Capitulo 6: Algo extraño.

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El día siguiente me levante muy animada, algo me decía que iba a ser un día muy enérgico, me doy una ducha dedicada a mi cuerpo y bajo rápidamente las escaleras de mi casa, al parecer no hay nadie.

La luz del sol estaba realmente brillante, las casas parecían tener mas brillo al parecer es uno de esos días que irradian paz y alegría, a un que no sabia si era yo o el día, todo a mi alrededor al parecer tenia algún tipo de sentido.

Camino unas cuantas cuadras apreciando todo lo que se cruce en mi camino, las personas, los animales con sus dueños y es allí donde caigo en cuenta de tantos cambios como por ejemplo la sonrisa de idiota que he tenido des que que desperté.

Al llegar a la escuela no me importaba nada, pero no es posible que nadie vea que tan débil estoy, si, a si como leen, el amor vuelve débil a cualquiera, no dejare que me utilicen como la mayoría de las mujeres, no soy estúpida seguro Bruno tiene algún objetivo; a un que mi corazón salte con solo pensar lo.

Entro con la mirada fija en mi asiento realmente no quiero saber de nada ni de nadie y espero que el cielo me ayude y Bruno hoy no venga, me siento débil junto a el y es por eso que debo estar lejos y lo que no me conviene no lo hago a si que lejos estaré bien.

Mi piel se incomoda al sentir lo frío que esta mi asiento, pero no importa si quiero que Bruno no me hable hoy tengo que sentarme en la única silla vacía al lado de la ventana, los únicos puestos que quedan libres están a muy lejos para ser mas exacto en la tercera columna segunda fila, que suerte para mi; mi corazón se siente tan tranquilo ahora que no entablare alguna relación o eso es lo que quiero.

Mi atención la dirijo al  frente a si como lo indica el docente que entra a el aula, después de unos minutos su clase en interrumpida bruscamente por las risotadas de Martha que viene seguida por Bruno, apenas este entra para se estar buscando a algo o mejor dicho a alguien, su mirada se cruza con la mía inmediata mente desvió mi visión a otra parte mi corazón comienza a acelerarse y detesto admitir que estoy temblando.

Comienzo a escribir en mi libreta para distraer mi nerviosismo, siento sus pasos cerca pero le recuerdo una y otra ves a mi corazón que se tranquilice pues no hay manera de que el se siente cerca a mi o al menos eso creo.

-Hola Abigail.-Me llama mientras sus labios dulcemente rozan con mi mejilla, no se si es por el nervio o por que soy realmente estúpida, pero mis manos comienzan a temblar mas casi parezco gelatina.

Lo miro, lentamente detallo como va vestido, lleva un suéter ajustado a su cuerpo con unos jeans holgados color azul, su cabello esta un poco despeinado su piel esta suave o tan siquiera los labios delicados que perfectamente están en su rostro, su mirada es suave pero no puedo evitar sentir como me recorre con ella.

-No piensas responderme el saludo o prefieres seguir acosando me con la mirada hermosa que tienes.-Menciona el ganando se la atención de todo mi salón incluyendo mi profesor.

Al reaccionar, observo a todos en el salón sus miradas solo están pendiente a lo que are o a lo que diré, al momento de fijar mi mirada en Bruno mi corazón se acelera, torpe mente dejo caer el lapicero que tanto me ayudo a controlar mi nerviosismo, el tan formal como siempre se agacha y aproxima el lapicero a mi, no puedo decir nada realmente estoy pasmada.

-Grac...Gracias.-Lo gro articular mientras mi boca se estira lentamente para regalarle una de las sonrisas mas tiernas que en mi rostro se ha formado.

El me sonríe y se gira a ver al chico del lado.-Por favor cambia te de asiento.-Le indica Bruno mientras deja caer su bolso en la silla.

-Claro Bruno.-Le dice el chico mientras se levanta rápido, no se si el se levanto por su cuenta o por sentirse obligado por la mirada de "no te estoy preguntando" que este le a dedicado.

Se sienta a mi lado, pero al parecer eso no le vasto ya que rueda su silla escandalosamente para estar a un mas cerca de mi, todo el salón esta asombrado ya que nosotros somos como enemigos a muerte o al menos siempre que hablábamos terminamos peleando hasta hubo un día en el cual mi puño se estrello contra su cara lastimosamente me dolió mas a mi que a el ya que me vendaron mi mano y el ni se mosqueo, el solo sonrió al parecer es muy fuerte y sobre todo tengo que resaltar de el es el extraño auto control que tiene, por lo general no grita ni se exalta aun que le des puños y cosas a si, el siempre esta sereno.

A si transcurren todas mis clases, siempre evitando lo, por lo general siempre me colocaba a cruzar palabras por quien sea solo para que el no se me acercara mas de lo que lo tenia, si me hablaba lo ignoraba hacia que no escuchaba.

Al salir del salón decido no perder tiempo y colocar me en marcha a mi casa, al dar unos cuantos pasos por el estacionamiento siento unas manos tocar mi hombro, instintivamente me giro sus ojos, sus labios, su cabello negro, su nariz, su boca todo es perfecto, todo te llama a besarle, pero era mas que obvio que no iba a intentar besarle después de lo de la noche anterior, el solo busca burlarse de mi.

-¿Que quieres?.-Pregunto en un tono frió y vengativo.

-¿Te llevo a casa?.-Pregunta el sonriente como si algo bueno le hubiera pasado a noche, seguro que se acostó con Martha y por eso hoy esta sonriente.

-¿Que pasa a caso ayer te acostaste con Martha y por eso vienes con ese humor?.-Le pregunto mientras solo sigo caminando.

-¿De que hablas?.-Pregunta girando me y acercando mi rostro al suyo mientras si brazo se posa en mi cadera y lentamente se une a mi cuerpo.

-Suelta me.-Le indico intentando alejar me de el, pero el lo impide.

-Lo que quiero es besar tus labios y adueñar me de tu ...-Solo puedo escuchar, mi mente quedo tan saturada que ni si quiera soy capaz de hablar. Creo que al parecer me quedare con la duda de que quiere adueñarse ya que no planeo preguntar le.

-Calla y deja tus tonterías.-Le grito mientras peleo contra el para zafarme de su fuerte agarre.

-¿No quieres que te bese?.-Pregunta mientras se acerca tanto ami como para sentir su aliento sabor a menta. Nuestras respiraciones se confunden, su mano sube y baja por mi espalda.

-No, claro que no.-Le susurro aun que mi cuerpo me indique lo contrario.

-Eso no es lo que querías anoche.-Me susurra mientras su nariz acaricia a la mía y roza sus labios con los míos.

-Eso fue anoche.-Le digo mientras apoyo mi peso en la punta de mis pies y paso mis brazos por su cuello, dejando de luchar contra mis instintos.

-Ha si.-Dice el mientras sus brazos rodean mi cintura y carga mi peso.-Tus acciones dicen otra cosa.-Me dice mientras sus labios se unen mas a los míos pero sin comenzar a besarnos a un.

Sus ojos lentamente se sierran mientras que yo solo reparo todo su rostro, esta lleno de paz y de belleza, realmente es tan hermoso. Mis ojos logran divisar entre la multitud a Martha, esta tiene una cara furiosa, pero al ver que la observo esta sonríe, eso el algo extraño, la observo detenidamente mientras la veo marcharse, al girar me doy cuenta de que tiene una cámara decido no prestar le atención, cualquiera podría tener una cámara.

Al Bruno darse cuenta que nunca llegaba el beso decide abrir sus ojos, mi cara es de burla, lo observo mientras solo me rió, al notar su cara de confusión suelto una carcajada fingida realmente esto no me causa gracia pero no puedo dejar lo de anoche en el olvido, el se burlo de mi.

 -¿Acaso quieres que te bese?.-Le pregunto chistosa mientras que el sonríe algo fingido, a un que me sonría se que esto le dolió.

-Si quiero que me beses.-Me dice mientras me baja, lentamente mis pies vuelven a su posición en el suelo, sin dejar de mirar me pasa su brazo por mi hombro y me incita a seguir caminando.


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Espero les guste el capitulo. <3 <3 :)...





Las dos caras de Bruno.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora