Capitulo 16

59 5 1
                                    

Holiis..!!

Seguimos con la perspectiva de Jungkook.

*~~*

Despertamos con el sonido de la alarma, eran las 5:30 a.m. Habíamos dormido apenas tres horas, después de una noche en la que nos dejamos llevar por el placer. Rachell se preparaba para levantarse y despedirse, planeando luego seguir durmiendo un poco más.

Me duché rápidamente y me vestí de manera cómoda. Al bajar a la cocina, Rachell me esperaba con una taza de café humeante y una sonrisa cálida.

—Toma, y apresúrate para que no llegues tarde —dijo, acercándome la taza.

Me tomé el café de un sorbo y tomé mi maleta mientras me dirigía hacia la puerta, con Rachell a mi lado.

—Te voy a extrañar estos días —dijo, puchereando. —Pero espero que todo salga excelente y te estaré esperando ansiosa.

—Pasarán volando los días. Estaremos hablando seguido, y ya sabes que puedes quedarte aquí el tiempo que quieras —respondí, acercándome a ella para darle un abrazo fuerte.

Ella me correspondió el abrazo, y nos despedimos con un beso lleno de nostalgia, con la promesa silenciosa de que pronto estaríamos juntos de nuevo.

Me alejé del apartamento y me dirigí al ascensor, que se abrió al instante, llevándome hacia la salida del edificio. Allí me esperaba la camioneta con los chicos, listos para llevarnos al aeropuerto.

—Hola, Kook —saludó Tae con una sonrisa. —¿Lograste despedirte de Rachell?

—Sí, quedó en el apartamento durmiendo —respondí, mientras me estiraba y bostezaba.

Tae asintió, su mirada divertida elevando las cejas de una manera juguetona. Yo simplemente rodé los ojos y me acomodé en el asiento, tratando de descansar un poco más. Los demás chicos estaban dormidos. Tae, siguiendo mi ejemplo, se acomodó en mi hombro, apoyando su cabeza para dormir.

***

El viaje duró aproximadamente 14 horas y 19 minutos desde Seúl hasta Nueva York. Ya tenía energía porque prácticamente dormí durante todo el vuelo.

Llegamos al hotel y subí a mi habitación para darme una ducha y cambiarme. Aproveché para escribirle a Rachell, ya que en Seúl debían ser las 10:00 PM, mientras que aquí en Nueva York eran las 09:00 AM, con una diferencia de 13 horas.

Rachell no respondió a mi mensaje de inmediato, pero pronto me llamó. Hablamos durante un par de horas, poniéndonos al tanto de todo y riéndonos como siempre. A pesar de la distancia, sus palabras y su voz me dieron un gran consuelo. La conexión entre nosotros seguía tan fuerte como siempre, y el tiempo pasó volando mientras nos compartíamos nuestros días y sueños.


Dejé mi celular a un lado y me recosté en la cama, mirando al techo. La molestia por las palabras de Sejin a Rachell no me dejaba en paz.

Un golpe en la puerta me sacó de mis pensamientos. Me levanté y la abrí; eran los chicos.

—Vinimos a buscarte para comer, Jungkook —dijo Jin, con una sonrisa en el rostro.

—Bien, déjame cepillarme los dientes —respondí mientras me dirigía al baño.

—¿Cuál es tu cara de pocos amigos? —preguntó Jimin, notando mi malestar.

—Sejin le dijo a Rachell que se alejara de mí y que dejara su amistad con ustedes —solté, furioso.

Los chicos se quedaron boquiabiertos, sus ojos reflejaban incredulidad ante lo que acababa de decirles.

SOLO UNA FANDonde viven las historias. Descúbrelo ahora