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La velocidad con la que aquellos videos se habían expandido era increíble, el hospital donde Dongmin hace minutos había sido ingresado estaba rodeado de personas, a la seguridad del edificio les era difícil atender la situación, pues las personas bloqueaban el paso de las ambulancias y los autos que se dirigían con emergencias al hospital.

Pero no era el único desastre, el edificio donde vivía Dongmin también estaba siendo invadido de personas, al igual que aquella cafetería donde trabajaba y la urbanización fuera del portón de seguridad.

Los fans estaban completamente locos buscando aún que sea un poco de Dongmin, sin embargo este no podía siquiera mirar su teléfono, el mismo que no dejaba de vibrar por mensajes y llamadas, de pronto todos tenían su número, todos lo llamaban, todos querían saber de el y era horrible, todo estaba siendo demasiado para el rubio

—Me temo que la situación se está saliendo de control, sin embargo debes guardar un reposo Dongmin, esa sangre fue un aviso de algo peor, tenemos que evitar un aborto, así que ¿Qué te parece si cumplimos el reposo requerido?

La madre de Bin miraba con tristeza el rostro de Dongmin, recordaba cuando perdió a su segundo bebé y lo mal que se sintió después de eso, definitivamente no podía permitir que Bin y Dongmin pasarán por lo mismo.

—Me lo llevaré a Busan, estará a salvo conmigo mientras la situación se resuelve—El doctor miro a la mujer y asintió comprensivo.

—Otra cosa, creo que es necesario que llamen a un personal de seguridad que los saque del hospital, ni siquiera pueden estar solos aquí adentro, el rumor se está extendiendo por los pasillos, en cuestión de nada pueden invadir está habitación.

La mujer asintió mientras Sanha entraba a la habitación con el teléfono en su oreja, colgando de inmediato cuando vio el rostro contraído de Dongmin y esas lágrimas querer salir en cualquier momento, corrió rápidamente a la camilla abrazando al rubio, que ahora tenía una pijama cortesía del hospital.

—Minhyuk me llamó, la empresa enviará protección pronto para ti, saldremos de aquí y luego tendrás que ir a la empresa según lo que Minhyuk dijo...

—¡De ninguna manera! Ira conmigo a Busan, Dongmin no necesita abrumarse con nada, su embarazo está delicado y Bin jamás me perdonaría haber aceptado que Dongmin fuera a defender su carrera antes que la vida de su hijo.

Aquel comentario llamó la atención del rubio, aún que fuera grotesco la señora Moon tenía razón, Bin podía reaccionar de esa manera si el eligiera ir a la empresa antes que a un lugar para ponerse a salvo.

Y como si las invocaciones mentales existieran, el teléfono de la señora Moon empezó a sonar reflejando el número de su hijo en pantalla.

¡Mamá! ¡¿Que paso?! ¿Que hacen en un hospital? ¿Dongmin y la nena están bien?

Dongmin noto de inmediato la incertidumbre y miedo en la voz de Bin, ni siquiera había preguntado por los vídeos o las pruebas que habían de su relación.

Tranquilo cielo, fue un susto pero está mejor, lastimosamente gracias a la situación tendré que llevarlo conmigo a Busan hasta que todo mejore.

¡Si! Mamá por favor cuida de mi Dongmin y mi bebé por favor, iré de inmediato a Busan, los veré allá.

Los ojos de Dongmin se abrieron, pues su gira un no había terminado.

—¡Espera Bin!— grito antes de que este colgará, haciendo que su suegra le cediera el teléfono para que pudiera hablar con el azabache—Tú gira...

Dijo apenas tuvo la llamada cerca de el.

Tú y mi hija son lo más importante ahora mismo cielo, espérame en casa de mamá iré por ti.

¿Tan fuerte era el amor del azabache por el? Que lo hacía capaz de enviar todo al diablo con tal de estar con el, de protegerlo de todo aquello que ahora estaba causando demasiado en su vida...

El rubio respiro con sus manos en su vientre y se recostó en los brazos de Sanha, si Bin pararía su gira por el lo menos que podía hacer era ser obediente y considerado.

Así que cuando la seguridad llegó por el, fue escoltado, con su suegra y mejor amigo hacia su auto, aún si la multitud arremetían contra el, no podían tocarlo, estaba seguro, aún que podía escuchar sus palabras.

Muchos insultos y palabras hirientes a su persona.

Nada podía dañarlo porque Bin lo quería y eso era lo único que importaba después de todo.

En silencio viajo a Busan con su suegra, sin sus pertenecías, sin nada más que su teléfono, no tenía siquiera ropa, Sanha había decidido quedarse, pues Dongmin había sido notificado de desalojamiento en su departamento por las personas que estaban invadiendo los espacios de los demás inquilinos buscándolo a el, por lo tanto Sanha se encargaría de recoger sus cosas y guardarlas en su departamento, hasta que el rubio decidiera que hacer con ellas.

Las manos del rubio acariciaba su diminuto vientre mientras cantaba para su bebé, en la antigua cama del azabache, en la tranquilidad de un hogar, como si hace unas horas no hubiera sido atacado por una multitud de personas, lo habían desalojado, habían invadido el lugar donde trabajaba anteriormente, en su mente no podía borrar el rostro burlón de Irene, los flashes los insultos, las manos en su ropa jalando la tela de las mismas, las palabras que le gritaban.

"¡Perra ofrecido! ¡Bin oppa no es tuyo maldito! ¡Escoria! ¡Muerto de hambre!"

Cada una más fuerte que la otra, se preguntaba ¿Eso era amor de un fan hacia su artista favorito? ¿Ese amor les daba ese derecho? ¿Sus padres ya se habrían enterado?

Entonces su voz se rompió y aquella melodía paro, Dongmin lloró, como no lo había hecho por demostrar ser "fuerte" cuando la verdad estaba tan roto por dentro que no podía hacer más que aferrarse a su vientre y llorar.

Si antes había tenido la ilusión se ser un bailarín profesional reconocido, ahora solo lo conocerían por ser "el amante de Bin"

Ni siquiera escucho cuando el azabache había llegado apresurado, sin detenerse en hablar con sus padres, solo corrió en dirección a su antigua habitación abriendo la puerta desesperado, encontrando en su cama a Dongmin llorando a mares mientras sostenía su vientre.

Bin trago grueso cerrando la puerta tras de él, se acercó a pasos lentos a su novio para envolverlo en sus brazos, el mismo que se aferró con fuerza al cuerpo del contrario

—Ya amor... Estoy aquí, nada te pasará, ni a ti ni a la nena—La verdad Bin ni siquiera había pensado en la gravedad del asunto o cuento pudiera afectarle.

El había estado descansando de los ensayos cuando las redes empezaron a colapsar, la empresa empezó a llamarlo y todos parecían alertas.

Para su sorpresa la cara de Dongmin estaba en todas partes, comentarios ofensivos y horribles hacia el, iban y venían, Bin se sintió impotente y aún más cuando las transmisiones en vivo alegaron que Dongmin estaba en un hospital.

Entonces la remota idea de que algo le hubiera pasado a Dongmin o a su nena fue como un explosivo dentro de él, mando al diablo la gira, la empresa, los fans y todo lo que estuviera dañando a sus amores en ese momento.

Porque él era consciente de su posición sin embargo, pensaba en Dongmin y su bebé como el mayor regalo de vida, los únicos que estarían ahí el día que el dejará de ser "Moon Bin el idol" porqué claramente nada es para siempre, excepto lo que construyes con tu corazón.

Cómo esa pequeña familia de tres que estaba a punto de surgir.

Llegando al momento en dónde tenía a Dongmin en sus brazos pudo darse cuenta lo mucho que estaba afectando la situación a su rubio bonito

Bin sabía que debía hacer, por Dongmin y por su nena.

El debía confirmar su relación.

Car's outside (+18) | BinwooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora