One Shot's ||Jortini||

"Paralyzed"

"Tú, tú caminaste en la habitación. En un viernes por la tarde. Ahí es cuando te vi por primera vez. Y yo estaba paralizado."

¿Quién iba a decir que el amor a primera vista era una muy mala pasada? Sobretodo si no le hablaste, no te vio y ni siquiera sabés su nombre. Para cualquier chico hubiera sido muy fácil tan solo saludarla y hablarle pero Jorge era muy tímido. Él no la había olvidado, casi siempre pensaba en la manera que caminaba, que sonreía, su pelo castaño, sus labios, su nariz y sus ojos que pareciera que buscaba algo, o alguien. Él esperaba algún día encontrarla y armarse de valor para hablarle. Si tan solo fuera como los demás chicos. Él la había visto por primera vez hace dos años, dos años que se había dedicado a ella.

Salió de su habitación y camino al lugar donde la vio por primera vez, la vio diez veces pero ella no lo nota. O eso cree él.

"Tenía un millón de cosas que decirte. Pero ninguna salió ese día. Por que nunca fui de esos chicos. Esos que siempre tienen las mejores líneas."

Siempre se imaginaba a él junto a ella, felices. Si tan solo supiera su nombre o algo sobre ella. Y ahí estaba ella, más linda que nunca. Con su pelo suelto, que se movía mientras caminaba. «Perfecta» pensó Jorge. Hoy tiene que lograr hablarle, es ahora o nunca. Se acercó a ella y le sonrió. Fue directo hacia ella.

"Trato de hablar pero tengo la lengua trabada. Trato de respirar pero estoy congelado por dentro. Trato de moverme pero estoy atrapado en mis zapatos. Tú me tienes paralizado, paralizado, paralizado. Te veo pasear, pero todo lo que haces es pasarme. No puedo ni siquiera hablar, porque las palabras no entran de mi mente. Me gustaría hacer un movimiento, si tan solo tuviera las agallas para hacerlo. Pero estoy paralizado, paralizado, paralizado."

Ella camino cerca de él, no trato de pararla por que no podía, no tenía la valentía ¿En que estaba pensando? No podía ni siquiera acercarse a ella sin que se quedara paralizado. La dejo ir, y esta vez parecía que era para siempre, no podía seguir enamorado de una persona que no conocía, ¿o si?

"Ahora he aprendido de mi errores. Nunca dejes una cosa buena escapar. He tenido mucho tiempo para mirar hacia atrás."

Jorge se sentó, no sabía lo que iba a hacer hace unos minutos. Había decidido dejarla ir, nunca más tratar de acercarse a ella, aunque de todas maneras nunca lo había logrado.

Llevaba más de una hora, simplemente pensando en nada y a la vez en todo. ¿Cómo había sido tan tonto en pensar que podría hablarle? Llevaba dos años enamorado de una chica que ni sabía que existía. Era mejor dejarla ir.... Aunque nunca la haya tenido. Cerró los ojos solo para dedicarle un último pensamiento, y después tratar de dejar de amarla y solo recordarla como un obstáculo o error, aunque fue el mejor error de su vida. Alguien se sentó junto a él, pero no le importó, ahora no le importaba nada.

—Hola, soy Martina.

Abrió los ojos para ver a su acompañante. Se llevo una gran sorpresa al ver quien era... Era ella.

—Ho... Hola—Ella sonrió al ver como trataba de hablarle. A Martina siempre le había parecido hermoso y esta tarde, cuando la miro y le sonrió, pensó que le iba a hablar pero él paso de largo. Así que había decidido hablarle, le resulto divertido y tierno que estaba nervioso, igual que ella.

— ¿Cómo estas?

—Bien—Respondió nervioso, sin dejar de verla. A Martina no le incomodo por que tampoco podía dejar de verlo —Mejor ahora.

Los ojos de Martina tuvieron un brillo especial, era el comienzo de algo.