Segundo libro
Primero: mi dulce karma
Luna Hell la pequeña hija de Charlotte y Lucas, líder de la mafia.
Está joven cumple el rol más importante de esta historia, la protagonista que tendrá que estar del bando contrario de su padre para lograr un o...
Llegamos a la bodega y tenían a un hombre atado a una silla sangrando por los golpes.
- ¿Ya hablo?
- todavía no quiere.
Mi padre se quitó el saco de su traje y lo dejo a un lado.
Se acercó al hombre y le dió un golpe.
- ¿Para quien trabajas?- su tono era de enojo.
El hombre estaba sangrando, su rostro lleno de sangre y golpes, su ropa rota y manchada de sangre.
Me quedé parada a un lado de Leon, viendo con los brazos cruzados mientras mi padre lo intentaba hacer hablar.
— ¿No le da miedo o lastima esto?
— no, lo mío no es tener lastima o miedo- saque una paleta de mi bolsa y me la metí a la boca- en este negocio la lastima y el miedo no sirven de nada.
— usted es demasiado tranquila, señorita... ¿Lo va a hacer hablar?
— si mi papá no puede, lo are.
— ¡Para el escorpión!- el hombre bajo la mirada.
Una cosa sabía, ese tipo del "escorpión" estaba muerto desde antes de que yo naciera.
Ese hombre había matado a mis abuelos y a mi tío, no los conocí pero se había metido con mi madre y recordar eso hacia que me hirbiera la sangre.
— pero ese idiota está muerto.
Mi padre estaba confundido y muy enojado.
— su primo ocupó su lugar.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
— ¿Vas a hablar por las buenas o por las malas?- lo tome de los cabellos haciendo que me viera a la cara- habla.
— si hablo o no, me van a matar de igual manera.
— si, tienes razón- sonreí un poco.
— mi hija no te va atener piedad, te lo advierto, mejor habla.
— ya lo escuchaste- saque una pequeña navaja de mi bolsillo.
Los hombres de mi padre solo estaban viendo el cómo le sacaba información y si ponía resistencia solo cortaba un poco con la navaja.
— dime, ¿dónde está?- la pregunta más importante.
— está aquí, en los angeles.
— ¿Conoces a Charlotte?
— si, ella está con el, desde ase años la tiene secuestrada.
Mis ojos brillaron con esperanza de que mi madre estuviera viva.
— pero... Tiene una pequeña niña de unos siete u ocho años.
Me quedé sin palabras.
— ¡¿Es hija de ese imbécil?!- mi padre lo tomo del cuello de su playera completamente rota- ¿tocó a Charlotte?
— ¡no! La chica ya estaba embarazada cuando la secuestraron.
<<¿Tengo una hermana?>>
— Lucas, amor, te tengo una sorpresa- lo abrazo por detrás- te lo diré después de la fiesta.
<<¿Charlotte me quería decir que estaba embarazada?>>
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
— ¿Cómo que no sabes?
— me dijo que me tenia una sorpresa pero no me dijo que era.
Estaba hablando con mi padre por lo que había dicho ese hombre y si era verdad yo tenía una hermana que al igual que mi madre está en las garras de ese desgraciado.
— creo que ese hombre nos va a servir de algo- ví a mi padre.
— aprovechemos la situación- sonrió mientras pensaba en algo.