15- EL CLÁSICO.

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El partido dio comienzo, ya, sin problemas y con Masaru Anzai como entrenador de la Teikoku Gakuen. Gouenji, Someoka y yo subimos al ataque. Oono Densuke y Narukami Kenya trataron de robarle el balón al delantero de fuego. Este los esquivó y junto a Ryuugo, usó el Dragon Tornado. Genda usando el Pawā shīrudo (Escudo de fuerza) lo repelió con gran eficacia. Sin duda era un gran equipo. Gojou Masaru recibió el despeje pasándole a Kidou. Este sorteó a Shorinji y siguió corriendo con el balón. Daiki recibió un pase alto del capitán para, después, chutar con el Hyakuretsu shotto (Chut de los 100 toques). Endou usó el Nekketsu Panchi pero no pudo detenerlo bien y el tiro rebotó en el larguero. 

- Endou, tranquilo. Debes centrarte.-dije palmeándole la espalda.

Endou se preparó y Yuuto sacó el córner. Sakuma lo cabeceó y Endou trató de asirlo pero se le escapó. Traté de cubrir a los delanteros para que el capitán lo sujetara. Claramente, no estaba centrado.

- Endou, será mejor que me ponga yo en la portería. Necesitas aclarar la mente.

- No.-me contestó.-Soy yo quien debe proteger esta portería.

Asentí y vi como Gouenji hacía una mueca. Sabía que algo pasaba pero no exactamente el que.  Cuando el capitán pasó Kidou recogió el pase sin que pudiésemos intervenir. Superó a Kabeyama con una finta rabo de vaca.  Cuando era un uno contra uno, Shuuya consiguió entrar y detenerle. Después de eso, nuestro rival quedó con un pequeño dolor en la pierna.

- ¿Estás bien?-le pregunté tendiéndole la mano para que saliera del campo.

- Me duele un poco.

Asentí y volví al partido. Vi como Haruna curaba a Kidou y como este entraba en el campo. Volvimos a la carga con un Dragon Crash, un Fire Tornado y un tiro normal mío, pues no tenía margen de maniobra. Kidou volvió a recibir el esférico y usó el Kotei Penguin 2gou (Pingüino emperador Nº2). El disparo se dirigió a la portería y yo corrí desesperadamente a pararlo con mi propio cuerpo si era necesario. Traté de usar la Defensa de Hades pero me arroyó antes de completarla lanzándome al poste. Endou usó la Goddo Hando pero la quebró sin problemas. Gol. 1 a 0 a favor de la Teikoku.

- Valeria, ¿estás bien?-preguntaron Gouenji, Kidou y Endou.

- Se puede decir que si. Se encajar bien los golpes.-dije con una sonrisa dejando caer la cabeza sobre el césped.

- Será mejor que descanses.-dijo Shuuya llevándome a la banda.

- Ni lo sueñes.-dije soltándome de su agarre y cayendo.

- Ya claro. Anda, ven.-dijo riendo por mi forma de actuar. ¿Es qué no me dejaran jugar un partido en condiciones?

Gouenji volvió corriendo para sacar de centro pero pitaron el final del primer tiempo.

- ¿Qué te ha pasado?-le preguntó Kazemaru.

- Ni yo mismo lo se bien.- respondió Endou cabizbajo.

- Te voy a decir una cosa.-dijo Natsumi.- Verte brillar hizo que me atrajese el fútbol. Ahora, ya no ocurre. Así que, haz algo.

- Kageyama no te diría nada raro, ¿verdad?-preguntó el entrenador.

Gouenji seguía serio mirando a Endou, se sentó a mi lado y me puso una bolsa de hielo en el hombro.

- ¿Qué tal?

- Lista para salir.-le miré sonriente.- Estoy harta de no poder jugar un partido en condiciones.

- Tranquila, llegará uno.

- Me gustaría creerte, don llama.

- ¿Don llama? ¿De dónde has sacado eso?-dijo riendo.

- Del Fire Tornado.

- Tienes buen gusto para los motes pero peligro cuando te pones terca.

- Yo no soy terca, soy decidida. Hay diferencias, ¿sabes?-le dije orgullosa.

- Lo que tu digas, lady mitología.-contestó yendo al campo.

- ¡Oye!

Solo oí como se reía. Al menos, ya no está tan tenso como antes. La tensión se podía cortar con un cuchillo de untar.

Kidou salió al ataque esquivando a cuantos se ponían en su camino. Daiki chutó y Kazemaru lo detuvo con su cuerpo. Y no sólo él, el resto de defensas hizo lo mismo tratando de aliviar la carga de Endou.

- Necesitan ayuda. -dije levantándome y tambaleándome.- Entrenador, déjeme ayudar.

- No ves que no puedes con tu propia alma. Siéntate y no digas tonterías.-me contestó.

- Déjeme salir, se lo suplico.-le repliqué de rodillas.

- No.-fue lo único que dijo.

Yo no me moví ni un centímetro y quedé mirando como mis compañeros recibían un golpe tras otro y Gouenji me miraba con pena y sufriendo por los chicos. Entonces, tuvo que pasar lo que más temía. La Desu zon. Domon lo despejó dándole el tiro en la cara. Ya éramos dos los caídos y Kageno Jin debía salir. Gouenji chutó dándole a Endou. Me levanté a toda prisa mareándome y cayendo de nuevo. 

Sacaron de esquina y usaron el Tsuin Būsuto (Remate combinado) que despejó el capitán con el Bakuretsu Panchi (Despeje explosivo). Los chicos volvieron con un Dragon Crash encadenado con un Fire Tornado que, esta vez si, entró. Kidou, después de muchos tiros, usó el Kotei Penguin 2gou. Endou debía detenerlo para ganar y usó un as que acababa de sacar de su manda, Daburu Goddohando (Mano Celestial Doble). Nuestros jugadores empezaron a encadenar una técnica definitiva detrás de otra: Shippuu Dasshu (Entrada huracán), Tatsumaki Senpuu (Torbellino dragón)... El balón llegó a Shuuya quien, usando con Endou y Kabeyama el Inazuma ichigo otoshi (Súper Trampolín Relámpago), rompieron el Furido pawā shīrudoen (Escudo de fuerza total). Así acabó el partido.

En el vestuario les abracé a todos y me detuve en Gouenji. Todos estaban celebrándolo y nosotros nos mirábamos. Me acerqué a él hasta ponerme a un paso de él. Le pegué una bofetada que sonó en todo el edificio y todos se giraron a tiempo para ver a Shuuya sobándose una mejilla con cara de sorpresa y a mi abrazándole.

- Eres un tonto. Casi lesionas a Endou.-le dije apretando el agarre.

- Siento el susto.-dijo sonriendo.- Pero ha sido un poco drástico, ¿no crees?

- Tal vez.-dije mirándole a los ojos.

Cuando le abracé me sentí reconfortada y segura. Una llama se encendió y de eso estoy segura. Me separé de él roja cual tomate maduro y sin mirarle a la cara de nuevo.

- Tal vez, lo merecía.-dijo con una sonrisa alzando mi mirada.

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GLOSARIO:

Oono Densuke: Peter Drent    Narukami Kenya: Alan Master    Masaru Anzai : sr. Black

Gojou Masaru: Gus Martin.

El amor de rubí. Parte 1.VivirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora