CAPÍTULO 15: La transformación de Irene

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Ares y Hermes salieron afuera al jardín para pelear.
Ares estaba muy furioso, no pensaba perdonar al dios mensajero por haberse acostado con Irene usando su aspecto.
El dios de la guerra invocó su lanza y fue directo hacia Hermes, este intentó esquivar el golpe, pero fue en vano, Ares vio la intención de esquivar y cambió la dirección del golpe.

Hermes acabó con una raja en su brazo izquierdo, le dolía muchísimo, era una herida bastante profunda, demostraba eso saliendo  mucha sangre de la herida mencionada.
Hermes usando su velocidad inhumana le dió un puñetazo a Ares en la cara, pero a este no le pareció dolerle mucho.

-¿Eso es todo lo que sabes hacer, Hermes?- preguntó Ares después de que Hermes le diera el puñetazo- soy el dios de la guerra, eso no me hace ni un rasguño- añadió en tono burlón porque había mucha diferencia de habilidades de pelea entre Hermes y él.

Hermes de repente, sintió un terror por todo su cuerpo, la expresión de Ares pasó de ser seria a una sonrisa terrorífica. Ares lamió la sangre de Hermes que había en su lanza y le dió golpes consecutivos con su lanza y puños, por la intensidad de los golpes, apareció viento con polvo que no dejaba ver nada.

Minutos después aparece un Hermes maltrecho con muchas heridas y moratones y Ares estaba perfectamente, Hermes se levantó y se fue para no acabar en peor estado.
Ares decidió entrar en la casa, decidió que ya había cobrado venganza.
Irene estaba sentada en un diphros y al ver al dios entrar por la puerta corrió hacia él y le besó.

-Ares, de verdad que lo siento, si hubiera sabido que era Hermes no me habría acostado con él- dijo Irene.
-No es tu culpa, ya lo dije antes, no te culpo de nada- djo Ares.

♧.♧.♧

En el Olimpo:

Hermes acababa de llegar, le dolía todo el cuerpo, Afrodita estaba dándole el pecho a Eros cuando vio a Hermes supo que su plan tuvo efecto.

-Muchas gracias Hermes- dijo Afrodita abrazando al nombrado- ven, voy a curarte las heridas- añadió.

Hermes se sentó en una butaca y minutos después Afrodita vino con unas vendas para curar a Hermes.

-Se ha empleado mucho contigo- comentó Afrodita- Hefesto no montó esto cuando me acosté con Ares- dijo Afrodita con algo de desprecio.
-Hefesto no es violento, aunque si es verdad que no hizo nada al respecto- dijo Hermes.
-Exacto, al menos haz algo ¿no?- dijo Afrodita vendándole el brazo a Hermes.
-Aparte del divorcio, no ha hecho nada más- dijo Hermes.

♧.♧.♧

Al día siguiente:

Ares e Irene estaban en el jardín, estaban esperando a Apolo para que los recojiera y los llevara al lugar donde Zeus iba a convertir a Irene en diosa.
Unos minutos después, Apolo apareció en el jardín donde estaban.

-Hasta que por fín llegas- dijo Ares.
-No protestes y vamos- dijo Apolo por la reprocha de Ares.

Irene y Ares siguieron a Apolo y se montaron en el carro del último nombrado, el carro iba tirado por 4 caballos y volaba, Irene se quedó con la boca abierta.

-Esto es increible- dijo Irene, por un momento pensaba que lo que estaba sucediendo no era real.

Una hora después llegaron al templo donde iba a ser realizada la transformación de Irene de mortal a diosa.
Zeus ya estaba allí acompañado de una mujer de pelo largo rubio con ojos azules, Ares le dijo que era su madre, Hera.
También estaba un hombre de pelo rizado negro, que según Ares era Poseidón, Hades también estaba, una mujer de anchos hombros, pelo castaño y ojos azules, que era Demeter y una chica pelirroja de ojos negros que era Hestia.

-Bien, vamos a comenzar la ceremonia- dijo Zeus.

Todos cogieron una daga y se abrieron un corte en la mano derecha, rápidamente cada uno cogió una copa de oro y vertieron  su sangre en ella.
Cuando pararon de sangrar toda la sangre fue reunida en una copa de oro más grande.
Zeus cogió la copa más grande y se la dio a la mortal, esta puso una cara impactada, no sabía que tenía que hacer con ella.

-Chica, debes beber la sangre, así tendrás los poderes divinos- dijo Zeus.
-A lo mejor te sientes algo cansada pero nada más- dijo Hades.
-Si, exácto, no tengas miedo chica- dijo Poseidón para tranquilizar a Irene.
-Se que da algo de asco, pero eso es lo que debes de hacer si quieres ser diosa- dijo Hestia.

Irene no dudó, cogió aire, se tapó la nariz y bebió de un solo trago la sangre de Zeus, Hera, Poseidón, Hades y Demeter.
Al principio se sintió algo cansada, tal como le dijo Hades, después un poco de dolor de estómago. Minutos después sintió su cuerpo y vió una aureola alrededor suya, esa era la señal de que ya era una diosa según dijeron los hijos de Cronos.

-Entonces, ya soy una diosa ¿no?- dijo Irene para asegurarse.
-Pues si, ya eres una diosa, enhorabuena- felicitó Poseidón dándole un golpe en el hombro.
-Ares, hijo- dijo Zeus acercándose a Ares- solo queda esperar a que venga Eris y ya podrás irte- añadió.
-Bien- se dignó a decir Ares y se fue.

Zeus se quedó sorprendido ante la actitud de Ares, no sabía como arreglar las cosas con él.
Puesto a que quiere arreglar las cosas, pero no sabe la manera de hacerlo debido a que ahora ha visto el tipo de hombre que es y ha aprendido a ver más de él que solo su título.

Un Ares enamoradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora