Capítulo 1 Sandoval

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Akim

Paseo mi vista en las personas que beben y bailan en mi club, el más famoso de la ciudad de Chicago, si quieres disfrutar y encontrar a las mejores mujeres debes venir al Infierno.

Aunque esos idiotas no saben que muchos de ellos pierden más que su alma en este lugar, he matado a tantos en esta oficina que ya perdí la cuenta. Hijos de perra que creyeron que se podían meter con la Brátva. Nuestros enemigos saben la forma en que nos ocupamos, los matamos de muchas maneras, pero siempre les arrancamos los ojos, ya que deben estar ciegos para querer fastidiar a la mafia roja.

Contempló a las mujeres que bailan y contonean su cuerpo al ritmo de la música, observo a cuál de todas ellas me follaré, no debe ser muy especial, generalmente elijo al azar, porque todas ellas no son nada más que un juguete de una noche. Y eso es lo mejor, no necesito más. De esa manera me ahorro estar en una estúpida relación escuchando quejas, volviéndote débil. En la mafia no se puede tener debilidades, al más pequeño indicio de mostrar una, tus enemigos la toman y te destruyen.

—Me mandaste a llamar — dice Vitali desde el marco de la puerta.

—Si Pasa. — Le confirmo tomando asiento en mi escritorio.

—¿Ocurre algo? —Pregunta preocupado.

—Toma asiento, bebé un vaso de vodka y relájate. Que no ha ocurrido nada malo. Aún. —Le digo mientras tomo un sorbo de vodka.ㅡSolo te llamo para informarte que quiero que compres otro local comercial, pero este debe estar en la rivera norte de Chicago.

—¿En la ribera norte? entonces será lujoso. —Dice mientras desabrocha su saco— ¿Qué quieres abrir ahí?

—Quiero abrir un nuevo club, pero este más íntimo y exclusivo, orientado a satisfacer todo tipo de deseos sexuales. Sin ataduras.

—Bueno... bueno. Me gusta la idea. Siempre y cuando yo pueda usar ese lugar, sabes que también me gusta jugar. —Menea las cejas con una sonrisa burlona.

—Lo se ¿recuerda cuántas veces hemos visto tu culo al aire, huyendo de los maridos de tus amantes? — ofresco mi vaso.

—¡Olle, mi culo es precioso! no te quejes. —Reclama indignado — Entonces. Dalo por hecho, ahora me retiro que interrumpiste mi cita — toma un último trago mientras se levanta. —Mañana te llamaré para mostrarte el lugar.

—Siempre tan efectivo Señor Pavlov. —Le digo en tono burlón.

—No puedo fallarle a mi Pakhan, me gustan mis ojos —Es lo último que dice mientras me guiña un ojo y sale de la oficina.

Vitali Pávlov es carismático y muy bueno en los negocios. No tengo dudas que no me fallará en esto, él nunca falla. Por eso es quien se encarga de los negocios legales de la Bratva los cuales son los almacenes logísticos, propiedades y el Club Inferno.

Vuelvo a incorporarme mirando por el ventanal que me permite ver todo el lugar, doy una mirada rápida a las mujeres, me decido por mi juguete de esta noche una rubia con buenas tetas.

***

Son las siete de la mañana, me encuentro en la oficina del club. Hay un cargamento de coca que llega hoy desde México. Estoy revisando todos los detalles logísticos y de seguridad para asegurar que la mercancía de esta noche llegue intacta a uno de nuestros almacenes. Orel Koslova es el encargado de la logística de todos nuestros productos, traza las rutas más seguras para que la DEA no nos intercepte. Boris Vasilev es el encargado de la seguridad y los soldados de pie. Así que ambos me dejaron archivos con la ruta y los hombres que protegerán la mercancía.

Me paso la mañana afinando detalles y llamando a los hombres a cargo. según ellos todo se ejecutara de la mejor manera posible, pero uno nunca se puede confiar, tanto los Italianos como los Polacos pueden meter sus asquerosas manos en esto, solo para jodernos. Termino la llamada y veo entrar Vitali con una cara nada normal en él.

Fusión Peligrosa (+21)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora