8- LOS ESPIAS.

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Volvimos al club dispuestos a ver que entrenamiento seguiríamos. Estábamos llenos de energía y queríamos seguir adelante dando lo mejor de nosotros.

- ¿Qué haces aquí?-preguntó Endou a Natsumi que estaba allí de pie.

- A partir de hoy seré gerente del club -aclaró bastante orgullosa de ello.

- ¿¡Qué!?-exclamamos todos sin excepción.

Vale, recapitulemos para ver cómo va el club. Ahora somos 14 jugadores y tres gerentes (Aki Kino, Haruna Otanashi y Natsumi Raimon). Dicho esto, llegamos a lo importante. Por fin llegó el bendito entrenamiento. Natsumi tenía cosas que organizar así que vendría más tarde. Llegamos al campo de la ribera en el que llevábamos entrenando todo este tiempo. Yo andaba con los regates cuando oí a Kazemaru.

- ¿Soy yo o ha incrementado en público? Tal vez ya lo hayamos conseguido.

- ¿El qué?-preguntó Endou ingenuamente al escuchar lo que comentaba su compañero.

- Hinchas -esplicó y miró a todos los que se habían acercado.

- Tenemos... fans -musitó el capitán con ojos brillantes-. Practiquemos las supertécnicas.

Entonces, la limusina de Natsumi irrumpió en el campo como si hubiera escuchado lo que había dicho. Ella salió y nos miró muy seriamente.

- Practicar las técnicas está prohibido -ordenó cruzándose de brazos.

- ¿Por qué?- preguntaron los chicos incrédulamente sin saber qué pasaba con ello.

- No son hinchas sino ojeadores de nuestros rivales que quieren evaluar nuestra fuerza.-dijo Gouenji.

- Como somos un equipo casi desconocido que ha ganado a la Teikoku Gakuen y hemos conseguido una racha de victorias, desean recabar información -aclaré y coloqué la mano sobre el hombro de Endou-. Lo siento, pero en el Omega Alfa nos pasaba constantemente.

- ¿Qué entrenamos entonces?-preguntó Endou algo decaído.

- Hay muchas cosas que hacer. Pases, regates, resistencia, velocidad...-propusó con una leve sonrisa Shuuya.

- Tiros, agilidad, elasticidad, las estiradas, el uno contra uno y cientos de cosas más.-completé la enumeración.

Al día siguiente había, si podía ser, más gente. Pero que hubiese más gente no nos asustó, lo que nos sorprendió fue que apareciesen aquellos camiones. Domon fue el que nos avisó de su llegada, mientras todos estábamos ocupados estirando correctamente.

- Eso es un radar.-susurró sorprendido Handa.

- ¿Quiénes son? -preguntó nuestro incrédulo y desinformado capitán.

- Nuestros próximos rivales, la Mikage Sennou. Son Sugimori Takechi, su portero, y Simozuru Arata, su delantero estrella -explicó la ex periodista.

Volvimos a los entrenamientos, nos traía sin cuidado que miraran. Uno a uno chutábamos para que Endou tratara de pararlo, pero aquellos dos entraron en el campo y eso ya era un asunto distinto.

- ¿Podríais salir del campo, por favor?-pidió educadamente Endou tras parar el entrenamiento.

- No es necesario que escondáis las supertécnicas. Usadlas.-comentó Sugimori.

- Ya hemos analizado los datos que tenemos y hay un 100% de posibilidades de que perdáis.-añadió el delantero.

- ¿Cómo?-dije riéndome-Eso es imposible. Aún no hemos jugado el partido.

- ¿Qué partido? Sólo eliminamos pestes.-rebatió con calma Simozuru.

- Oye, sin insultar-dije ya algo molesta y no era la única.

El amor de rubí. Parte 1.VivirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora