AVA
Damon me miraba como si estuviera a punto de torcerme el cuello. Sé que no debí aceptar lo que James pedía, pero tenerlo cerca prohibiéndome cosas me fastidió hasta tal punto de demostrarle que no mandaba en mí. Lo cierto es que antes de que se subiera al auto cuando volvió a mirarme, me sentí culpable, y no había cosa que deseara más que él ganara esta puta carrera.
Antes de que la bandera se ondeara hacia abajo y la trompeta sonara junto a la bengala que estallaba en el cielo lo perdí de vista porque todo el mundo empezó a amontonarse al frente tapándome de perderme la salida de ambos. Tuve que luchar un poco más para volver al frente y me pegué de Lindsay y Emilia que me sujetaron para que no volvieran a cubrirme.
La algarabía me tensaba porque cuando visualicé la pista vi a Damon bastante atrás que James y el pánico se apoderó de mí. Me relajo porque apenas está empezando la carrera, pero cuando veo que pasan varios minutos más y Damon sigue detrás, me preocupo.
—¿Por qué no avanza?—susurro preocupada.
—¡Vamos, Damon!—grita Lindsay y otros más detrás de ella.
Veo a Jason unos cuantos pasos de mí hablar algo perturbado por el intercomunicador con Damon. Me apresuro a donde él está y en cuanto sus ojos me miran suspira.
—Ella está bien, Damon—le dice rápidamente—. ¡La tengo frente a mí, carajo, esta bien! ¡Ahora concéntrate en la puta carrera que vas atrás!
Observo que han dado la primera vuelta y Damon sigue de último.
—¿Qué es lo que le pasa, Jason? Está turbado, no está avanzando.
Él me mira cansado.
—Está distraído, Ava, por tu culpa.
Lo sé y empiezo a sentirme miserable. Me tenso porque me preocupa que su distracción pueda herirlo. Está manejando algo perdido y temo que se pueda hacer daño en la pista, porque la velocidad es máxima, pero no logra pasarle a James y eso me tiene desesperada.
¿Irme con James a un paseo? Pero es que en realidad aquella vez que lo hice fue por fastidiar a Damon, y esta vez por igual. No lo conozco y no quiero irme con él a ningún lado. La verdad es que acepté esta apuesta porque estaba segura que Damon ganaría, pero no contaba con que su distracción por mi decisión lo pusiera en último lugar.
La segunda vuelta se efectúa y Damon sigue de último, batallando por pasarle pero James sigue llevando la delantera.
—No quería...no quería preocuparlo. Te juro que esa no fue mi intención, Jason—le digo de corazón y con cara de desesperación.
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Mi Devoción #4
RomansaCUARTO LIBRO DE LA SAGA MI ASESINO FAVORITO. Ava parece ser muy idéntica a su tía Lexie en personalidad, pero parece haber heredado los mismos gustos de su madre de enamorarse de quien no debe. Ella siente que se aburre fácil de los hombres y que pi...