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El teléfono de Bin empezó a sonar, sabía que eso pasaría, había salido de la empresa corriendo sin decir nada, así que posiblemente estaban preocupados por el.

Sin embargo el preocupado fue el al ver que no era el manager quien lo llamaba si no Jinwoo.

¿Hyung?

Dime que no estás en el centro comercial.

¿Que?

Te vieron salir de la empresa y te siguieron a un centro comercial Bin, hay personas esperando por ti afuera¿Dónde estás?

Mierda... En el estacionamiento.

Tienen que salir de ahí, la seguridad del centro comercial no les permitió a las personas entrar, así que busca una salida de emergencia y sal de ahí antes que estés rodeado de gente.

Bien.

Ah y no dejes que nadie vea a Dongmin...

Lo se..

Bueno.

El azabache colgó el teléfono y rápidamente tomo la mano del menor, si lo habían visto salir con su auto entonces reconocerian el vehículo, miro el auto de Dongmin...

Si eso serviría.

—Vamos, sube—el rubio aún que no entendía nada, solo se subió al asiento del copiloto mientras Bin abrochaba su cinturón rápidamente.

Subió las ventanas y empezó a conducir, estaba nervioso sin embargo no tenía miedo, era una situación repentina pero no algo a lo que ya no estuviera acostumbrado.

Al salir del estacionamiento pudo ver qué efectivamente había un gran grupo de fans con su teléfono grabando la entrada del centro comercial, esperando que el cualquier momento el saliera, se sintió un poco mal por engañarlas, pero el no estaba ahí para exhibirse, simplemente quería sacar a Dongmin de ahí.

El sollozo del menor lo hizo ver en su dirección.

—¿Que pasa? ¿Por qué lloras?

—Esto es mi culpa, no debiste venir Bin.

—¿Que?... Por supuesto que debí venir, ese tipo tenía cara de abusador Dongmin, quien sabe lo que hubiera hecho si alguien no lo ponía en su lugar.

—Aún así era mi responsabilidad y como siempre termine asustado y llorando como un imbécil—el menor limpio sus lágrimas con ferocidad, como si quemarán su piel.

Bin trataba de concentrarse en el camino pero las ganas que tenía de abrazarlo y llenarlo de besos eran inmensas.

El teléfono de Bin empezó a sonar nuevamente, sin embargo el solo lo saco de su bolsillo y lo apagó sin siquiera ver el remitente.

—Ya paso Dongmin, vamos a casa ahora.

El menor asintio aún con mil cosas en su cabeza, a pesar de que le gustaba la atención del mayor y como estaban cambiando "su relación" habían momentos como este en dónde hubiera preferido que todo siguiera como estaba antes, solo una noche, sexo y nada más.

¿Estaba bien pensar así?

Incluso se sentía egoísta cuando pensaba así, Bin nisiquiera se notaba molesto con el por el accidente o por incidente de los fans.

Entonces ¿Por qué siempre se sentía culpable de cada desarreglo que Bin cometía si este lo hacía sin molestia? Como si...estuviera enamorado de él...

¿Bin estaba enamorado de él?

No.

Deja de pensar estupideces, el es una persona amable, humilde y cariñosa por naturaleza, nunca hay que confundir la amabilidad con el enamoramiento.

Cuando estuvieron en la casa del mayor, Dongmin se sentía perdido, confundido y al mismo tiempo decaído.

—Bien, debo resolver esto, llamaré a Jackson—dijo el mayor tomando su teléfono para encenderlo.

Dongmin asintió y con un puchero prefirió sentarse en el sofá, con sus codos apoyados en sus rodillas y sus manos en su cara, si Bin recibía una amonestación sería su culpa, nunca debió salir con su auto.

Desde la sala Dongmin escucho la voz del mayor como si estuviera discutiendo con alguien, decidió no interrumpir y esperar que todo estuviera bien para Bin o el se sentiría peor.

Sin embargo cuando lo vio bajar su mandíbula estaba apretada supo que algo estaba mal.

El mayor fue directamente a la cocina y de los estantes saco una botella de whisky.

—¿Bin?...

—Hmm

—¿Está todo bien?

El mayor se sirvió un trago y lo bebió sin importar que no tuviera hielo y la sensación caliente que quemaba su garganta.

—Me iré mañana.

Los ojos de Dongmin se abrieron con sorpresa.

—Pero si aún falta una semana y unos días para que comience la gira.

—La empresa decidió que podía continuar mis ensayos en Daegu...

—Oh... Entonces debería recoger mis cosas y volver a mi departamento—_con un nudo en la garganta el rubio se dió vuelta para ir a la habitación del mayor, sin embargo este lo detuvo tomando su brazo con delicadeza.

—No tienes que irte, puedes quedarte aquí hasta que vuelva Dongmin.

—No puedo hacer eso Bin, además estoy pagando el arriendo de mi departamento, sería injusto que lo pagará sin vivir en el.

—Entonces deja de pagarlo y mudate conmigo.

Dongmin enmudeció al escuchar aquello, su corazón latía con fuerza y su estómago revoloteaba con emoción, sin embargo...

—No puedo hacer eso.

—¿Por qué no?

—Porque está mal, sería demasiado aprovechado, eh estado trabajando por tener mis propias cosas no puedo echar todo a la basura y depender de ti, no está bien.

El mayor tragó grueso y asintio, sintiendo el rechazo de Dongmin en lo más profundo de su ser, el sabía que Dongmin tenía razón sin embargo se preocupaba por el, dentro de poco vendrá la temporada donde hará bastante frío y el departamento de Dongmin no era muy cálido que digamos, solo quería estar seguro y tranquilo con el hecho de que Dongmin estuviera seguro y cálido miente el no pudiera cuidarlo.

¿Estaba mal eso?

—Entiendo... Aún así ¿Podrías quedarte está noche?

El menor suspiro y asintio, lo menos que quería era separarse de Bin.

Fue así como por un momento todo lo que los abrumaba hubiera desaparecido, cuando sus labios se encontraron y sus corazones se sincronizaron, el tiempo se detuvo a su favor permitiéndole a ambos demostrarse con un beso lo que sus bocas eran incapaces de pronunciar.

Eran solo Dongmin y Bin.

O quizás no solo habían dos en ese momento.

Car's outside (+18) | BinwooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora