Capitulo 14

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DOS MESES DESPUÉS.

Después del incidente en la cafetería, decidí alejarme completamente de esa zona y enfocarme a tiempo completo en mis pasantías de fotografía. La experiencia en el estudio fue una distracción necesaria y, a pesar de todo, encontré un refugio en mi trabajo.

Jungkook, por su parte, ha enfrentado varios inconvenientes debido a la intensa atención de la prensa. A pesar de nuestros esfuerzos por mantenernos discretos, nos han captado juntos en varias ocasiones, sin importar cuánto tratemos de escondernos o de cómo me cubra.

Mi relación con Jimin y Tae ha crecido enormemente; los considero grandes amigos y parece que ellos también me valoran de la misma manera. Siempre me están enviando mensajes, ya sea para contarme algo divertido de su día o para compartir fotos espontáneas de los chicos. Su apoyo y amistad han sido un gran alivio.

Rose y Mingyu, como siempre, han estado a mi lado. Cuando les conté lo sucedido en la cafetería, estaban tan indignados que casi querían ir a incendiar el lugar. Pero entendí que la vida tiene su propio modo de hacer justicia y que eventualmente recibiría su merecido.

Ayer, me encontré con Jungkook y, a pesar de mis esfuerzos para evitar ser vista, era casi imposible no llamar la atención. Revisando mi teléfono más tarde, vi que ya había una nueva publicación en las redes sociales. La noticia se había esparcido rápidamente y, aunque trataba de ignorarlo, sabía que no podríamos escapar de la atención que seguía girando en torno a nuestra relación.Me molestaba no poder disfrutar de mi relación con Jungkook en privacidad. Era mi primera relación y, a pesar de lo especial que era para mí, no podíamos compartirla abiertamente. No podía subir fotos juntos, aunque teníamos varias que me encantaría mostrar, ni salir de la mano tranquilamente como una pareja normal. Parecía que este tipo de normalidad estaba fuera de nuestro alcance hasta que llegara el momento de hacer pública nuestra relación, si es que alguna vez eso fuera posible.

Decidí concentrarme en lo que podía controlar y terminé de arreglarme para ir a las pasantías en la academia. La rutina y el enfoque en mi trabajo eran lo que me ayudaban a mantenerme ocupada y a dejar de lado la frustración de la situación actual.

Terminé de arreglarme y bajé a la cocina, donde encontré a Mingyu en la mesa, con una selección de cafés y galletas.

— Hola, ojitos. ¿Te gustaría merendar antes de que te vayas? — dijo, sonriéndome y ladeando la cabeza.

— Hola, osito. Claro que sí — respondí con una sonrisa, sentándome a la mesa.

— Estás muy linda hoy — comentó mientras se metía una galleta en la boca. — Terminemos de merendar y te llevo — agregó con una sonrisa.

— Siempre estoy linda — le dije, girando los ojos con una carcajada.

Pues que no se note la humildad.

Mientras disfrutábamos de la merienda y charlábamos animadamente, mi celular sonó. Al ver la pantalla, noté que era un número desconocido. Decidí esperar a terminar con Mingyu antes de contestar.

— Vamos, te llevaré — dijo Mingyu, guardando unas galletas para Rose.

— Deja que me lave los dientes primero — le respondí con una sonrisa.

Nos subimos al auto de Mingyu y nos dirigimos hacia las pasantías.

Mientras Mingyu y yo estábamos en camino, revisé mi teléfono y encontré un mensaje de un número desconocido. Al abrirlo, leí que se trataba de Sejin, el manager de Jungkook. Se presentó formalmente y me citó para una reunión en un restaurante.

Mensaje de Sejin:

Hola, soy Sejin, el manager de Jungkook. Quisiera hablar contigo en persona. Por favor, acompáñame al restaurante "Le Jardin Secret". Espero tu confirmación. Gracias.

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