Cap 8 Negociación con el enemigo

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Consigo morder su dedo, y no lo hago precisamente despacio, además de que le miro a los ojos de manera desafiante. Ogron suelta un gruñido de frustración, claramente está irritado ya que me aprieta cada vez más fuerte la cara.

-Bien, si quieres jugar brusco, entonces que así sea. Pero recuerda mis palabras, siempre consigo lo que quiero -me amenaza con el ceño fruncido.

Decido ignorar sus palabras y me limito a apretar más los dientes sobre su mano, y noto como sus uñas se entierran en mi mejilla a la vez que ruidos de dolor y frustración salen del mago.

- ¡Ya es suficiente!, Ya he tenido suficiente de tus tonterías, nos vamos -me agarra del cuello con la otra mano y me lleva con él sin cuidado.

La sensación de asfixia que siento me puede. Trato de seguir sus pasos a trompicones mientras lucho por respirar, pero le da igual.

- ¡Mmm! -trato de chillar entre sus dedos.

Él sacude su cabeza con cierta decepción por mi pobre intento de escapar.

-No seas tan ruidosa, no queremos que nadie nos encuentre, ¿No? -cambia su tono a uno más arrogante y sarcástico-, ven conmigo sin hacer ruido, y tal vez así consigas que tu castigo sea menos severo. Resístete y haré del resto de tu patética vida un infierno -me suelta con una sonrisa de satisfacción.

La ira me crece por dentro, y no me lo pienso dos veces. Le vuelvo a morder los dedos con intención de llevarme algún pedazo de carne.

Frunce el ceño muy enfadado, pero aun así no los afloja ni un poco, sino todo lo contrario.

- ¡Lo único que te haces a ti misma es daño! -me grita con frustración-, ¡Para ahora si sabes lo que te conviene, o siente la cólera del Círculo Negro! -su rostro refleja lo serio que se ha puesto.

Reconozco que eso me ha devuelto a la realidad, me estoy enfrentando al mago más poderoso de ellos, le estoy haciendo enfadar. No puedo huir ni volar, y mi magia no le hace efecto... Podría matarme si así lo quisiera y no podría impedirlo. Le dejo de morder y no me atrevo ni a mirarlo a los ojos del miedo que siento.

-No quieres tener más problemas con el Círculo Negro, deberías estar agradecida de que no estoy siendo tan violento como podría ser -afirma con labia al ver que me he asustado.

Trato de darle un cabezazo, pero no llego y me estampo contra su pecho. Ogron suelta una risa burlona. Si no fuera tan alto...

-Eres muy salvaje, eso te lo reconozco -murmura con gusto, pero su expresión se torna más oscura-, pero te vienes conmigo, y si fuera tú, no me lo pondría difícil -eleva su tono de voz, por lo que me quedo quieta tratando de calmarme.

Al darse cuenta, afloja su agarre sobre mí, por lo que tomo una gran bocanada de aire. Retomamos la caminata, pero esta vez vamos al mismo ritmo, sin resistencia, aunque me lleva por el brazo agarrada.

- ¿No está mejor así? -inquiere tratando de buscar mi mirada, pero la evito-, las cosas pueden ser así de fáciles si cooperas, así no tienes nada que temer.

Su falso tono tranquilizador me pone los pelos de punta, pero finjo que me da igual, simplemente asiento sin mirarlo.

-Bien, sigue así -me ordena con suavidad-, ahora vamos a tener una pequeña charla tú y yo, en la privacidad del gran despacho de la directora -su tono es tan arrogante como insultante, pero me muerdo la lengua para no quejarme.

No puedo evitar lanzarle una mirada de asco. Estar a solas con él... No.

-No tienes elección, si eres capaz de comportarte y tener la boca cerrada, seré más delicado contigo -dice con una sonrisa burlona-, por el contrario, si te resistes, tendrás que asumir las consecuencias... ¿Ha quedado claro?

El Círculo de lo Inexplorado (Ogron y tú- winx)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora