Homecoming AU
Ben y May se divorciaron antes de que los padres de Peter murieran, así que cuando Tío Ben es asesinado, el menor pasa a vivir en una casa de acogida.
Basta una pequeña muestra de superpoderes para que Peter decida que no quiere segui...
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Lo pierde por diez minutos.
Eso es lo que le dice la somnolienta recepcionista de la comisaría cuando llega tres horas más tarde, después de saltarse todos los límites de velocidad e ignorar todas las señales de tráfico de camino a la ciudad.
Es un milagro que no la hayan detenido, pero llega demasiado tarde. Los Servicios de Protección de Menores han llegado y se han ido, en el proceso han encontrado a unos parientes lejanos de Ben para que se queden con Peter, al menos por esta noche.
Aunque había papeleo que rellenar y arreglos que hacer, se han ido antes de que llegue May.
Diez minutos
Si no se hubiera parado a discutir con su madre, podría haberlo conseguido.
Si se hubiera ido...
Ella ni siquiera sabía que Ben tenía primos. Le pide sus nombres, pero la recepcionista no los tiene, o quizá simplemente no le importan, y le informa de que, aunque los tuviera, no se los daría a una mujer cualquiera en pijama que parece salida del albergue más cercano.
——"No soy una sin techo"—— dice entumecida—— "Dispararon a mi marido".
Esta información no parece inspirar ninguna simpatía en la recepcionista, pero deja de intentar rechazarla.
En su lugar, llama al detective encargado del caso, que tiene los ojos igual de dormidos, y que la conduce a su despacho en la parte de atrás mientras en su cabeza suena como un cántico el conocimiento de su fracaso.
Diez minutos.
Lo he perdido por diez minutos.
Apenas oye lo que dice el detective, pero se obliga a escuchar. Fue un atraco al azar, por lo que saben. Probablemente el tipo quería la cartera de Ben, pero no la consiguió, se asustó cuando se disparó el arma y corrió.
La policía hará lo que pueda, dice el detective, con una entonación rutinaria y aburrida, pero ella no debería hacerse ilusiones. Estas cosas pasan a menudo.
——"¿Y Peter?"
Es lo único que quiere saber.
Como dijo la recepcionista, no pueden dar ninguna información sobre el menor o su paradero a alguien que no sea su familia inmediata.
May puede intentar ponerse en contacto con el Servicio de Protección de Menores, pero lo más probable es que le digan lo mismo.
El detective le dice que lamenta su pérdida y la acompaña a la puerta.
Sale de la comisaría. Es casi de día, el sol está empezando a salir. Se queda mirando el matiz rosado entre los edificios a lo lejos, con el aliento levantándose en un vaho fresco frente a su cara, y luego saca el teléfono del bolso.
