𝔑𝔞𝔯𝔯𝔞𝔡𝔬𝔯 𝔬𝔪𝔫𝔦𝔰𝔠𝔦𝔢𝔫𝔱𝔢El ambiente en la habitación estaba cargado de emoción. Anika Dragonste Weasley respiraba profundamente mientras se preparaba para traer a su segundo hijo al mundo. A su lado, Charlie Weasley sostenía su mano, ofreciéndole apoyo y amor incondicional. Las llamas de las antorchas en la habitación de Ciudad Llamas danzaban suavemente, proyectando sombras cálidas en las paredes de piedra.
El nacimiento de su primer hijo, Phoenix, había sido difícil en todos los sentidos, en el medio de una guerra y naciendo en una batalla, son una partera adecuada. Siendo su abuela quien ayudó a su hija a que llegara a este mundo. Anika sentía la conexión con su bebé, y la magia del elemento fuego la envolvía con cada contracción.
—Estás haciendo un trabajo increíble, Anika —dijo Charlie con una sonrisa, sus ojos llenos de admiración.
—No me digas idiota...estoy así de nuevo y es por completo tu culpa Charlie...AGGG —respondió Anika con esfuerzo, apretando su mano con fuerza—. No puedo creer que aceptara volver a estar embarazada porque tú querías vivir uno
—Te amo cariño.—Dijo el con una sonrisa hacia su mujer que solo quería matarlo en esos momentos.
La partera, una mujer sabia y experimentada de Ciudad Llamas, se acercó a Anika, monitoreando cuidadosamente el progreso del parto. Anika sentía el calor y la energía del fuego resonando en su interior.
—Ya casi estás ahí, Anika —dijo la partera con voz calmada—. Solo una última empujón.
Anika asintió, concentrándose en la tarea a mano. Con una determinación feroz, dio el último empujón, sintiendo cómo la nueva vida se abría paso al mundo. Un grito de un recién nacido llenó la habitación, y Anika se desplomó de alivio y felicidad.
La partera envolvió al bebé en una manta suave y lo entregó a Anika. Con lágrimas en los ojos, Anika sostuvo a su hijo, sintiendo la calidez de su piel y el latido de su corazón. Charlie se inclinó y besó la frente de Anika, sus ojos brillando con orgullo.
—Es perfecto, Anika —murmuró Charlie, acariciando la mejilla del bebé. El primer parto en el que estuvo presente.
Anika sonrió, sintiendo una ola de amor y gratitud inundar su ser. Miró a su alrededor, a la habitación iluminada por el fuego y a su familia, y supo que este momento era un nuevo comienzo, una continuación de su legado como domadora de dragones y miembro de la poderosa familia Dragonste.
—Bienvenido al mundo, Drakon Dragonste Weasley —susurró Anika, mirando a su hijo con ternura—. Te prometo que siempre te protegeré y te enseñaré a ser fuerte y valiente, como todos los Dragonste antes que tú y jugaras mucho con tu hermano mayor.
Nota.
Muchas gracias a todos por seguirme en esta historia, realmente esto lo hago por un hobbit que se vuelve divertido para poner historias que tengo en mi cabeza en relatos.
Les agradezco de corazón por todo.
Los amo y los veo en la próxima historia que ya están los primeros capítulos publicados.
Semidiosa_22
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𝔐𝔦 𝔠𝔥𝔦𝔠𝔞 𝔣𝔲𝔢𝔤𝔬
FanfictionEn los vastos territorios de Mundo Elemento, donde los cielos se encendían con llamas danzantes y los valles resonaban con el rugido de las bestias aladas, vivía Anika Dragonste. Desde temprana edad, se sumergió en el arte ancestral de la doma de dr...