lo encuentra.
Sólo hay otro sitio donde podría estar, sólo otro sitio donde lo guarda, pero en cuanto se da cuenta, en lugar de levantarse de la cama, se tumba, cierra los ojos e intenta llevar el aire a sus pulmones por la fuerza de su voluntad.
El inhalador está en la mochila.
Esta se encuentra en la entrada, cerca del salón, donde se le cayó anoche cuando fue a ayudar a acostar a las niñas.
Si quiere recuperarla, tendrá que atravesar la cocina, donde puede oír el tintineo de las voces de las niñas mezclado con el sonido más grave de la de Skip.
No quiere salir.
Doblarse no funciona. Peter se levanta, se golpea el pecho e intenta toser. Se acerca a la ventana y la abre; asoma la cabeza, incluso contempla la larga escalera de incendios.
Nunca lo conseguirá.
El aire no entra.
Mareado, con un hormigueo en la punta de los dedos, sale a trompicones de su habitación.
Es la misma escena con la que se despierta todas las mañanas desde que se fue a vivir con Skip: las chicas en la mesa, sentadas sobre montones de cojines para alcanzar sus platos.
El hombre, de pie sobre los fogones y todavía con el pantalón del pijama puesto, revolviendo los huevos en la sartén.
Sólo que esta vez Peter ve que los hombros de Skip se tensan cuando lo oye entrar. Este no se gira.
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THE THIRD OPTION
FanfictionHomecoming AU Ben y May se divorciaron antes de que los padres de Peter murieran, así que cuando Tío Ben es asesinado, el menor pasa a vivir en una casa de acogida. Basta una pequeña muestra de superpoderes para que Peter decida que no quiere segui...