CAPÍTULO 9: La charla de Eris e Irene

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Irene quería saber cosas sobre Ares, así que decidió aceptar la oferta que Eris le ofrecía, contarle todo lo que sabía.

-Prometeme que todo lo que me contarás sea verdad- dijo Irene.
-Lo prometo, si quieres confirmarlo por si no te lo crees. Coméntaselo a Ares- dijo Eris con una sonrisa extraña.

Irene decidió ignorar la rara expresión que hizo Eris y puso todo su sentido auditivo en atención a lo que Eris le iba a contar.

-Voy a comenzar- avisó Eris- Ares, no es un mortal, Ares es el dios de la guerra. Sus padres son Hera y Zeus- dijo para comenzar.

La mirada de Irene se agrandó, como estaba tan impactada, se apartó unos pasos de Eris.

-Estás mintiendo, ¿Cómo va a ser Ares un dios?- dijo Irene incrédula.
-Hasta se llama igual, Ares, ni se molestó en decir un nombre falso- comentó Eris como prueba de que no miente- seguro de que llevaba armadura cuando lo encontraste- aposto, cosa que era cierta.

Irene estaba hecha un lío, así que decidió no seguir hablando con esa desconocida y preguntarle directamente a Ares si era verdad que era el mismísimo dios de la guerra o solo se llamaba igual que él.

♧.♧.♧

Ares se encontraba en casa, estaba ayudando a Asclepio a hacer determinadas tareas que ya no podía realizar sin ayuda, el dios estaba encantado de ser de ayuda, debido a que está viviendo de gratis al menos quería aportar ayuda a la casa.

Estaba limpiando unas telarañas del tejado cuando Irene entró en casa algo alterada, a Ares le sorprendió el estado de su novia y no era el único, su padre también estaba extrañado debido a que no solía tener esa actitud.

-Ares, ¿puedo hablar contigo de un asunto?- dijo Irene impaciente
-Claro- dijo Ares bajando de la escalera de madera.

Irene y Ares se fueron afuera para hablar con más intimidad, Ares se apontocó en un árbol e Irene se puso en frente suya. Decidió sacar ya el tema.

-Una chica de pelo verde oscuro me ha dicho que eres el dios de la guerra Ares- dijo Irene- ¿Es cierto?- preguntó.

A Ares se le agrandó la mirada, ¿una chica de pelo verde oscuro? Solo podía ser Eris, seguramente era uno de sus malévolos planes, Eris siempre ha estado obsesionada con Ares así que al dios no dudó pensar que Eris estaba planeando algo para conquistarlo de una manera muy insana.

-Es cierto, soy Ares, el dios de la guerra- confesó Ares- mi madre Hera me ha expulsado del Olimpo- añadió.
-¿Por qué no me lo has contado?- preguntó Irene muy impactada por la verdad.
-Porque en el Olimpo todos me odian y temen por ser eso, el dios de la guerra- contestó Ares- ya me he cansado de ser el rechazado de mi familia- añadió.
-A lo mejor es algo muy personal, pero ¿por qué te expulsaron del Olimpo?- preguntó Irene.
-Me acosté con Afrodita, pero estaba casada y no lo sabía- dijo Ares- no dejo de arrepentirme- añadió.

Irene en seguida comprendió lo que le pasaba a Ares, se había cansado de ser "el dios de la guerra" debido a que ese título le había llevado a ser el rechazado del Olimpo, conocía todos los mitos de Ares y lo ponen de un hombte violento, sanguinario y sin piedad cuando en realidad es muy bondadoso y amable. Estaba claro que todos los dioses la tenían en contra de él.

-Entiendo que me quieras dejar por saber la verdad- dijo Ares con un tono de tristeza- estoy acostumbrado- añadió apartando la mirada.

Irene  se acercó a Ares y le besó en sus rudos labios que poseían una cicatriz en una de sus comisuras, el dios correspondió el beso de la chica pelirroja.
Al terminar, Irene abrazó a Ares, el dios no entendía nada estaba encantado, pero no entendía porqué Irene no le tenía miedo sabiendo que es el dios de la guerra.

-No voy a dejarte, para mí sigues siendo el hombre cariñoso y bondadoso del que me enamoré- dijo Irene.

Esas palabras conmovió al dios, pero pensó algo muy importante, Irene era mortal y él no, una eternidad sin Irene para él era sufrimiento así que decidió volverse mortal.

-Irene, debo ir a un sitio, ahora vuelvo- dijo Ares.
-¿A dónde vas?- preguntó la mortal sin entender.
-A un lugar para volverme mortal- contestó Ares con una amplia sonrisa.

Irene se quedó de piedra con la respuesta de Ares.

Un Ares enamoradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora