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Los meses pasaban y nada se solucionaba, solo había problemas no soluciones, Anika debe estar en estos momentos en su octavo mes de embarazo, y yo me los perdí todo, tengo sueños en donde me la imagino con su lindo vientre, donde debe de estar nuestro hijo o hija...como me gustaria una niña igual de hermosa que ella, una mini ella.

Le rezo a Merlin todos los dias, para que me llegue otra carta de ella, diciéndome que esta bien, que nuestro bebé vive y que me diga que pronto estaremos juntos.

—Charlie es hora de irnos.—Me dijo Fred.

Yo asentí y me metí la carta de mi amada en mi bolsillo, me habia unido a la orden del fénix iríamos a una misión para rescatar a Harry, convirtiéndonos en 7 Harry Potter.

—Deséame suerte mi amor.

Le dije a una chispa de fuego que tenia una vela.

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—QUE BUEN MOMENTO TE DIO PARA NACER.

Se escucho otra explosión y mi madre solo trataba de hacerme caminar mas rapido,

—Mas rápido hija.

—Lo hago lo mas rapido que puedo madre, ESTOY PARIENDO A MI BEBÉ.

Un explosivo de aire, agua y tierra choco junto a una pared mandándonos al suelo, pero mi padre recibió todo mi impacto para que mi vientre enorme con mi hijo no sufriera mas daños.

—Ya no puedo aguantar...

—Hija un poco mas

Me acosté en el suelo con mis piernas abiertas, sintiendo solo un poco de liberación.

—Mamá desde anoche...comence con contracciones...ahora estoy en labor.

—Hija debemos llegar al refugio.

—Si no nace ahora, mi hijo morirá...el va a nacer ya.

—Anika esto no es un lugar seguro para dar a luz.

—Ningún lugar es seguro ahora madre...el único el refugio...nacerá antes de que lleguemos.

Mi madre veia mi cara sudada mientras yo jadeaba, ella coloco un escudo de fuego que nos cubría y se ubico entre mis piernas.

—Que nazca mi nieto.

Sentía que trataban de apagar el fuego de mi madre, pero poco me pudo importar en esos moemntos, yo solo sentía un dolor horrible, mientras mi hijo llegaba a la vida. Todo se hizo mas lento, recordaba todo lo vivido con Charlie, solloce solo de pensar que lo queria conmigo. Grite de rabia, griete y me sente por el dolor que sentía, logrando que naciera mi bebé.
Queria dormir una siesta, queria descansar un rato...pero antes queria ver a mi hijo.

—Mi hijo.

Mi madre tambien sudaba por estar usando sus poderes cuando me dejo a mi pequeño en mi pecho, era un báltico pelirrojo hermoso.

—Mi pequeño Phoenix.—dije besando su frente mientras lloraba.—Papá te amo hijo, papá y mamá te aman mucho.

Algo en mi bolsa se movió, me senté con dificultad para revelar el huevo de dragon de mi hijo, era un cascaron dorado que se quebró y salio un pequeño bebé dragon, el dragón compañero de mi recién nacido hijo. Mi madre coloco el dragon con cuidado sobre mi bebé, haciendo que su lazo fuera unico y que existiera.

—Crees poder caminar al refugio?—Pregunto mamá.

Vi a mi pequeño se había calmado cuando sentía mi corazon, y tenia a su dragon a su lado. No podia quedarme aqui con ellos.

—Por mi hijo créeme que llegare.

Mi madre me ayudo a levantarme con mi hijo en brazos, me sentía muy débil, sucia y cansada...pero no importaba, mi madre lanzo su fuego matando a todos los que estuvieran cerca para darnos tiempo de correr, la adrenalina y el amor de una madre por su hijo puede hacer milagros.

Cuando llegamos al refugio, me acostaron en una cama, en donde mi hijo tuvo su primer comida de mi pecho.

—Te amo hijo, con toda mi alma

𝔐𝔦 𝔠𝔥𝔦𝔠𝔞 𝔣𝔲𝔢𝔤𝔬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora